Las negociaciones entre Nissan y el comiité finalizan sin acuerdo y habrá huelga

La negociación entre la dirección de Nissan en Ávila y el comité de empresa para que cese la huelga convocada en los denominados 'sábados productivos' ha culminado sin acuerdo, ha confirmado la compañía en un comunicado, y el comité ha anunciado paros al no garantizarse el mantenimiento de la plantilla.

En mayo, el comité de empresa de Nissan decidió convocar huelga todos los sábados productivos, días que figuran en el calendario de la fábrica como laborales, con el objetivo de exigir el cumplimiento de los planes de futuro para la planta de automoción de Ávila, que pasan por la llegada de mayor carga de trabajo, y denunciar el incumplimiento del convenio colectivo firmado este año.

Esta mañana la dirección de la planta de Nissan en Ávila y el comité de empresa se han vuelto a reunir para intentar llegar a un acuerdo sobre el conflicto de los sábados productivos, pero las negociaciones entre ambas partes se dan por finalizadas, según ha informado la multinacional nipona en una nota de prensa.

La última propuesta de la dirección para poder llegar a un acuerdo para realizar los sábados productivos de junio y julio ha sido la de garantizar la plantilla hasta el 31 de marzo de 2017, que según ha señalado la empresa es “hasta cuando se tiene visibilidad de la evolución de los mercados y, por lo tanto, de los volúmenes de producción”.

Esa propuesta también incluiría prorrogar un año el actual Convenio Colectivo, con un incremento salarial pendiente de definir, y un plan de prejubilaciones según lo acordado en el Plan de Competitividad de 2015.

El citado documento también recogería el compromiso de negociar en septiembre la reversión de los conceptos salariales reducidos en el anterior convenio, en caso de no venir carga de trabajo adicional.

Según ha denunciado la empresa, la representación de los trabajadores “ha mantenido su nivel de exigencia al que la dirección no puede dar respuesta con la visibilidad que se tiene actualmente de la evolución de los volúmenes de producción”.

La consecuencia más inmediata será la anulación de los cinco sábados productivos que se habían fijado en el calendario laboral de Nissan para la planta abulense durante los meses de junio y julio, pese a que la empresa había apuntado a primeros de este mes la necesidad de trabajar varios sábados este año con el objetivo de alcanzar las 16.000 unidades producidas en el presente ejercicio.

La dirección de la multinacional ha concluido que Nissan “siempre ha mantenido un diálogo abierto y transparente”.

Por su parte, el comité ha señalado que la dirección no garantiza ese mantenimiento de la plantilla, integrada por 488 trabajadores en la actualidad, a partir del primer trimestre del año 2017, y anuncia nuevas movilizaciones, según han explicado en declaraciones a EFE.

Tras la ruptura de las negociaciones entre trabajadores y empresa, las organizaciones sindicales han denunciado el incumplimiento, por parte del fabricante japonés de vehículos, del convenio colectivo firmado recientemente, por el que llegaría a Ávila mayor carga de trabajo, se comprometían al mantenimiento de 25 puestos de trabajo, se produciría la nueva versión del Cabstar/NT400 a partir de 2019, así como a un nuevo proyecto que supondría nuevas inversiones y contrataciones.

Para el comité, el mantenimiento de la plantilla es el principal objetivo y “al no estar garantizado” los representantes de los trabajadores no han aceptado la última propuesta presentada por la empresa que “no está en disposición de garantizar la plantilla más allá del 31 de marzo de 2017 por no disponer de las previsiones de producción hasta septiembre”, según han manifestado desde el comité.

A fin de explicar la situación generada tras la ruptura de las negociaciones, el Comité de Empresa tiene previsto convocar una asamblea de trabajadores la próxima semana por la tarde.

En dicha reunión, se planteará la adopción de nuevas medidas de presión “que irán en aumento”, como la convocatoria de jornadas de huelga entre semana, según han apuntado desde el Comité y que se sumarían a las huelgas llevadas a cabo durante los sábados.

También está previsto la convocatoria de una reunión con todas las fuerzas políticas locales, así como con las autonómicas, y se plantea además solicitar la intermediación del Servicio Regional de Relaciones Laborales (SERLA).