Virgilio Zapatero acusa al PSOE de no buscar la verdad en el caso de las tarjetas de Caja Madrid
Virgilio Zapatero, exministro socialista y exconsejero de Bankia, ha mandado una dura carta en la que acusa a la dirección del PSOE de provocarle una indefensión al no haberle pedido “una mínima información ni explicación” sobre el asunto de las tarjetas 'black' antes de anunciar que serán “implacables” en este caso. “Sin conocer los hechos, los prejuzga y los califica oficiando de justiciero”, dice Zapatero en relación a la actitud de Pedro Sánchez.
El exconsejero de la entidad financiera asegura que esas declaraciones del secretario general “parecen buscar notoriedad y titulares de prensa más que la verdad y la justicia”. La dirección del PSOE ha anunciado una investigación interna pero ha advertido a los exconsejeros de Caja Madrid que utilizaron las tarjetas opacas que serán “implacables”. Zapatero les recrimina que hayan hecho esas afirmaciones “sin conocimiento de nada” y considera que se “quiebran las mínimas garantías internas” y que “quebrantan el honor de un militante a quien el secretario general públicamente insulta y ofende sin razón”.
También carga contra el número dos del PSOE, César Luena, que este lunes aconsejó a los exconsejeros de la entidad que se fueran del partido al advertirles de que ha dado la orden de que la instrucción interna “sea lo más dura posible”. “Entiendo que se trata de una amenaza con la que pretende que yo no hable ante el partido y que presente mi renuncia cuanto antes”, expresa Zapatero, que añade que pretenden así presentarse “como el paladín de la lucha contra la corrupción” en el “Foro de limpieza democrática” que celebrarán este fin de semana.
Ante la invitación de Ferraz a que renuncie a su carné de militante, el exministro asegura que no aceptará “chantajes ni presiones para que no hable”. “Lo más cómodo para mí sería aceptar vuestras presiones y pedir la baja del partido socialista, que es lo que ya pedís”, dice. “No lo haré porque es una injusticia y un pésimo precedente para este partido”.
Zapatero, que según el informe que maneja la Fiscalía Anticorrupción gastó 36.000 euros de la tarjeta 'black' que la entidad financiera le proporcionó para sus gastos de representación, niega haber tenido una tarjeta opaca. “He declarado todos los ingresos que he percibido”, defiende el catedrático, que recuerda que devolvió “sin que nadie me lo pidiera hace dos años todos los gastos de representación de 2011 y los de 2010 que conocía”. El exministro socialista envió el pasado viernes una carta a los medios en la que informaba de que había devuelto 27.980,76 euros en 2012, como podía acreditar “documentalmente”.
“Esta forma de entender la política –continúa Zapatero– no tiene que ver nada con la transparencia, la ejemplaridad ni la ética; violenta las mínimas garantías, no redunda en el prestigio del partido socialista, ni proporciona réditos políticos si es eso lo que se busca, y puede terminar por confundir a este partido centenario, a quien tanto debo y algo he servido, en un mero experimento populista”.
