Sólo las personas que presenten el certificado europeo de vacunación en vigor o una prueba de diagnóstico negativa (test de antígenos o PCR) podrán acceder al interior en locales de ocio nocturno a partir del 5 agosto en Andalucía. Esta es la principal decisión que ha tomado el Comité Regional de Alto Impacto en Salud Pública, el Comité de Expertos que asesora a la Junta de Andalucía, en una reunión celebrada en la tarde de este lunes en la que ha estado presente el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno.
El Certificado Covid Digital de la UE, en vigor desde el pasado 1 de julio en todo el territorio nacional, recoge la pauta de vacunación, el certificado de recuperación o una PDIA (Prueba Diagnóstica de Infección Activa) negativa en las últimas 72 horas. En el caso de Andalucía, se puede descargar a través de ClicSalud+, de la app Salud Andalucía o en los propios centros de salud.
El propio presidente andaluz ya se mostró partidario la semana pasada de exigir el certificado para acceder a determinados establecimientos, siguiendo así la estela de otros países como Francia o Italia, o de Galicia en España. Desde su punto de vista, se trata de un elemento con una doble vertiente: de un lado, “disuasorio” para controlar la pandemia y, de otro, “motivador” para aquellas personas que aún, pese al llamamiento de las autoridades, no estén vacunadas. No obstante, una medida de este tipo sigue encerrando muchas dudas legales.
También se han puesto sobre la mesa medidas para controlar la transmisión de contagios en las residencias de mayores. En este sentido, se ha acordado realizar pruebas diagnósticas semanalmente en aquellos trabajadores sociosanitarios y sanitarios que no estén vacunados frente a la Covid y, en los centros donde se registre al menos un caso confirmado, se establecerá de forma obligatoria el uso de la mascarilla en los usuarios, ya que actualmente es obligatoria en los trabajadores.
El Comité de Expertos ha destacado que “la tendencia ascendente de la pandemia durante las últimas semanas sitúa a Andalucía en un nivel de riesgo medio aunque con ciertos signos de estabilización”, tal y como ha destacado al término del encuentro el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre. Ante esta situación, en la reunión también se ha propuesto la prórroga de las medidas vigentes desde el pasado 22 de julio y que estaban relacionadas con la modificación de aforos y toque de queda.
El consejero también ha señalado que “la incidencia en la población joven sigue siendo muy elevada debido a la penetración de la variante Delta”, siendo el triple de la media andaluza en el tramo de 20 a 29 años. “Sin embargo, aunque esta incidencia registra un menor impacto gracias a la alta cobertura vacunal de la comunidad, se aprecia un ligero ascenso en los indicadores de presión asistencial”, ha apostillado.
Por su parte y, respecto a las residencias de mayores, el consejero ha señalado que “aunque los casos confirmados en las últimas semanas tienen una mínima repercusión a nivel asistencial, es de vital importancia reforzar este entorno”.
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