La policía detiene a un anciano que protestaba frente al Museo del Prado

“Todo estaba en calma, turistas paseando, gente tumbada en el césped el domingo a mediodía”, explica Olga Rodríguez: “Y por ahí aparece un viejito con su bici y un cartel en ella, con una parrafada en la que pude leer que reivindicaba derechos para los ciclistas, y protestaba contra la restricción en los horarios del Metro... El hombre no molestó a nadie, estaba a lo suyo. De repente, llega la policía, se le acerca y le detiene, le detiene esposándole y cacheándole. Varias personas se acercaron para protestar contra la detención”.

La versión policial, en cambio, asegura que comenzó a “lanzar gritos e insultos” a grandes voces por lo que “se montó un gran revuelo debido a que el lugar estaba muy concurrido para acceder al museo y dio una bofetada a una agente tras negarse a mostrar su documentación”.

“Cuando la policía vio que mucha gente se acercaba a mirar y a protestar”, recuerda Rodríguez, “y ante las quejas de gente, una agente dijo que el tipo le había dado una bofetada. Yo no vi bofetada, y allí quienes estaban dijeron que no había habido bofetada, que el hombre se asustó cuando fueron a detenerle y se movió, pero no hubo bofetada. 'No te tocó', le contestó una mujer a la agente. Supongo que la versión policial ha buscado coartada para justificar la detención porque se ha armado mucho jaleo”.

A las 18.50 fue puesto en libertad tras tomarle declaración y a la espera de señalamiento para un juicio, ha afirmado la polícía.