Los accidentes mortales en el trabajo, otro año en cifras récord

“Un solo muerto ya es mucho”. En ese punto coinciden todos los agentes implicados, pero no en la cifra total de accidentes laborales mortales en Andalucía en 2015. Según la Junta, hubo 45 fallecidos de enero a junio y otro el mes siguiente. El Ministerio de Empleo y Seguridad Social refleja 43 en el primer semestre. Y los sindicatos añaden siete muertos en julio: 50 en total. Tras el récord de 94 trabajadores fallecidos en suelo andaluz en 2014 (por 61 en 2013), los números, en todo caso, no bajan.

La crisis económica abrió la puerta a un invitado incómodo: la precariedad laboral. El trabajo inseguro y el aumento de la siniestralidad están entonces a un paso. El recorte en prevención de riesgos laborales por parte de las empresas es clave. Pero también, advierten sindicatos y administraciones, el miedo a perder el empleo que lleva a obreros a asumir peores condiciones de trabajo. El acicate del desempleo unido al descenso en políticas de seguridad.

El tramo enero-junio de 2014 registró un total de 49 fallecimientos tras accidente laboral por 29 en el mismo periodo de 2013. Este año ya son 43, según el Ministerio, y 45 según la Junta. “No vamos a entrar en el debate de las cifras”, apunta una de las fuentes consultadas. Y completan: “una sola muerte ya es preocupante y debe movernos a alertar a empresas y trabajadores para que extremen las medidas de seguridad”. Siete nuevas muertes en julio (con agosto pendiente de validar datos) completan la dramática lista, según la información a la que ha tenido acceso eldiario.es/Andalucía.

Las cifras, en cualquier caso, dejan a Andalucía como segunda región española con mayor siniestralidad laboral mortal en el semestre, superada por Cataluña (49) y por encima de Madrid (36). El número total, a nivel nacional, también es creciente: 285 en el primer semestre por 276 un año antes (un 3,3% más). Sevilla, con 16 trabajadores muertos, abre el listado de la comunidad seguida de Málaga con seis. Jaén y Granada alcanzan cinco muertes por cuatro en Córdoba y Almería, dos en Huelva y una en Cádiz. Todo muestra una “tendencia al alza”, dicen organizaciones sindicales. La Junta, por su parte, advierte que la siniestralidad laboral “ha tenido una evolución positiva en el periodo en el que se ha desarrollado la Estrategia Andaluza de Seguridad y Salud en el Trabajo 2010-2014”. En sus cinco años de ejecución, hubo una reducción del 22% del total de incidencias y del 20% en el accidentes mortales, según la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo.

“El empleo es cada vez más precario”

Comisiones Obreras (CCOO), por su parte, denuncia que la precariedad y el deterioro en la prevención de riesgos en las empresas “disparan” el número de accidentes y muertes en el trabajo. Los datos que ofrece el Gobierno español apuntalan esa “tendencia de incremento de la siniestralidad iniciada hace varios trimestres”. De ahí, el sindicato reclama “que se ponga coto a los incumplimientos en seguridad y salud laboral”.

Una subida en el semestre del 10% del total indica “el deterioro tan fuerte en las condiciones de trabajo que están sufriendo las personas trabajadoras”, según la secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente de CCOO Andalucía, Nuria Martínez. Y muestra, sugiere, “la verdadera cara de la recuperación económica que se nos vende desde el Gobierno del Partido Popular, una falsa recuperación teñida de precariedad y falta de medidas de seguridad, con numerosas muertes que podrían haberse evitado”.

El “repunte” de 2014, según la Administración Autonómica, está “relacionado entre otros motivos con la incipiente recuperación de actividad y el empleo” que conlleva “un aumento de los riesgos laborales”. Para la Junta, y contra la opinión de los sindicatos (señala 46 fallecimientos), “los últimos datos disponibles de enero a julio reflejan una disminución de un -8%” en accidentes mortales. Datos que, en todo caso, no satisfacen “en lo más mínimo al Gobierno andaluz”. Por esto, pide a empresas y trabajadores “que extremen la vigilancia y el cumplimiento de las medidas de prevención de riesgos laborales”.

Desde la Unión General de Trabajadores (UGT) subrayan “que el empleo es cada vez más precario”. La desprotección creciente de los asalariados trajo “un año pasado catastrófico en accidentes mortales, especialmente en Andalucía”, refiere el secretario de Relaciones Laborales de UGT, Carlos Naranjo. Los números “siguen creciendo” en una “preocupante tendencia al alza”, dice, al tiempo que exige “a la Junta de Andalucía que obligue al cumplimiento de la ley, porque no toma cartas en el asunto”.

“2015 no apunta a una mejora de la situación”

En términos totales (sin ponerlos en relación con la población activa), sumando los accidentes de trabajo con baja (en jornada e in itinere, de camino) hasta junio, la comunidad andaluza es la que más presenta con 43.723 de los 254.197 estatales. La mayor parte terminaron con calificación leve salvo 499 que fueron graves y 43 mortales (6 de ellos durante el desplazamiento del domiclio a la empresa o viceversa).

“Si para Andalucía 2014 fue un año de un aumento considerable de la siniestralidad, este 2015 no apunta a una mejora de la situación”, según CCOO. “El único dato menos negativo”, precisan, “es que la siniestralidad mortal no ha aumentado aunque sigue estando en niveles inaceptables y muy por encima de la media nacional”.

El aumento “generalizado” de la siniestralidad “a un ritmo muy superior al empleo” señala que son “fenómenos directamente relacionados ya que los puestos de trabajo que se crean son de escasa calidad, precarios temporales, a tiempo parcial y con el miedo a perder el empleo como instrumento para disciplinar a las plantillas”. Una constante que afecta a los “grandes sectores de la actividad económica”, agrario, construcción, industria y servicios.

Tanto CCOO como UGT, en este sentido, piden la elaboración “urgente” de la nueva Estrategia Andaluza de Seguridad y Salud en el Trabajo que marque “las prioridades, horizontes y objetivos” a desarrollar en los próximos años. Del mismo modo ven necesario el nombramiento del nuevo Director General de Relaciones Laborales y Seguridad y Salud Laboral, plaza aún vacante, “para que incida e impulse desde la administración un mayor control de los incumplimientos del empresariado”.

El organigrama completo de la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo “no está cerrado del todo” y “en breve se contará con ese nombramiento”, confirman fuentes de la cartera regional. A partir de la designación, que arrastra los tiempos propios de la formación del nuevo Gobierno, apuntan, quedará encauzada este área.

Desde el Gobierno andaluz, además, valoran de manera positiva la creación de “un grupo de trabajo con los agentes sociales en el seno del Consejo Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales con el objetivo de poner en marcha un plan de actuaciones” y analice “si realmente se está observando un repunte sostenido de la siniestralidad laboral, a qué causas obedece”.

Para “incidir más en la investigación de los riesgos psicosociales y la vigilancia de las enfermedades profesionales”, Andalucía puso en marcha en 2014 “un plan especial” que desarrolla anualmente “alrededor de 100 visitas a aquellas empresas que presentan mayores riesgos de que sus trabajadores estén más expuestos a sufrir enfermedades relacionadas con el trabajo”.