El alcalde de Cádiz, José María González, Kichi, vive instalado en la polémica. Si la pasada semana estuvo en el centro de muchos comentarios por recortar las asignaciones a las cofradías de la ciudad, en esta ocasión ha decidido no subir al buque escuela Esmeralda de la Armada de Chile, atracado en Cádiz desde el lunes y que permanecerá cinco días en la ciudad.
La 'Dama Blanca', como es conocido también, tiene un pasado controvertido por las acusaciones de que fue utilizado como un centro de tortura durante la dictadura de Augusto Pinochet. Es el motivo por el que el alcalde gaditano se ha negado a visitar el buque escuela. González ha destacado que “es importante no mirar hacia otro lado”, y por eso el Equipo de Gobierno no visitará el Esmeralda, que “simboliza el asesinato de la democracia, y no solamente en Chile”, en palabras del alcalde de Cádiz.
Durante la mañana se ha realizado una presentación del buque escuela a la prensa a la que no ha acudido ni el alcalde ni nigún otro representante político de la ciudad. Ya a mediodía, José María González ha mantenido una reunión con el embajador de Chile en España, Francisco Marambio, con motivo de la celebración en la ciudad de la Semana de Chile, que se desarrolla estos días. En el transcurso de esta recepción, el alcalde ha explicado al embajador de Chile en España la decisión adoptada, según explica la nota del Consistorio. En un posterior encuentro donde se han sumado dos altos mandos de la Armada chilena y tripulantes del Esmeralda, no se ha mencionado esta cuestión.
Ivo Yako Vuskovic, capitán de Navío presente en la reunión, señala que “el alcalde ha estado muy cordial con nosotros, muy amable, ha tenido la deferencia de recibirnos e incluso va a participar en la semana que Cádiz ha dedicado a Chile. Además, le ha dado mucha importancia al hecho de que el Esmeralda es de Cádiz porque se construyó aquí y es la novena vez que viene. No vamos a valorar lo que ha dicho después”, ha manifestado con cierta sorpresa ante las declaraciones del regidor.
“Es importante no perder la memoria”, subraya paralelamente González, que ha encontrado en el embajador Marambio “un aliado y un amigo en la profundización de la democracia. En España ha habido muchas personas empeñadas en que perdiéramos la memoria, y lo mismo que ocurrió en España con el golpe de Estado de Francisco Franco pasó en Chile con Augusto Pinochet, que llegó para interrumpir un proceso de construcción democrática en Chile con miles de muertes y de represaliados”.
ADPHA ha manifestado su repulsa al “barco de las torturas”
Durante la mañana, la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) ya había manifestado su repulsa a que el “barco de las torturas” se encuentre atracado en el puerto de Cádiz “mientras se mantenga la impunidad de los crímenes cometidos en él durante la dictadura de Pinochet”. Este colectivo hará entrega el próximo viernes de un manifiesto a la capitanía del buque con el objetivo de “expresar nuestra denuncia y reivindicación, así como recordar a las víctimas de las torturas y asesinatos que sucedieron en el buque escuela Esmeralda”.
No es la primera vez que la presencia de esta embarcación genera polémica. Sucedió en Holanda el pasado mes de agosto con otra fundación de derechos humanos, aunque desde el buque destacan que lleva en sus velas blancas “un mensaje de amistad en cada puerto en el que recala”.
El regidor de Cádiz ha resaltado el “profundo cariño” que tiene Cádiz al pueblo chileno y ha recordado a Salvador Allende y a los miles de muertos y represaliados por la dictadura chilena. “Estamos convencidos de que nos unen muchísimas cosas, de que tenemos un futuro lleno de oportunidades, de miradas comunes que hablan de justicia social y libertad, y sé que es un sentimiento compartido”, indicó.