Ruz busca quién está detrás de una cuenta de 460 millones en el caso Gürtel
El hilo de Gürtel parece no acabar nunca. El juez Pablo Ruz ha encontrado una cuenta en el Banco Popular por la que pasaron entre 2006 y 2010 un total de 460 millones de euros. Lo relevante para la investigación es que esa cuenta recibió dos transferencias de 100.000 euros en 2008 a cuenta de Amando Mayo, un presunto testaferro de la trama Gürtel. Mayo es el mismo imputado que ingresó en una cuenta en Suiza 100.000 euros en 2006 a Luis del Rivero, expresidente de Sacyr imputado por haber realizado presuntamente donaciones irregulares al Partido Popular.
La cuenta del Banco Pastor investigada se abrió en A Coruña. Su titular es una sociedad denominada Belfast Link S.A y en ella figuran como apoderados dos individuos sin relevancia aparente para la investigación, Manuel Roel Pérez y Walter Manuel Hernández. Belfast Link está domiciliada en Uruguay, país que no tiene firmado un convenio con España para el intercambio de información. “Existen indicios de que nos encontramos ante una sociedad interpuesta con la finalidad de dificultar que se conozcan las razones de determinados pagos y quién es el verdadero destinatario de los mismos”, concluye un reciente informe de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), al que ha tenido acceso eldiario.es.
El juez pidió al Banco Popular, que ya había absorbido al Banco Pastor, toda la información sobre esa cuenta y otras cinco a nombre de los mismos apoderados sin mucho éxito. La entidad bancaria no aportó la documentación sobre la apertura de esas cuentas, fundamental para saber quién está detrás. Se limitó a aportar los documentos de identificación de Pérez y Hernández, con toda probabilidad ‘hombres de paja’ utilizados para ocultar el verdadero dueño de los fondos. Dos meses después, el juez volvió a insistir y el banco le contestó remitiéndole la misma información que ya le había suministrado con graves carencias en otros apartados requeridos.
“Esto es especialmente grave considerando que al menos una de estas cuentas ha recibido fondos de la cuenta de un imputado en la causa (Amando Mayo Rebollo), que se trata de cuentas cuyos titulares y apoderados no están identificados en la Base de Datos Consolidada de la Agencia Tributaria y que presentan gran cantidad de movimientos, muchos de ellos por importes elevados”, añade el informe de la ONIF. “Significa que en el periodo 2006/2010 esta cuenta presenta movimientos al debe y al haber que suman más de 460 millones de euros en ambos casos”, añade.
Por todo ello, los técnicos de la ONIF piden al juez que vuelva a requerir al Banco Popular toda la documentación necesaria para identificar a la persona que abrió esas cuentas, así como al “destinatario o emisor de los fondos para cada uno de los movimientos”.
El presunto testaferro, Amando Mayo, realizó las dos transferencias a la cuenta del Banco Popular el 14 de enero de 2008 y el 2 de junio, por valor de 100.000 euros cada una. Lo hizo desde una cuenta en el banco suizo Coutts Bank a nombre de Zorak Associated.
La figura del empresario zaragozano Amando Mayo está vinculada al mayor ‘pelotazo’ recogido en el sumario del caso Gürtel, los más de 12 millones de euros que el presunto cabecilla de la trama, Francisco Correa, habría obtenido por mediar para la adjudicación de la construcción de 2.676 viviendas al empresario Fernando Martín por el ayuntamiento de Arganda del Rey (Madrid). Martin habría ingresado en una cuenta en Suiza de Correa 12,8 millones y parte de esa cantidad habría sido transferida previamente a una cuenta vinculada a Martinsa desde otra cuyo beneficiario era Amando Mayo.