El Gobierno teme que Puigdemont intente regresar para un acto de final de campaña y volver a huir
El Gobierno ha recibido una comunicación de los Servicios de Información según la cual los responsables de Junts per Catalunya planean la presencia de Carles Puigdemont en un mitin del último tramo de la campaña electoral. Eso pasaría, según los datos aportados al Ejecutivo, por que el expresidente de la Generalitat se introdujera de forma clandestina por la frontera con Francia, participara en un mitin y saliera otra vez de territorio español eludiendo la acción de las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Los planes de la lista soberanista fueron abordados en una reunión del secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, celebrada en Barcelona el pasado 4 de diciembre con representantes de Policía, Guardia Civil y Mossos d’Esquadra, a la que también asistió el responsable del operativo en Catalunya, el coronel del instituto armado Diego Pérez de los Cobos.
El encuentro tenía previsto coordinar el plan de seguridad para toda la campaña del 21-D y la puesta en marcha esa medianoche de la instrucción de la Secretaría de Estado con instrucciones específicas hasta el final del recuento, en la noche electoral.
En la reunión se acordó reforzar el trabajo de los distintos servicios de Información para detectar la posible entrada de Puigdemont por la frontera, informan fuentes policiales. Según esto, Puigdemont es el más reacio a arriesgarse a la detención e ingreso en prisión que implicaría la ejecución del plan de de Junts per Catalunya.
Fuentes autorizadas de la campaña de Junts per Catalunya han negado a eldiario.es la existencia de ese plan o de cualquier otro para que Puigdemont ingrese en territorio del Estado antes del 21-D o en otro momento. Solo admiten múltiples peticiones de militantes, e incluso de candidatos, para que Puigdemont acuda a distintos puntos de Catalunya durante la campaña. Sin embargo, la previsión es que el expresident limite su campaña a los mensajes que lance desde Bélgica, señalan las mismas fuentes.
La jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela dictó una euro-orden y una orden internacional para la detención en Bélgica de Puigdemont y los cuatro exconsellers que le acompañan dentro de la investigación por rebelión, sedición y malversación que en ese momento dirigía la magistrada.
La causa ha sido asumida por el juez Pablo Llarena, quien ha decidido dejar sin efecto la euro-orden y la orden internacional de detención con el argumento de que, una vez entregados a España, Puigdemont y los consellers huidos en Bélgica solo podrína ser juzgados por los delitos por los que este país accediera a entregarlos, con la posibilidad de que quedaran fuera los más graves, los de rebelión y sedición. Sin embargo, el juez mantiene la orden de detención una vez Puigdemont o los cuatro consellers pongan un pie en territorio español.
Los supuestos planes de los responsables de campaña de Junts per Catalunya, adelantados por okdiario.com, provocaron la alerta entre los responsables del Ministerio del Interior, que conocieron a posteriori cómo el expresidente de la Generalitat había cruzado la frontera con Francia siguiendo un plan que incluyó cambiar tres veces de vehículo y recibir la cobertura de un grupo de mossos d’Esquadra.
