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El Carnaval gaditano planta cara a la extrema derecha y al machismo

La comparsa La gaditaníssima, de Juan Carlos Aragón.

Francisco J. Jiménez

El COAC (Concurso oficial de agrupaciones carnavalescas de Cádiz) llega a su fin y lo hace después de haber tocado muchos de los temas de mayor actualidad. Se suele decir que el concurso gaditano es periodismo cantado y por las tablas del Gran Teatro Falla han pasado cuestiones que vienen ocupando mucho espacio periodístico en los últimos meses.

La llegada a la política de la extrema derecha, la violencia machista, el feminismo e incluso la abstención electoral han sido algunos de los temas que más han impactado dentro de los que no buscan provocar la carcajada, sino que pretenden hacer pensar o, directamente, que buscan una crítica sin paños calientes. Ni siquiera ha faltado la exhumación de Franco, con alguna parodia a través del cuarteto Abierto por reforma.

La irrupción de Vox y sus resultados electorales han provocado múltiples reacciones y uno de ellos ha sido de la comparsa Los luceros, que hablan en uno de sus pasodobles que “se ve a una hembra de otros tiempos con diez hijos de su cuerpo, prisionera en la cocina, y se ve a un marica con bigote, con su falda y con su escote, asustado y a escondidas. Y habrá quien hoy contemple ese pasado sin haberse percatado de lo que nos viene encima. Bienvenido al futuro del pasado más oscuro, bienvenido a Andalucía”.

Antonio Martínez Ares, uno de los autores más profundos del carnaval gaditano, toca con la comparsa Los carnívales el tema de los nacionalismos y tira de ironía para explicar cómo una bandera puede solucionarlo todo: “Cuando sientas que tu gente ha perdido VOX y voto busca, busca en la bandera. Cuando te falte hasta el pan, bandera vuelta y vuelta pa almorzar y pa cenar. Verás cuando tus niños empiecen a asimilar las vitaminas de un trozo de tela y no la vayas a vender que falta un telediario pa ir para allá otra vez. Dibuja un pajarito negro en medio y fetén. Y que se salve quien pueda”.

La chirigota Un pasito a la izquierda y otro pasito a la derecha encarna a políticos de diferentes ideologías y en uno de sus pasodobles mete el dedo en la llaga de por dónde flaquea el sistema democrático: “Al político español se le acusa de ladrón, de corrupto y sinvergüenza; de no tener dignidad y no te lo voy a negar, casi tos somos unos mierdas. Unos mierdas con papeles, pero la culpa no es nuestra porque si recuerdan los que votan son ustedes. Mira si vuestro criterio a mí me hace gracia que para darle un giro a la situación vuestra propuesta consiste en quedaros en casa cuando llega el domingo de votación”.

Tampoco puede faltar el asunto laboral en una provincia tan castigada como la gaditana. Durante el año fue noticia ese dilema de producir corbetas para Arabia Saudí o perder carga de trabajo. Juan Carlos Aragón, otro de los grandes, toca el asunto en su comparsa La gaditaníssima: “No le digan a un obrero que aspira a sobrevivir currando en los astilleros que a cambio de su currelo otro pueblo va a morir. No le digan a un obrero que sus barcos puñeteros, que son el pan de cada día, se pagan con bombardeos o se cierra la bahía. Que si el obrero protesta y en el puente manifiesta su derecho laboral otra bomba policial lanzan contra gente nuestra. Que a un obrero le quieran cargar su conciencia por hacer un trabajo que le sirve a una empresa pa enriquecerse con otro negocio mortal, ustedes no tienen vergüenza”.

El feminismo también ha estado muy presente en esta edición del COAC y hay muchos ejemplos sobre ello. La chirigota de Puerto Real Si yo dijera lo que pienso tocó el tema en uno de sus pasodobles del siguiente modo: “Maldito sea este pensamiento y esta cultura tan retrasada, maldito sea nuestro silencio mientras las mujeres siguen siendo maltratadas. A todos esos neandertales que se piensan que hoy en día sí que existe la igualdad les voy a pedir tan sólo que se paren a escuchar. Sólo por ser mujer al quedarte embarazada el trabajo puedes perder. Apenas tiene presencia en nuestro gobierno, con un veintidós por ciento en el parlamento. La mujer es la pensión contra el recorte, sufre discriminación en los deportes y rechazo en muchos puestos de trabajo. Y son muchas las que en manos de un salvaje se han ido de nuestro mundo y sigue subiendo su porcentaje. Y te sigo preguntando después de tantas verdades dónde están las igualdades”.

La sensibilidad en temas como los abusos machistas han estado presentes en los repertorios de muchas de las agrupaciones y la comparsa Los niños sin nombre lo abordaba así: “Escucha un momento y cállate un poco. A ver si te enteras, machito de turno, lo que es un piropo. Porque aunque tu creas que las vuelves locas sólo sienten asco por cada basura que suelta tu boca. Escucha un momento machito de turno, que el mundo ha cambiado y te toca callar. Piropear es agarrar las manos blancas de tu madre y sin que te des cuenta notar que se te escapa un te quiero. Piropear es recitar las coplas que salen del alma”.

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