Anticapitalistas: “No son posibles dos orientaciones diferentes para la intervención en Podemos”

Anticapitalistas expulsó a sus militantes de Málaga, Granada y Almería mediante una resolución aprobada por la coordinadora federal sin pasar por la secretaría política. En la resolución, que se votó y aprobó el 21 de febrero, se justifica la expulsión con el siguiente argumento: “En la situación actual no son posibles dos orientaciones diferentes respecto a la orientación de la intervención en Podemos. Menos aún, cuando son contradictorias”.

El texto acusa a los expulsados de poner en práctica una orientación opuesta a la trazada desde la dirección confederal de Anticapitalistas aprovechando la “mayoría coyuntural” de la que gozaban en los órganos andaluces. La resolución arroja algo de luz respecto a las razones de la dirección de Anticapitalistas, que hasta este momento se ha negado a responder o a ofrecer explicación alguna de esta división que ha culminado con la expulsión de 60 militantes.

El documento, ejecutivo desde que se aprueba, expulsa en bloque a los colectivos de Anticapitalistas de tres provincias andaluzas (Málaga, Granada y Almería) y concede la representatividad exclusiva de la región a los colectivos de Cádiz, Sevilla y Huelva. “Los hasta ahora colectivos de Anticapitalistas en Granada, Málaga y Almería dejan de pertenecer a Anticapitalistas. Las personas de estos colectivos que forman parte de instancias confederales de anticapitalistas dejan de pertenecer a las mismas”, se lee en el texto.

La web de Anticapitalistas ya no contiene enlaces a las webs o páginas de Facebook de los colectivos no reconocidos. La resolución fue presentada a la coordinadora confederal, encargada de aprobarla o rechazarla, sin que pasara antes por ningún otro órgano, según denuncian los expulsados, que aseguran que antes debería haber sido visto por la secretaría política.

El texto confirma que la expulsión se produce porque los colectivos de Anticapitalistas en Málaga, Granada y Almería mantienen una posición diversa a la adoptada por la dirección nacional respecto a la participación en Podemos. La resolución describe una situación en la que un sector supuestamente en minoría (los expulsados) pone en práctica una orientación distinta para intervenir en Andalucía, “aprovechando la mayoría coyuntural de que disfruta en la SPA [Secretaría Política Andaluza] y bloqueando cualquier expresión orgánica de la opinión del conjunto de Anticapitalistas en Andalucía”.

Una expulsión “ni legítima ni esperable”

Según se desprende del documento, que reflejaría la opinión de la dirección estatal de Anticapitalistas, la forma de intervenir en Andalucía tras la asamblea 'Sí se puede', celebrada en otoño, había quedado debatida y establecida desde diciembre y no fue acatada por el sector rebelde. Los expulsados admiten las disensiones, pero añaden que la expulsión no es legítima ni era esperable.

Este medio ha intentado, sin éxito, conocer la versión tanto de la dirección andaluza como de la dirección estatal de Anticapitalistas. Ha escrito al correo genérico y ha contactado con Jesús Rodríguez (miembro de la ejecutiva andaluza y parlamentario electo por Cádiz) y con Raúl Camargo (miembro de la secretaría confederal y candidato por Podemos a la Asamblea de Madrid) en cuatro y en dos ocasiones, respectivamente, y ha recibido largas o la callada por respuesta.

Izquierda Anticapitalista dejó de ser un partido político en enero para transformarse en asociación y que sus miembros pudieran así optar a cargos orgánicos en Podemos. En Andalucía, esto llevó a la candidatura de Teresa Rodríguez, finalmente pactada con el sector apadrinado por el grupo promotor que gira en torno a Pablo Iglesias. Sin embargo, al sector crítico que abanderaba Rodríguez le salió un grupúsculo aún más contestatario, con epicentro en las provincias orientales andaluzas, y las tensiones  con respecto a la postura a adoptar por Anticapitalistas acabaron teniendo su reflejo en el nuevo partido.

Andalucía desde Abajo, la lista encabezada por la malagueña Rocío Filpo, disputó la candidatura a la presidencia de la Junta y a la dirección del partido en Andalucía a la lista de Teresa Rodríguez. Esa lista está integrada, en parte, por miembros expulsados de Anticapitalistas (la propia Filpo) o desencantados con lo que entienden que es una “deriva pactista” de la gaditana tanto internamente (y de ahí, su acuerdo con Pablo Iglesias para presentar una candidatura unitaria) como institucional.