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Rajoy escurre el bulto sobre la amnistía fiscal de la esposa de Cañete

Mariano Rajoy, durante la entrevista en la Cadena Ser.

Luz Sanchis

Mariano Rajoy ha optado por escurrir el bulto a la hora de dar explicaciones sobre el hecho de que la esposa de Miguel Arias Cañete se acogiera a la amnistía fiscal mientras él era ministro de Agricultura. El presidente del Gobierno en funciones se ha negado a opinar: “Es que entrar a discutir si su mujer está o no en ese asunto de la amnistia...”. Igual que hizo este martes la secretaria general de su partido, María Dolores de Cospedal, Rajoy ha dicho que no conoce los datos fiscales de nadie “por suerte” y ha dudado de que Cañete supiera “que ese asunto iba a favorecer a su familia”.

Sobre la dimisión de José Manuel Soria por sus sociedades en paraísos fiscales, ha defendido que su actitud fue “valiente y coherente” y que renunció “porque tuvo un error a la hora de explicarse”. Cuando Pepa Bueno le ha preguntado, durante la entrevista en la Cadena Ser si fue por equivocarse o “por mentir”, ha admitido que pudo ser “por mentir, desconocer o no acordarse” de los detalles. “A mí me dijo que no se acordaba y es absolutamente verosímil. Desde luego, yo a él le creo”, ha explicado.

El jefe del Ejecutivo ha sido sincero al admitir sus pocas ganas de participar en debates electorales más allá de un cara a cara con el líder del PSOE. Así, ha reconocido que los debates “no son algo cómodos porque hay que prepararlos y son una gran responsabilidad” y no le generan “un gran etusiasmo”.

Rajoy no se ha querido comprometer en una discusión a cuatro ni si volverá a enviar como sustituta a Soraya Sáenz de Santamaría. No se ha movido de la misma excusa que utilizó en la pasada campaña: “No he tomado ninguna decisión sobre eso. Siempre estoy a las órdenes del equipo de campaña para no confundirme, porque varios ojos funcionan mejor que dos”.

Ha insistido en que nunca ha pensado en renunciar a su candidatura a presidente y ha negado el derecho a Albert Rivera y a Pedro Sánchez a inmiscuirse en quién debe liderar el PP. “Nadie de un partido es quién para elegir al líder de otro partido. ¿Por qué tiene que irse uno con 123 escaños y no uno con 40? Yo fui el candidato porque quiso mi partido”, ha subrayado. Sobre el proceso de primarias cada vez más reclamado en el PP, Rajoy ha vuelto a recordar que esa decisión se tomará en un congreso aún pendiente y aplazado hasta la formación de un nuevo gobierno. Sólo ha dejado un margen de duda sobre si se mantendrá como jefe del partido si pierde La Moncloa: “Eso ya veremos”.

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