CCOO, 40 años después: de la clandestinidad al reto de las nuevas realidades del mundo del trabajo

A más de uno le habrá descolocado el lugar elegido por CCOO Andalucía para celebrar este lunes su 40º aniversario. El Real Alcázar de Sevilla, centro histórico de poder político y económico, refleja una simbología intencionada a ojos de “la oligarquía”. “Un espacio conquistado de la democracia para que un sindicato de trabajadores pueda hacer un acto de conmememoración”, resume a eldiario.es/andalucia Francisco Carbonero a un mes de dejar la secretaría general. De la clandestinidad a, como dice su lema cuarenta años después, seguir haciendo historia ante las nuevas formas del trabajo.

La “organización más combativa”, presume Carbonero, fue la última en legalizarse (27 de abril de 1977), 18 días más tarde que el Partido Comunista de España, y ahora se autodefinen como “más necesarios que nunca”. Ni corren ni corrían buenos tiempos cuando todo empezó. ¿Cómo fueron aquellos primeros años? ¿Qué otras cuestiones se alcanzaron más allá de las grandes conquistas sociales y laborales a partir de la Constitución? “El mayor logro en aquel momento, absolutamente olvidado” señala Carbonero, a raíz de la “presión” que el sindicato venía ejerciendo en la clandestinidad, fue que “el salario mínimo interprofesional subió el cien por cien entre 1976 y 1979”. Eran años de muchas movilizaciones, a los que precisamente se corresponden todas las imágenes de esta información, facilitadas por el Archivo Histórico de CCOO Andalucía. “Algunos de la político social y algún tribunal de orden público nos decían que nosotros éramos personajes subversivos que solo buscábamos la libertad para delinquir”, comenta echando la vista atrás.

Otra cuestión que se logró en los primeros años, ya con la democracia en consolidación, fue pasar la edad mínima para trabajar de 14 años a 16. “Hace 40 años, con 14 años, ya estaba la gente currando”, apunta Carbonero, que repasa los hechos más relevantes relacionadas con el sindicato y su papel en las conquistas esenciales del país tras la dictadura franquista. “Son cosas significativas también, que en aquel momento eran importantes”, dice. Históricos dirigentes sindicales e importantes personalidades del mundo de la política han compartido recuerdos con el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, como cabezas de cartel.

Un elemento que para CCOO fue también importante fue “cómo conquistamos, porque aquello fue una conquista, los locales del sindicato vertical”. “Nosotros ocupábamos los edificios”, recuerda Carbonero. “Entendíamos que esos espacios eran nuestros, porque se habían conseguido con las cotizaciones de los trabajadores al sindicato vertical”, añade.

CCOO no firmó los Pactos de la Moncloa pero sí que se adoptaron una serie de compromisos. “Subimos los salarios un 30% entre 1980 y 1981”, señala. Otro punto al que “no se le ha dado mucha relevancia” fue la amnistía laboral. “Aquellos que habían estado en la cárcel, además de perder la libertad, habían perdido su empleo y muchos recuperaron su trabajo gracias a ella”. Fue el caso de Eduardo Saborido, fundador de CCOO, y otros muchos, apunta Carbonero.

El secretario general repasa otros hitos, como la primera huelga general que se hizo en España, el 20 de junio de 1985, por el sistema público de pensiones. Carbonero pone énfasis en la posterior del 14 de diciembre de 1989. “La unidad de acción con UGT había estado muy fragmentada pero se volvió a recuperar en aquella convocatoria”. La universalización del sistema de pensiones, de la sanidad y de la educación, entre lo alcanzado. “Fue la propuesta sindical prioritaria, el Gobierno de Felipe González tuvo que sentarse con nosotros y fue un avance importantísimo”, explica Carbonero.

En el ámbito puramente andaluz, el secretario general apunta el protagonismo de CCOO en la conquista de la autonomía, que tuvo como continuación más reciente la “influencia” del sindicato en la reforma de Estatuto de Autonomía “para situar cosas importantes” en el nuevo texto. La protección social de los trabajadores del campo, que se quedaba fuera con el 'decretazo' de Aznar, provocó también grandes movilizaciones por parte de CCOO. “Miles de personas fuimos a Madrid andando”, recuerda.

“Hoy, muchas cosas parece que no tienen valor y que ya estaban ahí”, señala. Ahora, “hemos retrocedido en cosas y nuestra apuesta está encaminada a que el nuevo crecimiento económico se visualice mejor con una generación distinta que llega al sindicato, con mujeres, con jóvenes, con gente en situación precaria, ante las nuevas realidades del mundo del trabajo y los nuevos segmentos de trabajadores”, concluye Carbonero. “Hay muchísima gente buscándose la vida en situaciones y fórmulas inimaginables hace pocos años. ”Es el reto que tenemos por delante“.