No nos gusta la palabra “discapacitado”. Preferimos retrón, que recuerda a retarded en inglés, o a “retroceder”. La elegimos para hacer énfasis en que nos importa más que nos den lo que nos deben que el nombre con el que nos llamen.
Las noticias sobre retrones no deberían hablar de enfermitos y de rampas, sino de la miseria y la reclusión. Nuria del Saz y Mariano Cuesta, dos retrones con suerte, intentaremos decir las cosas como son, con humor y vigilando los tabúes. Si quieres escribirnos: retronesyhombres@gmail.com
Hay en Zaragoza un señor en silla de ruedas que cada mañana se planta delante de un portal. No pide limosna: pide una educación pública de calidad. Se llama Antonio Aramayona, @antaramayona, es profesor jubilado y su cara se ha convertido en los últimos meses en parte del paisaje del centro zaragozano. Cada mañana se coloca delante de la vivienda de la consejera de Educación, Dolores Serrat (PP). Nada más. Aparca su silla frente al portal, cuidando de no tapar el escaparate de la tienda contigua, y espera.
Espera a que la consejera le atienda, espera a que le escuche, a que cambie sus políticas de recortes... y espera a ser multado. Porque en la España de 2014 manifestarse está cada vez más complicado: no sólo arrestan a piquetes o a personas que llevan una bandera republicana, no sólo multan a quienes gritaban contra los recortes en una marcha ciudadana. También multan al retrón que se coloca 2 horas al día delante de un portal.
A final de 2013, Delegación del Gobierno sancionó con 200 euros al antiguo profesor. En el escrito, le acusaban de “presunta responsabilidad en negativa a abandonar el portal de la consejera de Educación a requerimiento de los agentes denunciante”. Ahora la policía le espera en la puerta de la consejera y amenaza con imponerle una multa diaria, por desobediencia. Antonio Aramayona no replica a los agentes ni recurre estas sanciones. Tampoco paga. En su momento, explicó por escrito a Delegación los motivos de su protesta.
No está solo. Cada día, se suman personas en su protesta. Le hacen compañía durante un rato, charlan y se hacen una foto, que luego sube a su blog (disclaimer: fui una de esas personas la pasada semana). Cuando cumplió 1 año de protesta, decenas de ciudadanos se acercaron para mostrar su apoyo.
Aramayona responde vía email a las preguntas:
¿Cómo te describirías?
Soy un perroflauta motorizado, sin flauta y sin perro, pero con una silla de ruedas con motor. Mi discapacidad, hace más de ocho años, fue tasada en el 65%. Desde esa fecha hasta ahora me ha dado un ictus, un infarto y ya tengo angina de pecho estable. He pasado trece veces por quirófano y he sufrido varias amputaciones, principalmente la pierna derecha por encima de la rodilla.
Soy un perpetuo aspirante a filósofo, intento constantemente aproximarme al mundo y a la vida con otra mirada. He procurado siempre enseñar apasionadamente filosofía y ética en distintos Institutos de Secundaria de Madrid y Zaragoza.
Durante 20 años he estado escribiendo cada semana un artículo de opinión en El Periódico de Aragón, colaboro en otras publicaciones, principalmente sobre educación y política, y he escrito unos cuantos libros. Soy socio activo, entre otras asociaciones, de ATTAC, DMD y Europa Laica. Desde 2007, mi vida va sobre ruedas.
¿Cómo surge esta forma de protesta?
Respetando las formas tradicionales de protesta -manifestaciones, concentraciones, escritos…- considero que estar diariamente en plena calle y apostado en el portal del político responsable directo de unas medidas que atentan contra algunos servicios sociales básicos y esenciales es la forma más contundente y efectiva, dentro de la noviolencia, de defender la escuela pública y denunciar los recortes educativos o cualesquiera otros derechos fundamentales y libertades ciudadanas.
¿Cuáles son los problemas de la educación en Aragón?
Los mismos que en cualquier otra parte del país: recorte en becas de comedor, de adquisición de material escolar, masificación en las aulas, reducción del profesorado, recortes en presupuestos, estructuras y servicios, becas universitarias… Hay que añadir el problema de las localidades con escasa población, cada vez más envejecida, que requieren educación para sus niños y niñas con la misma calidad y dedicación, en un marco geográfico muy extenso.
