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La oposición exigirá tumbar las reválidas y la “ideología” de la Lomce si hay pacto educativo

"Reválidas, no", frente al Ministerio de Educación durante la huelga del 26 de octubre. / S.P

Sofía Pérez Mendoza

Mariano Rajoy fió el jueves en el Congreso el futuro de las reválidas a un pacto educativo con el resto de grupos políticos. Revistió de anuncio algo que ya prevía la ley –que las reválidas quedan en 2017 sin efecto académico y solo se tendrán en cuenta para el acceso a la universidad–, pero añadió una concesión: que ese primer modelo piloto se mantenga hasta que haya sobre el papel un pacto por la Educación.

El ya presidente del Gobierno se comprometió en su discurso de investidura a tener listas las bases del pacto, que nacerá previsiblemente en una subcomisión creada ad hoc –como propone Ciudadanos y PSOE, y apoya Unidos Podemos–, en seis meses. El acuerdo, todavía un futurible, obligaría a hacer cambios legislativos con tramitaciones más o menos largas, desde un real decreto a modificar una ley orgánica como la Lomce. Para esto último se necesitan los apoyos de una mayoría absoluta en la Cámara Baja.

En lo más inmediato, el Ministerio de Educación tiene un fleco pendiente que mantiene en vilo a los estudiantes y profesores: aprobar antes del 30 de noviembre la orden ministerial que desarrolla con detalle cómo serán las reválidas, que sí se harán al menos este curso. De momento solo se conoce que las pruebas combinarán preguntas tipo test y semiabiertas y que se realizarán en varios días. Cuatro días y siete asignaturas para los los alumnos y alumnas de Bachillerato.

La orden ministerial, por ser de rango inferior al decreto de julio, no puede anular ninguno de los preceptos que contiene. Solo vía decreto o superior podrían retirarse las polémicas pruebas, decisión que tendrán que negociar los grupos políticos en las conversaciones por el pacto educativo.

El calendario de implantación de la Lomce se encuentra como disposición final en la normativa, de manera que podría modificarse con un decreto. No sería necesario hacer la larga tramitación para cambiar una ley orgánica para, como pide Ciudadanos, aprobar una moratoria de los efectos académicos de las evaluaciones finales hasta que se consensúe un nuevo marco legislativo.

Las reválidas serán, teniendo en cuenta la unanimidad en la oposición, la primera medida en el disparadero de ese grupo de trabajo. Pero hay mucho más que dialogar y modificar, coinciden PSOE, Ciudadanos y Unidos Podemos. Los dos primeros grupos han presentado en la mesa del Congreso sendas iniciativas para crear una subcomisión ad hoc que sirva para consensuar una nueva ley. Unidos Podemos ya ha manifestado que votará a favor de abrir ese diálogo.

“Ya veremos qué es lo que acordamos”, dijo Mariano Rajoy en el Congreso. No concretó demasiado, pero marcó una línea roja muy clara: derogar la Lomce. “Este pacto –añadió– no debe consistir en eso”. Sus bases son, como enumeró desde la tribuna, “calidad, eficacia y libertad”. Íñigo Méndez de Vigo ahondó en la misma postura el día después del anuncio: paralizar las reválidas no significa “enterrar la Lomce”.

eldiario.es pregunta a los portavoces de Educación de PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos sobre las perspectivas después del anuncio de Rajoy y sus posturas de cara a un futuro pacto.

¿Las reválidas, tal y como las concibió José Ignacio Wert, están muertas?

Manuel Cruz (PSOE): “El anuncio de Rajoy es solo una victoria parcial. El PP era consciente de que era un elemento de presión y amenaza y se ha dado marcha atrás, pero todo condicionado a un pacto educativo. El Ministerio ha testado que las reválidas tienen unos costos muy grandes y creo que tendrán que pensar muy bien si quieren reintroducirlas en el futuro. Su manera de hacerlo, hay que reconocer, ha sido muy hábil: manteniendo la prueba piloto, deja abierta la puerta para poder retirarlas como para reintroducirlas”.

