El futuro de Catalunya importa mucho en Andalucía, dos comunidades autónomas situadas en extremos geográficos opuestos del país pero unidas por vínculos socioeconómicos que dibujan una relación provechosa para las dos partes. Bastan tres parámetros para explicarlo con cifras: relaciones comerciales, turismo y demografía.
Empezamos por esta última, dado que es habitual escuchar a los políticos en Andalucía decir que “más de un millón de andaluces residen en Catalunya”. En realidad, son algo más de la mitad, si se tiene en cuenta sólo a los nacidos en Andalucía. Pero se tiende a considerar también a los hijos de andaluces que han nacido en Catalunya y por eso se engorda la cifra.
De este modo, el último padrón desvela que 594.734 personas nacidas en Andalucía viven en Catalunya, lo que la convierte en el principal destino de los andaluces que emigran a otros territorios. Son el 41,9% del total de andaluces que residen en el resto de España. Ocurre lo mismo a la inversa: Andalucía es el primer destino de los catalanes que se mudan a otras comunidades autónomas y son 107.551 los nacidos en Catalunya que viven en el sur (26,2% de sus emigrados).
Destino de exportaciones
En cuanto a las relaciones comerciales entre los dos territorios, hay que destacar que, según datos de la Dirección General de Economía de la Junta de Andalucía, que ha elaborado un informe en la materia, existe un superávit para Andalucía de 860 millones de euros, o sea, exporta más de lo que importa de Catalunya. Esto representa el 0,6% del PIB (producto interior bruto) de Andalucía.
En concreto, Catalunya ocupa el segundo puesto, tras Madrid, en las exportaciones de los empresarios andaluces, dado que recibe mercancías de Andalucía por valor de 3.743,7 millones de euros, según la última información del Proyecto C-Intereg, del Centro de Predicción Económica (Ceprede), que son de 2014. Esto supone el 6,8% del total de las exportaciones de Andalucía y el 13,2% si sólo se consideran las ventas a otras comunidades autónomas. Por su parte, Andalucía importa de Catalunya productos por un valor de 2.883,7 millones de euros, lo que la convierte en la tercera comunidad autónoma como origen de las compras de los andaluces.
Las principales mercancías exportadas desde Andalucía a Catalunya son productos químicos (1.230 millones de euros), según el mismo informe, representando casi un tercio de las ventas totales. Le siguen productos siderúrgicos y combustibles líquidos, y a mayor distancia, productos alimenticios elaborados y aceites. La principal compra de Andalucía a Cataluya son también de productos químicos (30% del total).
Tercer destino de los catalanes en vacaciones
En tercer lugar, el turismo. El Instituto Nacional de Estadística (INE) cifra en 1.033.227 los viajes de residentes en Catalunya a Andalucía el pasado año, un 13,5% del total que hicieron a otras comunidades autónomas. Con ello, Andalucía es el tercer destino de los residentes de Catalunya cuando se desplazan por España. Mientras, para los andaluces, Catalunya es el cuarto destino si se habla de turismo a escala nacional, con 436.595 viajes en 2016 (9%).
Con estas cifras, el citado informe pone énfasis en la repercusión que la situación que se vive en Catalunya pueda tener en la evolución de la economía para Andalucía. “Va a depender fundamentalmente de la duración del clima de incertidumbre, por el potencial impacto que ésta tiene en las decisiones de consumo, inversión y financiación de hogares y empresas, y, con ello, en el crecimiento de la economía”, subrayan los expertos. No en vano, Catalunya es la comunidad autónoma con mayor participación en el PIB de España (19%) y en el tejido empresarial (18,6%) y la segunda en términos de población (16,2%), por detrás de Andalucía.
El propio presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, ha hecho referencia a ello, incidiendo en que “son muchos los lazos” entre los dos territorios, igual que entre Catalunya y el resto de España. “El peor enemigo de la economía es la incertidumbre y en los últimos años se han ido marchando de Catalunya hasta 1.200 empresas, también pequeñas y medianas, lo que significa que algo está pasando”, ha apuntado.
De hecho, la CEA se apresuró en respaldar por unanimidad la propuesta de su presidente contra “la deriva nacionalista” en Catalunya para reiterar públicamente su “compromiso firme” con la Constitución Española y con la unidad del país, instando a la necesidad de una repuesta “contundente” frente a acciones que tienen “incidencia política, económica y social”.
Instituciones como el Banco de España, el Servicio de Estudios del BBVA y la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) han incidido en que la crisis en Catalunya ha elevado el grado de incertidumbre existente sobre el desenvolvimiento de la economía en el conjunto del país en un futuro próximo y las previsiones de crecimiento de Andalucía tampoco se escapan de este problema.