¿Qué pides a la consejera?
Que rectifique en los recortes perpetrados, que potencie verdaderamente la escuela pública en lugar de la privada/concertada/confesional, que se vaya unas semanas a un rincón perdido del Pirineo y piense en la diferencia entre instrucción y educación, que en un centro de enseñanza deben impartirse conocimientos racionales y científicos, y no creencias.
Le pido también que confeccione su propio cartel y se aposte en el portal del domicilio de alguno de sus jefes del Partido Popular para exigir una política fiscal en la que paguen los ricos, las grandes empresas y entidades financieras, pues en tal caso habría dinero de sobra para conseguir una escuela pública y laica de calidad, así como unos servicios cabales y positivos en educación, sanidad, pensiones, atención a la dependencia, etc.
¿Has llegado a hablar con ella, aunque sea cuando entra a su casa?
Una mañana masculló un “buenos días”, como respuesta a mi “buenos días” mientras abría el portal, siempre escoltada por unos cuantos guardaespaldas. Otra mañana, creo que me dijo “hasta luego” al salir rauda y veloz del portal. La he visto otras veces fugazmente con algunos familiares, pero no ha saludado. Ni siquiera ha preguntado qué hacía allí o qué quería aquel perroflauta motorizado.
¿Vas a pagar las multas?
No. Esas multas están impuestas por defender un derecho fundamental: el derecho a una educación universal, pública, laica, gratuita en todos los ámbitos y aspectos, sin discriminaciones y en igualdad de condiciones.
El poder que impone esas multas ha adoptado antes unas medidas atentatorias contra ése y otros derechos fundamentales. Ese poder se convierte por ello en ilegítimo, al igual que son ilegítimas sus acciones sancionadoras.
Ni pago, ni reconozco, ni recurro esas multas. Que detraigan ese dinero de mi pensión. Así quedará aún más flagrante que se trata de un expolio, de un robo.
¿Te has sentido apoyado este año?
Raramente he estado solo en ese portal de la consejera aragonesa de Educación. Durante esos trece meses hemos recibido muchos ánimos y muchos apoyos. Estoy plenamente convencido de que somos millones los ciudadanos y las ciudadanas disconformes con los recortes efectuados en educación por el Gobierno del Partido Popular. Quiero subrayar especialmente la presencia casi constante en el portal de Marisol Ibáñez y Marga Ribas, igualmente sancionadas y citadas al juicio del 3 de julio.
¿Has recibido críticas de otros ciudadanos?
Sí, no nos ha faltado de nada. Dejando aparte a algunas personas de ideología rayana en el fascismo y el franquismo puro y duro, no son pocas las personas que han mostrado su disconformidad con nuestras demandas sobre una educación pública o laica o ambas. Insultos ha habido, pero de forma excepcional.
Curiosamente, jamás nos ha insultado alguien mirándonos a la cara; quienes insultan lo hacen pasando velozmente y sin detenerse.
¿Hasta cuándo estarás en el portal de la consejera?
Hasta que la educación de este país sea realmente pública, laica y de calidad. Hasta que me resten fuerzas y vida. Hasta que la educación sea reconocida como un derecho inalienable, intocable y fuera de cualquier parámetro contable economicista, pues de ella depende el presente y el futuro de su ciudadanía, de cualquier edad y condición.
Hasta que en la educación queden incluidos todos y cada uno de los aspectos y ámbitos de la formación cabal e íntegra de cada persona y la educación sea considerada un derecho y una obligación intocables, inalienables, realmente generadora de personas libres, autónomas, críticas, solidarias, deseosas de saber y de conocer.
Sobre este blog
No nos gusta la palabra “discapacitado”. Preferimos retrón, que recuerda a retarded en inglés, o a “retroceder”. La elegimos para hacer énfasis en que nos importa más que nos den lo que nos deben que el nombre con el que nos llamen.
Las noticias sobre retrones no deberían hablar de enfermitos y de rampas, sino de la miseria y la reclusión. Nuria del Saz y Mariano Cuesta, dos retrones con suerte, intentaremos decir las cosas como son, con humor y vigilando los tabúes. Si quieres escribirnos: retronesyhombres@gmail.com