Las entidades financieras concedieron 14.229 daciones en pago sobre vivienda en 2012, --de las que 2.290 fueron en Andalucía--, lo que supuso una quinta parte de las ejecuciones hipotecarias iniciadas y un 36,5 por ciento de las adjudicaciones finalmente inscritas, según datos procedentes del Registro de la Propiedad.
A la vista de estos datos, los registradores aseguran que el peso relativo de las daciones sobre las ejecuciones finales de hipoteca demuestran que esta opción “se utiliza continuadamente en la práctica bancaria habitual”, aunque “pueda ser planteada de forma más o menos selectiva según las distintas entidades financieras”.
Los datos desagregados muestran además que el 80,4 por ciento de estas daciones en pago se realizaron sobre viviendas habituales y que la mayor parte, el 61,2 por ciento, beneficiaron a propietarios españoles, frente al 38,7 por ciento, que eran extranjeros.
Estos son algunas de las conclusiones de la encuesta realizada por el Colegio de Registradores entre todos los registros de España para conocer “la realidad hipotecaria más actual” en materia de ejecuciones hipotecarias.
Por comunidades autónomas, las daciones en pago se concentran en las comunidades autónomas con mayor actividad inmobiliaria: Valencia (20,9%), Cataluña (16,5%), Andalucía (16,1%) y Madrid (15,8%).
HASTA 65.778 EJECUCIONES INICIADAS.
Así, los datos revelan que durante el pasado año se expidieron 65.778 certificaciones de inicio de ejecución hipotecaria sobre vivienda, el equivalente al 24 por ciento de las 274.583 hipotecas constituidas en el mismo periodo, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Dada la diferencia temporal entre las hipotecas constituidas y los procesos de ejecución iniciados, los registradores toman también la media anual de hipotecas firmadas entre 2005 y 2007, que fue de 1,2 millones, de lo que se desprendería que la proporción de procesos abiertos supondría el 5,1 por ciento de ese total.
Por otro lado, el 74,7 por ciento de las ejecuciones hipotecarias iniciadas correspondieron a primeras viviendas. Además, el 75,5 por ciento fueron procesos abiertos correspondientes a propietarios españoles y el resto a extranjeros.
Los extranjeros con mayor peso relativo fueron los ecuatorianos (5,7%), marroquíes (3,7%), británicos (2,1%) y rumanos (1,6%). En cuanto al resto de ciudadanos sudamericanos, alcanzaron en conjunto el 2,2% de las ejecuciones iniciadas.
Si se ponen en relación estos datos con el peso de estas nacionalidades sobre el total de compras de vivienda en 2012 entre extranjeros, se observa que los ecuatorianos no se encuentran ni siquiera entre los 19 primeros puestos del ránking.
Es el caso, sin embargo, de los británicos, que concentraron el pasado año el 16,6% de las compras entre los extranjeros, por delante de los rumanos (2,8%) o los marroquíes (2,4%).
Por otro lado, el pasado año se materializaron 38.976 adjudicaciones hipotecarias, lo que supone casi el 60 por ciento de los procesos iniciados, de las que el 77 por ciento de estas adjudicaciones correspondieron a primeras viviendas. En este caso, el 63,1 por ciento correspondían a viviendas de ciudadanos españoles.
Los registrados explican que “se trata de un dato sin duda significativo debido a que la pérdida de la primera vivienda tiene un impacto social muy superior a la segunda residencia u otro tipo de fincas”.