Marta Martín (Ciudadanos): “Creo que nunca se van a aplicar tal y como las concibe la ley. Si hay moratoria sin efectos académicos, que es lo que pide Ciudadanos por un periodo de una legislatura, estamos quitando ese carácter. No consideramos que sean malas las pruebas diagnósticas, pero de ahí a hacer reválidas y ponerlas como condicionante para titular... no. Son la punta del iceberg, el punto más conflictivo de una ley que siempre fue conflictivia. Con independencia de la bondad o maldad del fondo, esa ley se ha impuesto desde una mayoría absoluta”.

Javier Sánchez (Unidos Podemos): “El anuncio de Rajoy en el Congreso es una patraña porque la ley ya decía que no contaban para nota este curso. El debate de fondo es si qué va a pasar a partir de 2018. Nosotros somos muy prudentes. El PP sigue practicando esa política de fuegos artificiales y su intención es continuar con la Lomce y las reválidas, pero no nos tienen que confundir. Ya hemos dicho que no queremos reválidas ni tampoco sucedáneos de reválida”.

¿La base para negociar, como quiere el PP, puede ser la Lomce?

Manuel Cruz (PSOE): “Es un oxímoron hablar de pacto educativo sobre la base de una ley que se hizo contra el pacto educativo en el que trabajó Gabilondo cuando era ministro. Cuando estaba prácticamente cerrado, el único partido que se opuso fue el PP”.

Marta Martín (Ciudadanos): “PSOE y Unidos Podemos repiten como un eslogan político que hay que derogar la Lomce, pero saben que técnicamente no es posible. Es meter a nuestros niños en un mayor caos legislativo. Lo que hay que hacer es revisar todas las leyes y empezar de cero mirando qué cosas han funcionado y cuáles no en todo lo que se ha hecho. La Lomce tiene cosas buenas, como la autonomía que se concede a los centros, pero no queremos una modificación puntual de la Lomce, no se trata de poner más parches”.

Javier Sánchez (Unidos Podemos): “No es un buen punto de partida. Vamos a ser firmes, vamos a pedir la derogación de la Lomce y la del decreto de reválidas. Creemos que el PP tiene que ganar tiempo y que no está dispuesto a renunciar a una ley educativa que impuso por encima de la comunidad educativa y del Parlamento. Por eso irá poniendo parches, como la moratoria negociada con Ciudadanos. Nosotros no tendríamos problema en aprobar esa moratoria, pero solo así no estamos yendo al fondo de la cuestión”.

¿Cuáles son sus líneas rojas en la negociación de un pacto educativo?

Manuel Cruz (PSOE): “Somos conscientes de que el asunto de las reválidas está distrayendo un poco, pero nuestra premisa para empezar a negociar es acabar con la Lomce. No se trata de derogar de golpe porque se crea un vacío legal sino de ir elaborando una ley que permita sustituir la vigente por la nueva”.

Marta Martín (Ciudadanos): “No somos un partido de líneas rojas porque eso ha sido lo que ha generado el caos en las leyes educativas. La posición ideologizada es lo que nos ha llevado a esto. El requisito mínimo de Ciudadanos es el diálogo con toda la comunidad educativa y el consenso en algunos puntos básicos para nosotros”.

Javier Sánchez (Unidos Podemos): “Si tenemos alguna línea roja es que la comunidad educativa debe ser agente copartícipe de las negociaciones. No puede ser un pacto de élites políticas. Cualquier propuesta que se quiera resolver en una subcomisión entre cuatro partidos es una ley que va aparecer muerta. Necesitamos a los profesionales que hacen que la educación funcione. Fuera del parlamento hay más consenso que dentro y queremos aprender de los mejores, no volcar el programa electoral en una nueva ley de educación. El diálogo abierto con la comunidad educativa debe articularse de una forma real y no solo para hacerse fotos”.

¿Qué es lo más prioritario?

