Las juras de bandera se disparan: Unas 55.000 desde 2010, casi 15.000 en 2016

Las juras de bandera de personal civil organizadas por las Fuerzas Armadas se han disparado en los últimos años y desde 2010 unas 55.000 personas, casi 15.000 de ellas el pasado año, han expresado su compromiso con la defensa de España y han desfilado ante la enseña rojigualda, según datos del Ministerio de Defensa.

En 2010, primer año en que comenzaron a contabilizarse, un total de 1.733 personas prestaron juramento y el pasado año lo hicieron 14.735 personas, según publica Defensa en el último número de su Revista de la Defensa.

Además en 2015 juraron bandera 8.715 personas; en 2014 un total de 10.159; en 2013 lo hicieron 6.637; en 2012 un total de 8.469; y en 2011 otras 4.742 personas.

El pasado año, Madrid y Andalucía fueron las comunidades autónomas que acumularon el mayor número de jurandos (41 por cien), pero las cifras fueron también muy relevantes en Murcia, Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Castilla y León y Cataluña.

Por ejércitos, el 66 por cien de los civiles participaron en ceremonias organizadas por el Ejército de Tierra, que cuenta con mayor número de unidades e implantación en todo el territorio.

Un 23 por cien juraron con el Ejército del Aire y un 11 por cien con la Armada.

Este año el ritmo no se ha detenido y hasta el pasado septiembre se habían celebrado ya 53 actos de juras en 46 localidades.

En mayo se realizaron 27 actos, muchos de ellos con motivo de la festividad de San Fernando, patrón de las Fuerzas Armadas.

El más multitudinario fue el 13 en Sevilla, que contó con 2.000 civiles, entre los que se encontraban conocidos como el torero Francisco Rivera o la modelo Inés Sastre.

La plaza coruñesa de María Pita congregó a 900 civiles el pasado 9 de septiembre y 600 civiles participaron en la jura de bandera organizada por la Armada en el Paseo del Prado de Madrid el 23 de septiembre, entre ellos 21 discapacitados visuales afiliados a la ONCE.

Está previsto que antes de que termine el año se celebrarán 16 más, la mayor parte coincidiendo con festividades o vinculados a alguna efeméride de la localidad que acoge la cita o con la unidad que la organiza.

Pôr otra parte, ante la creciente demanda de solicitudes, el Ministerio de Defensa ha creado este año un registro centralizado.

Para jurar bandera hay que tener nacionalidad española, ser mayor de 18 años y no haber sido inhabilitado en sentencia judicial. En la jura se pregunta: «Españoles, ¿juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, con lealtad al Rey y, si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?».

«Sí, lo hacemos», responden al unísono los jurandos, para comenzar inmediatamente el solemne paso bajo la enseña, al que pondrán fin los tradicionales vivas a España y al Rey.

El juramento también está abierto a los residentes en el extranjero o en escenarios singulares como el buque escuela Juan Sebastián de Elcano, donde juraron 286 civiles en 2016.

El pasado 2 de julio, 47 españoles residentes en Bélgica pudieron jurar bandera en su cubierta, aprovechando la llegada del velero al puerto de Amberes por primera vez en sus 90 años de historia.

Meses antes, 41 españoles disfrutaron también de una oportunidad similar en el buque durante su parada en la ciudad brasileña de Fortaleza, y 29 más lo hicieron en La Habana.

La jura de bandera se estableció en España formalmente en las Ordenanzas promulgadas por Carlos III en 1768.

El ritual se mantuvo durante tres siglos hasta llegar a 1999, cuando la ley de Régimen de Personal de las Fuerzas Armadas, regulaba el compromiso militar como hoy lo conocemos y modificaba la fórmula introduciendo por primera vez la promesa en la pregunta que se realiza al militar.

Al finalizar el servicio militar obligatorio, a partir de 2002, el juramento o promesa ante la Bandera quedaba únicamente como requisito imprescindible para los profesionales.

Con el objetivo de mantener y reforzar los vínculos de las Fuerzas Armadas y la sociedad, el 25 de mayo de 2004 se publicaba la orden ministerial que establecía el procedimiento para que los españoles pudieran participar activamente en estas ceremonias.