La Asociación Clara Campoamor, sobre la muerte de la niña de Valladolid: “La gestión ha sido un desastre, vamos a por todos”
La cronología del caso de la pequeña de cuatro años que murió después de una paliza y una agresión sexual, y por el que su madre y su pareja han ingresado en prisión, será básica para depurar responsabilidades de todos los agentes que participaron en el protocolo de malos tratos. La Asociación Clara Campoamor se personará este lunes como acusación popular. Su presidenta, Blanca Estrella Ruiz Ungo, calificó la gestión del caso como “un desastre”.
Tal y como adelantó eldiario.es, el pediatra de un hospital privado de Valladolid activó el protocolo de malos tratos el pasado 11 de julio, después de que la madre llevase a la pequeña al centro porque se mordía los labios hasta hacerse heridas. Cuando el médico examinó a la niña detectó hematomas en brazos y piernas y una deficiente higiene.
Con un informe en el que reseñó “sospecha de maltrato”, la Policía tomó declaración a la madre el 12 de julio. Sin embargo, ella desvió el foco alegando que el padre de la niña, que la había dejado para irse a trabajar fuera de España, la maltrataba psicológicamente. En el atestado se puso esa frase en negrita y el caso pasó al juez de Vigilancia Sobre la Mujer, que le tomó declaración el día 15, y archivó el caso. Lo que nadie ha explicado es por qué la Fiscalía de Menores no remite el caso a los servicios sociales de la Junta de Castilla y León hasta el día 21 de julio, sin que se hubiese adoptado una sola medida cautelar para proteger a la niña.
La Junta tampoco actuó con premura, el día 21 era viernes y, según reconoció el gerente de los Servicios Sociales, lo dejaron para el lunes, pero tan sólo para acordar una cita con la mujer dos días después, el 26. La entrevista con ella no convenció a los asistentes, y concertaron una visita en el domicilio otros dos días después, el 28. No se produjo, la madre aludió a un problema laboral, y los técnicos aceptaron realizarla el martes 1 de agosto. Nadie abrió la puerta. El día 2 la niña ingresó en el hospital molida a golpes y con signos severos de agresión sexual. Murió un día después.
“Vamos a pedir toda la documentación y a exigir todas las explicaciones. Aquí todo el mundo lo ha hecho mal. Ante una sospecha de maltrato hay que proteger al menor, y no se ha hecho. La única persona que actuó correctamente fue el pediatra. Tanto si a la niña la ha matado la pareja de la madre, en cuyo caso sería un caso de violencia de género, como si ha sido la propia madre, no vamos a tener piedad”, comentó Ruiz Ungo.
“Nos ha costado 12 años que se incluya en la Ley Orgánica de Violencia de Género a los menores”, recordó. La Asociación Clara Campoamor, personada en multitud de casos en los que las víctimas eran niños o adolescentes ha conseguido condenas al Estado, como en el caso de la violación y asesinato de la niña vallisoletana Olga Sangrador, muerta a manos de un preso con antecedentes de abusos a menores al que concedieron un permiso.