Pedro Sánchez ataca a Ciudadanos al situar a Albert Rivera en las “Nuevas Generaciones del PP”
Pedro Sánchez evita mostrar preocupación por el elevado nivel de competencia que están dibujando las encuestas, pero ha adoptado una estrategia clara: equiparar a Ciudadanos con el PP y promocionarse como el “único instrumento de cambio real” ante la intención de Pablo Iglesias de no apoyar un Gobierno del PSOE. En una entrevista en TVE, el candidato socialista a la Moncloa ha asegurado que su adversario es Mariano Rajoy pero ha aprovechado para atacar al partido de Albert Rivera y a Podemos.
“Las nuevas formaciones tienen mucho de viejos conocidos”, ha respondido Sánchez: “Ciudadanos tiene mucho que ver con las Nuevas Generaciones del PP”.
El líder socialista ha recordado que, siempre que ha podido, Rivera ha dado su apoyo a los conservadores para que sigan en el poder y ha reprochado que ahora mismo vaya a aprobar los presupuestos de Cristina Cifuentes (Ciudadanos también permitió la investidura de la socialista Susana Díaz en Andalucía). “España no necesita más derechas”, dice el candidato del PSOE, que ha equiparado la que representa Rajoy y la que encarna Rivera.
Hace menos de un mes, el líder socialista definió a Ciudadanos como “la derecha moderna” que representa una “renovación que el PP no ve”.
Pero los sondeos no dan al PSOE solo un ajustado resultado con Rivera -a quien algunos sitúan por delante de los socialistas- sino que también se juega con Podemos a parte de su electorado por la izquierda. “Escucho a Iglesias con mucha atención -ha dicho antes de recordar que este domingo mantuvo una conversación con él de 25 minutos de la que informaron a través de un comunicado pactado-. Hay algunas cosas en las que puedo coincidir pero me cuesta entender que le gustaría que yo le apoyase pero que él no apoyaría al PSOE como opción de gobierno”.
“Pablo Iglesias está diciendo que está dispuesto a que gobierne el PP antes que apoyar al PSOE”, ha explicado Sánchez, que ha lamentado la “desorientación” de Podemos. Tras recordar que no se siente “cerca de las derechas”, ha enfatizado que el “único instrumento de cambio real es el PSOE”.
Sánchez ha asegurado que el 20D no será su única oportunidad para llegar al Gobierno: “No”, se ha limitado a responder en la entrevista, en la que ha asegurado tener “cariño” y “apoyo” tanto dentro como fuera del partido. Si el PSOE no logra gobernar, es probable que en el congreso que celebrará en febrero se presente algún candidato que luche por arrebatarle la secretaría general.
También ha aprovechado para criticar a Rajoy a propósito del conflicto territorial en Cataluña, aunque ha asegurado que está de acuerdo con el PP en su defensa de la unidad de España. “Puedo estar de acuerdo con Rajoy en quién es el culpable: Artur Mas. Pero Rajoy ha gobernado cuatro años”. Sánchez sostiene que el problema independentista se ha agravado desde que el PP está en el poder. “El culpable es Mas pero también hay un responsable político que es Rajoy”, ha afirmado.
Sánchez se ha mostrado partidario de que actúe el Tribunal Constitucional si el Parlamento catalán llega a aprobar la iniciativa de Junts pel Sí y la CUP para iniciar el proceso independentista. Así, ha mostrado su esperanza en que se encuentre “una solución política” al conflicto antes de tener que recurrir al artículo 155 de la Carta Magna, que contempla la suspensión de la autonomía.
¿El error del PSOE?
En el apartado de los errores propios, Sánchez no ha admitido muchos en la entrevista. Más bien al contrario: “Uno de los errores que cometemos los socialistas es no reconocer las grandes cosas que hemos hecho”, ha expresado el candidato a la Moncloa. En su entusiasmo, ha llegado a poner como ejemplo la legalización del divorcio, que se produjo en 1981, cuando gobernaba Adolfo Suárez.
Sánchez ha asegurado que los socialistas son los que han aprobado los avances en libertades cuando han gobernado. Además, ha asegurado que el momento actual se parece más a 1982 -cuando ganó Felipe González- que a 2004, cuando lo hizo José Luis Rodríguez Zapatero: “Debemos dar el paso de modernización que se dio entonces”, ha argumentado.
Sobre las propuestas económicas del programa electoral, Sánchez ha reiterado que derogará la reforma laboral del PP si llega al Gobierno, aunque ha precisado que lo hará en “en dos pasos”: una por la vía del real decreto en lo que se refiere a la precariedad de los trabajadores y, en cuanto a la indemnización por despido, mediante un pacto entre los agentes sociales. “Si no acuerdan, yo legislaré y les puedo asegurar que no voy a abaratar el despido”, ha expresado sin llegar a decir que tenga la intención de subir la indemnización.
La idea de Ferraz de no tocar lo relativo a los días de indemnización que reciben los trabajadores ha levantado una importante polémica en las filas socialistas, en las que no ha sentado bien la decisión. La poderosa federación que dirige Susana Díaz ha presentado una enmienda al borrador del programa para que se incluya ese apartado en la derogación, es decir, que sea “total”.
El equipo económico del PSOE tendrá que estudiar la propuesta y decidir si la asume o la somete a votación entre los delegados que asistirán a la comisión que debatirá esa parte del programa electoral antes de la conferencia política de mediados de noviembre.
En respuesta a un trabajador autónomo que ha formulado una de las preguntas de ciudadanos emitidas durante la entrevista conducida por Ana Blanco, Sánchez se ha comprometido a introducir la “progresividad” en las cotizaciones. “No tiene sentido que un trabajador que gana 9.000 euros tenga la misma cotización que uno que gane 900.000”, ha dicho. También ha defendido que la reforma fiscal que ha ideado Jordi Sevilla servirá para recaudar 25.000 millones adicionales en cuatro años que procedan fundamentalmente del fraude y ha asegurado que su propuesta no cargará el IRPF puesto que las “grandes fortunas” no tributan por esa vía sino a través de figuras societarias como las Sicav.
Los ERE restan votos al PSOE
El secretario general del PSOE ha dado por “seguro” que los casos de corrupción que han afectado a su partido, como el de los ERE en Andalucía o el supuesto fraude en los cursos de formación, han restado votos al partido. No obstante, se ha reivindicado por haber tenido mano dura con los presuntos corruptos y ha asegurado que si gobierna los cargos públicos tendrán que recibir un “certificado fiscal” emitido por la Agencia Tributaria al empezar y al acabar el mandato.
El candidato socialista ha asegurado, no obstante, que su partido se ha regenerado y renovado mientras que el PP necesita ir a la oposición para hacerlo. Además, ha subrayado que el presidente del Gobierno debería haber dimitido en enero de 2013 tras enviar SMS de ánimo a Luis Bárcenas cuando se descubrieron sus cuentas millonarias en Suiza.