Manuel Cruz (PSOE): “Hay que vaciar la Lomce de muchísimos puntos y, sobre todo, el espíritu que la inspiró, aunque tenemos bastante claro que lo primero van a ser las reválidas. Hay que quitar el valor curricular a la religión, es un retroceso; estamos en contra de subvencionar la educación segregada y del mercantilismo con el que concibe la educación la Lomce. Esta ley, además, no es un elemento que corrija las desigualdades de salida entre los estudiantes y no se puede hacer un planteamiento meritocrático, como hace la Lomce, si previamente no has creado unas condiciones de igualdad de oportunidades. También estudiar la distribución de los presupuestos de becas”.

Marta Martín (Ciudadanos): “Hay que eliminar las cuestiones ideológicas que han centrado el debate educativo. Con la religión –pasa a contar para la nota media si la eliges– se ha generado un problema donde no lo había. Tenemos que quitar lo que ha generado conflicto. Lo importante es que nuestros niños estén capacitados para desarrollarse, que tengan habilidades para competir en otros países europeos, que se mejore la convivencia, dar estabilidad a los docentes, incluir la educación 0-3 como parte del sistema...”.

Javier Sánchez (Unidos Podemos): Tenemos que hacer una esfuerzo porque la educación pública esté mejor financiada. El nivel del inversión está en el 4,5% del PIB , un gasto inferior de Grecia e Irlanda. Deberíamos elevarlo como mínimo al 5,6% en esta legislatura, que es la media de la UE. Cualquier ley debe ir acompañada de memoria económica. Hay que mirar también a la carga ideológica, fundamentalmente neoliberal, que inspira la Lomce y que rompe la cohesión. Esa carga tiene que ver con establecer criterios de segregación y competitividad dentro de la red pública a favor de la concertada. Y esto se hace, entre otras cosas, a través de las reválidas”.

¿Qué respuesta esperan del PP?

Manuel Cruz (PSOE): “Creo que el PP irá viendo las cosas sobre la marcha. Dos días antes de la sesión de investidura se negaba a que apareciera la expresión ”derogar Lomce“ en nuestra propuesta para crear una subcomisión que elabore un pacto. Salvar las siglas Lomce es una línea roja para el PP, que es consciente de que todo lo educativo está bajo el foco. Ahora toca como mínimo hacer los gestos de que se está a favor del diálogo”.

Marta Martín (Ciudadanos): “El PP ha firmado un acuerdo de investidura con nosotros y una de las exigencias es la congelación de todos los aspectos que no había entrado en vigor. Habíamos arrancado el compromiso del Gobierno, como anunciamos la semana pasada, ellos lo negaron aunque el jueves se vio que era verdad. Ahora tienen que aprobar, según se comprometieron con Ciudadanos, la moratoria de aplicación hasta que haya una nueva ley. Y que apoyen la subcomisión que proponemos”.

Javier Sánchez (Unidos Podemos): “Las circunstancias han cambiado y las cosas no pueden funcionar igual. Tendrán que hacer guiños. Han sido muy claros y han dicho que no quieren renunciar a la Lomce, que representa un modelo de educación competitiva y elitista. Entiendo que es legítimo que lo defiendan y estamos dispuestos a hablar, aunque creemos que va a haber pocos puntos de encuentro. Tenemos pocas esperanzas en que den un giro de 180 grados. Va a ser una legislatuva corta y el pacto llegará con una alternativa de Gobierno”.

Se manejan plazos de seis meses para tener las bases del acuerdo, ¿será posible?

Manuel Cruz (PSOE): “La comunidad educativa es muy favorable y razonable para llegar a acuerdos. No tienen interés en convertir la educación en un campo de batalla. Si no sale, será por una torpeza manifiesta del PP”.

Marta Martín (Ciudadanos): “Sería mentir decir que todo va a estar en seis meses. Tramitarla un cambio de este tipo va a llevar tiempo, por eso pedimos que la moratoria a las reválidas se hiciera durante el tiempo que dura una legislatura”.

Javier Sánchez (Unidos Podemos):Me parece pura pirotecnia. En un debate se tienen que hacer promesas de cara al futuro para dar una ilusión que nadie tiene. Dentro de seis meses lo veremos, pero diría que van a reunir a la subcomisión pocas veces porque les interesa salvar su ley como puedan. Que la imagen de falso consenso no nos impida ver el fondo. Queremos hablar, pero no nos fiamos del PP”.

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