Rajoy, sobre la corrupción del PP: “Esto se acabó y aquí ya no se pasa por ninguna”
Mariano Rajoy ha dejado para el final el asunto de la corrupción que azota a su partido y que está llevando al borde de la desaparición a su formación en la ciudad de Valencia. A pesar de la gravedad del problema, Rajoy sólo le ha dedicado un minuto durante su discurso ante los diputados del grupo del PP en el Congreso. Y ha sido para insistir en que los detenidos ya han sido suspendidos de militancia, “la decisión más fuerte que podemos adoptar en este momento”, y que se tomarán nuevas medidas según sean las declaraciones ante los tribunales. “Esto se acabó y aquí ya no se pasa por ninguna”, ha sentenciado antes de que se disolviera la reunión de los parlamentarios.
El líder del PP no ha especificado si “lo que se acabó” es la corrupción o la actitud permisiva de su partido hasta hace poco y la tardanza en hacer limpieza interna. “Significa tolerancia cero ante la corrupción”, ha aclarado a eldiario.es Alfonso Alonso. Mientras el líder del PP prometía dureza, la dirección espera todavía que Rita Barberá deje su acta de senadora ante los indicios de corrupción puestos de manifiesto por la Operación Taula y por la detención de todos los concejales del grupo municipal en el ayuntamiento.
El resto de la arenga de Rajoy a los suyos se ha centrado en lo que ha repetido desde el 21 de diciembre. Que solo un Gobierno presidido por él y con el apoyo del PSOE y Ciudadanos resulta una apuesta “seria” para la gobernabilidad de España. El jefe del ejecutivo en funciones ha vuelto a culpar a Pedro Sánchez de la situación y a pronosticar que no logrará gobernar con Podemos, IU y partidos independentistas, caso de conseguir el acuerdo previo. “Nosotros votaremos no a la investidura del señor Sánchez, tanto si viene apoyado por Podemos y partidos independentistas como si viene con sus 90 escaños y otros que quieran darle su apoyo. Y lo haremos porque el PP es un partido de gobierno, que no tiene voluntad de bisagrista”.
Rajoy ha acusado a Sánchez de no actuar movido por el interés general sino por el suyo particular y ha asegurado que el PP “en ningún caso va a apostar por el radicalismo, la desmesura y la incertidumbre”, que supondría un Ejecutivo liderado por Sánchez. Sería “un gobierno hipotecado y radical”, que constituiría “un lastre y una amenaza para la economía” y que no podría gobernar de ninguna manera “porque el PP tiene mayoría absoluta en el Senado”
Ante el panorama político, Rajoy ha advertido a los suyos de que todos se enfrentan a una situación difícil mientras comprueban si el líder del PSOE recaba los apoyos que necesita. “Vamos a seguir actuando con coherencia, es probable que pasemos por situaciones dificiles en las próximas fechas y que veamos cosas”, ha dicho sin precisar más.