Se Vende: Tu Hospital, Tu dignidad, Tu sanidad
Este mensaje se lee en las movilizaciones de La Princesa y en las del resto de hospitales madrileños. La hoja de ruta de la sanidad madrileña muestra el estado penoso y paupérrimo de la democracia, hace visible los poderosos lobbies de presión de la sanidad privada, deja en evidencia la peligrosa laguna de las incompatibilidades entre cargos públicos e intereses privados y hace un tránsito perfectamente calculado entre el modelo de sanidad como derecho universal al modelo de negocio de los seguros.
Con todo lo más grave es que dinamita el modelo de planificación sanitaria que integraba los diferentes ámbitos: desde la primaria a la hospitalaria, centros de especialidades o las Urgencias. Un sistema que incorporaba investigación y avances médicos a través de los hospitales universitarios públicos y garantizaba la atención integral con equipos multidisciplinares entre los centros hospitalarios y el resto del sistema.
Lo más detestable es que esta voladura (des)controlada tiene graves riesgos para la ciudadanía y en la práctica es puro negocio.
En los negocios madrileños hay un constante cambio de sillas en el que los mismos personajes van ocupando distintas sillas pero siempre acaban beneficiados. El jefe de la patronal madrileña Arturo Fernández, por ejemplo, está relacionado con estos procesos de privatización a través de su presencia en el Consejo Asesor de la 'Fundación Lafer' que preside el ex consejero de Sanidad, Manuel Lamela, que a su vez es actualmente presidente de 'Madrid Medical Destination“.
En la práctica es la parte institucional del lobby de la sanidad privada, en el que tienen presencia -entre otras- las empresas Capio y Ribera salud, principales beneficiarias de las privatizaciones de la sanidad madrileña .Medical Destination ha tenido casi dos millones de euros en subvenciones públicas como proyecto de “innovación”. No olvidemos tampoco que Bankia está entre los propietarios iniciales Ribera Salud y que diferentes dirigentes del PP están claramente relacionados con CAPIO.
En las siguientes privatizaciones habrá que estar atentos –también- a las concesiones de cafeterías y otros servicios que ya tiene el jefe de la patronal en otros hospitales además de con la empresa púbica Espacios y Congresos de la que es “empresa homologada”, como lo es Diviertt. Todo ello le proporciona un importante volumen de negocios.
Este mismo y otros personajes nos los encontraremos relacionados con las posibles “donaciones” irregulares para campañas electorales, a través de FUNDESCAM (la fundación madrileña del PP). Así las cosas no es de extrañar que encontraran “cojonuda” a Esperanza Aguirre y que tirando del hilo hacia atrás pudiéramos llegar –seguramente- hasta el Tamayazo.
En conclusión, con total impunidad y en un juego de trileros con información oculta, se está produciendo una ruptura del sistema público sanitario, que puede ser irrecuperable. Pero además se está produciendo trato de favor a las empresas del sector sanitario privado.
La ruptura del sistema público con el desmantelamiento del Hospital de la Princesa, las privatizaciones de otros seis hospitales y la entrada de gestión privada en los ambulatorios son los objetivos principales del negocio, sobre el que es imprescindible y urgente investigar –además- la legalidad de todo el proceso y las implicaciones de altos dirigentes del PP .
Se trata pues de dignidad, de sanidad y de derechos. Nada de ello está en venta. Tampoco los Hospitales de Madrid, los ambulatorios o los trabajadores del sector público sanitario. Se trata de legalidad y transparencia, se trata de decencia y de que en este proceso madrileño de privatización de la sanidad políticos, ex políticos , familiares y cercanos al PP están ejerciendo de lobistas de forma escandalosa.
No olvidemos que después de años de investigación a “Al Capone” le acabaron encarcelando por un delito fiscal. En este caso, seguramente, será necesario seguir el rastro del dinero, de las subvenciones, de los contratos y concesiones de todos y cada uno de los beneficiarios para desenmascarar lo que a todas luces es la lucha entre nuestra salud y sus negocios.
Inés Sabanés es coportavoz de EQUO Madrid
