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Ninguno de los grupos municipales ha presentado enmiendas referidas a la celebración de la tradicional carrera de burros al borrador de la nueva ordenanza sobre tenencia de animales. El articulado recoge que no se puede atentar contra los animales ni someterlos a trato vejatorio en ningún espectáculo callejero. Pero al preguntarles sobre este evento en concreto, que cada 25 de julio, acogen las calles de la capital alavesa, todos eluden posicionarse. Delegan la tarea a los técnicos municipales.
Ellos serán quienes definan qué comportamientos son vejatorios para los animales según lo que presencien en cada edición. “No se puede atentar contra los animales ni herir la sensibilidad del público que presencia estas tradiciones. Pero son temas muy subjetivos. Es difícil definir qué es trato vejatorio. Lo que es para unos, no lo comparten otros. Serán los técnicos quienes ajusten criterios en cada edición”, explica la concejala del PNV, Blanca Guinea.
Los representantes municipales en ningún caso se plantean suspender la celebración de la carrera de pollinos, uno de los actos centrales de la fiesta del día de Santiago desde 1968, pese a la insistencia de algunos colectivos animalistas. “Llevamos años esperando una respuesta. No pueden seguir mareando. Tienen que definirse ya. La carrera se sigue celebrando cuando hay informes veterinarios que reflejan que para nada es inocuo el trato que reciben los pollinos”, exige Kepa Tamames, de ATEA, una de las agrupaciones consultada para la redacción del articulado.
Parecido ocurre con las vaquillas utilizadas durante los festejos de la Blanca. Ningún comentario al respecto. EH Bildu, la formación municipal que más enmiendas ha presentado al borrador de la nueva ordenanza, 28 en total, sí reconoce que pretenden estudiar este caso aunque de momento no es su prioridad. “Tenemos dudas sobre si legalmente se pueden prohibir ciertos espectáculos y sobre cómo puede hacerse. No obstante, nuestra prioridad es otra, que dejen de celebrarse las corridas de toros en Vitoria y por eso presentamos la enmienda”, explica Iratxe López de Aberasturi, de Bildu.
Prohibir circos con animales
En dicha propuesta de rectificación a la ordenanza piden al Ayuntamiento que no ceda sus locales municipales, como el multiusos del Iradier Arena, para la celebración de espectáculos donde se torture o mate animales. “Nos parece bien la propuesta de Bildu. No obstante, es una incoherencia total, y así se lo hemos trasladado a ellos, que hagan diferencias entre toros y vaquillas. El maltrato se da en ambos casos, aunque a estos últimos bovinos no se les llegue a matar como a los toros”, explica Kepa Tamames.
Los representantes de Bildu, al introducir esta propuesta, obligarán al resto de los grupos a posicionarse sobre la celebración de corridas de toros en la capital alavesa.
También han pedido que no se celebren espectáculos circenses en los que se empleen animales, una pretensión que según otros grupos de la oposición, no se puede cumplir. “El Ayuntamiento no tiene capacidad para prohibir, es competencia autonómica. No damos ni siquiera licencias para actividad a los circos ni tampoco tenemos capacidad inspectora. Esto le corresponde a la Diputación”, explica el portavoz socialista, Peio López de Munain.