Pedro Sánchez se apoya en Felipe González en su enfrentamiento con Zapatero y Susana Díaz
Los dos presidentes que el socialismo ha dado a la actual democracia española han decidido tomar partido en la guerra abierta por el poder que enfrenta a Pedro Sánchez y Susana Díaz. Felipe González ha criticado abiertamente la gestión de Zapatero durante una entrevista televisiva y lo ha hecho solo unas horas después de que el PSOE primase al andaluz frente al leonés en el primer gran acto de precampaña para las municipales.
La convención que el PSOE celebró este fin de semana en Madrid reservaba un lugar privilegiado para González, invitado a dar un discurso, mientras que a Zapatero se le convocó como oyente y sin derecho a turno de palabra.
En su discurso, González ofreció su apoyo al secretario general y argumentó que la cultura del partido así lo recomendaba. Su postura se enfrenta a la de un Zapatero cercano a Susana Díaz, proclive a la celebración de primarias y a no dar por hecha la candidatura de Sánchez a La Moncloa.
“Zapatero está trabajando para Susana”, señalan fuentes del PSOE consultadas por eldiario.es, que consideran que el apoyo de González se explica en esta clave y como reacción a la postura del otro expresidente socialista.
Pocas horas después de los discursos del domingo, Felipe González redoblaba su apuesta desde las pantallas de Telecinco. Ante las preguntas de la periodista Pepa Bueno, el expresidente volvió a repetir su revelación de que apostó por Madina en las primarias, pero que ahora todo su apoyo es para Sánchez.
En 'Viajando con Chester', González fue más allá: “Propuse a Zapatero una alternativa para acabar con los desahucios. No hizo caso”, afirmó el expresidente. Todo un golpe, inexplicable para muchos en el PSOE, directo a la mandíbula del último presidente socialista.
¿A qué se debe el enfrentamiento público abierto por González contra Zapatero? Según un destacado diputado socialista, “Gonzalez quiere un PSOE controlable. Con Pedro lo tiene y con Susana no”.
Fuentes cercanas al secretario general dicen que Sánchez “desconocía el detalle de las declaraciones de González en Telecinco” y niegan la existencia de una estrategia pactada por ambas partes contra Zapatero y Susana Díaz.
Quien conoce a González de cerca recuerda que Zapatero siempre marcó distancias con él y le condenó a ser un “jarrón chino”. Susana Díaz tampoco buscó al histórico dirigente para la reciente campaña electoral en Andalucía. “Felipe no soporta que Susana ganara sin que él participara en campaña”, señala un exdirigente del PSOE.
“La relación de Pedro y Felipe es muy buena”, afirman en Ferraz, en donde se dan por superados los primeros roces entre ambos. Recién llegado al cargo, Sánchez criticó durante días las puertas giratorias que llevaron al expresidente al consejo de Gas Natural (de donde acabaría dimitiendo por “aburrimiento”). En la actualidad, el secretario general del PSOE y González hablan con frecuencia y son constantes las consultas y peticiones de opinión.
En su reciente visita a Nueva York para reunirse con el secretario general de la ONU, Sánchez encontró tiempo en la agenda para verse con González, que también estaba en la ciudad.
Más allá de cualquier interpretación, en el PSOE se ha instalado una guerra de bandos y un malestar casi constante. Entre los que formaron parte de los Gobiernos de Zapatero no ha gustado nada la decisión del PSOE de impedirle hablar a la militancia. “Estos chicos del PSOE –dice un exdirigente socialista– llevaron a Zapatero porque estaba previsto darle un espaldarazo a Pedro. Si José Luis no lo vio, es su problema”, señalan.
Según relató Angélica Rubio en 'Al Rojo Vivo', de La Sexta, “Zapatero ya se lo esperaba”. Es la opinión de quien le asesoró durante años y quien opina que “Pedro Sánchez ha querido evidenciar división interna. Si la dirección del PSOE cree que es la mejor manera de ir a unas elecciones, está en su derecho”.