El discurso de la CUP triunfa hasta con los dirigentes de CiU
El discurso del portavoz de la Candidatura d'Unitat Popular (CUP), David Fernàndez, ha seducido a los dirigentes de CiU, la formación más próxima al empresariado catalán. Durante el debate de investidura, Fernàndez tendió la mano a Artur Mas para el derecho de “autodeterminación”, pero le avisó de que mantendrá “el puño en alto” contra los recortes.
El recién elegido presidente catalán, Artur Mas, afirmó: “A diferencia de otras expresiones en las que veo más pose, en este caso veo autenticidad. Y la autenticidad siempre hay respetarla y escucharla porque siempre se puede aprender de ella”.
El líder de UDC y secretario general de CiU, Josep Antoni Duran, también ha elogiado el “discursazo” de Fernández en unos mensajes en su cuenta de Twitter: “Pese a discrepar de la estética y el proyecto de la CUP, -a quien no conocía- es una persona muy preparada”.
Fernández ha apelado a seguir el ejemplo islandés y encarcelar a los causantes de la crisis. Fernández, ha empezado su primera intervención recordando “las miles de personas que cada día mueren de hambre en el mundo” y “los tres millones de personas que están en el umbral de la pobreza en Cataluña”.
Después de arremeter contra los causantes de la crisis, que ha considerado que son “la UE de los mercados”, “los gángsters con corbata”, los bancos y los sectores especulativos, Fernàndez ha diagnosticado que “la situación es extremadamente complicada”, sobre todo porque “el mundo sigue estando gobernado por ladrones y piratas”.
En su opinión, “el Parlament no está a la altura de las circunstancias” cuando no se preocupa lo suficiente como para evitar que siga creciendo el paro y sigan muriendo personas que van a ser desahuciadas de sus viviendas.
David Fernández ha considerado que “la dinámica capitalista” en la que está inmerso el país provoca que el conseller de Economía ya esté designado “antes de las elecciones por ciertas financieras y grupos de intereses”, y ha reprochado a CiU que hablara de los recortes de 4.000 millones de euros después de las elecciones y no antes.
La CUP ha entrado por primera vez en el Parlament tras las elecciones catalanas del 25N, en las que obtuvo tres diputados.