Alaya ¿jueza y parte (nunca mejor dicho)?

¿Es normal que el juez instructor de una caso muy complejo y mediático 'se mude' a la sección de la Audiencia que resuelve los recursos de ese caso? Por mucho que se pudiera abstener, esta circunstancia no se ha tenido de momento en cuenta y el presidente de la Audiencia de Sevilla se acogió “sin excepciones” al criterio de “antigüedad escalafonal” para adscribir a Mercedes Alaya a la Sala que analiza y decide sobre los recursos de apelación del caso de los ERE.

La cuestión no es definitiva. De hecho, este martes la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) iba a analizar el reparto de las nuevas plazas de la Audiencia, entre ellas la adscripción de Alaya a la Sección Séptima. Pero pospuso su decisión a petición del propio presidente de la Audiencia, Damián Álvarez, a fin de que pueda “valorar las consideraciones de los componentes de la Sección Séptima, no conocidas previamente a la remisión de su acuerdo”.

Las consideraciones de los hipotéticos futuros compañeros de Alaya se resumen en su “profunda preocupación por la imagen que la Administración de Justicia pueda dar al adscribir a la instructora del llamado caso de los ERE a la Sala a la que se turnan los recursos de apelación y queja, interpuestos en una causa de tanta complejidad y relevancia no sólo desde un punto de vista jurídico sino en especial por su repercusión política del todo inaudita en el ámbito judicial andaluz”.

Los magistrados transmitieron hace unos días su “pesar” porque esta cisrcunstancia “no haya sido tenido en cuenta, incrementándose así, de forma que entienden evitable, la presión propia de su intervención jurisdiccional en un proceso de tanta trascendencia política”, más aún porque “la tramitación de estos recursos es más que posible que se mantenga” una vez que la magistrada Mercedes Alaya se reincorpore tras la prórroga de su cese en el Juzgado de Instrucción número 6.

El presidente de la Audiencia está a tiempo de formular “nueva propuesta, máxime cuando no existe premura al respecto ante la fecha prevista para la publicación del concurso e incorporación de los nuevos magistrados”, apuntaba este martes el TSJA

En su acuerdo del pasado jueves, el presidente de la Audiencia de Sevilla, en orden a determinar la composición de las cuatro secciones penales de la Audiencia como consecuencia del incremento de una plaza de magistrado para cada uno de ellas, acordó “aplicar, estrictamente y sin excepciones, el criterio objetivo de la antigüedad escalafonal”, previa audiencia tanto a los actuales magistrados, por si deseaban cambios internos con carácter previo, como a los nuevos destinados para que especificaran sus preferencias de adscripción. La nueva composición, a falta de la revisión, se realizó siguiendo el precedente creado con motivo de la ampliación del número de magistrados del orden penal llevada a cabo en 2008.

Hasta el propio consejero de Justicia, Emilio de Llera, que trata de no pronunciarse en exceso sobre cuestiones meramente judiciales, señaló este martes que “habiendo cuatro secciones a las que ir no parece la solución más acertada mandarla a la misma sección, más que nada por respeto a sus compañeros”.

El CGPJ resolvío el pasado 3 de marzo el concurso de traslado para magistrados a través del cual un total de 236, entre ellos la jueza Alaya, obtenían nuevos destinos. Alaya, con nueva plaza en la Audiencia, solicitó dicha prórroga “hasta que la instrucción de las mismas esté avanzada o concluida para no causar un importante menoscabo al servicio público que se presta”. El TSJA informó favorablemente de la petición de prórroga solicitada y consideró que “habría de extenderse temporalmente, al menos, hasta la toma de posesión del nuevo magistrado” que se incorpore al Juzgado de Instrucción número 6 con motivo del subsiguiente concurso por vacante.