El Ayuntamiento de Córdoba lanza la próxima semana una campaña para promover el consumo de agua del grifo en bares y restaurantes de la ciudad, haciendo gala de su excelente calidad y adelantándose a la ley que prepara la Junta de Andalucía y donde se propone hacer obligatorio que se ofrezca gratis el líquido elemento a quien lo pida. De momento, este lunes se conocerá el diseño que ha ganado el concurso público convocado el pasado mes de diciembre por la empresa municipal Aguas de Córdoba (Emacsa) y la Asociación Española de Operadores Públicos de Abastecimiento y Sanemiento (Aeopas).
Esta propuesta, que incluirá la serigrafía que se ha elegido en las jarras y botellas de vidrio que Emacsa comenzará entregará, coincide con la celebración el 22 de marzo del Día Mundial del Agua. Con ello, los promotores pretenden que los establecimientos de la ciudad ofrezcan el producto de calidad que sale de la red de abastecimiento sin necesidad de recurrir a agua embotellada de empresas privadas y que habitualmente la envasan en plástico con la consiguiente contaminación por generación de más residuos.
Desde el Ayuntamiento de Córdoba han explicado que los detalles se darán el lunes por lo que no han querido informar del volumen con el que se lanza esta campaña, que en todo caso no es exactamente como lo previsto en el anteproyecto de la Ley de Vida Saludable y Alimentación Equilibrada que fue aprobado el pasado mes de noviembre por el Consejo de Gobierno. En el mismo, que se quiere enviar como proyecto de ley para su debate en el Parlamento de Andalucía este año, la medida que se ha incluido es que los bares y restaurante ofrezcan agua a sus clientes, pero también a quien no lo sea y la pida en la barra.
Una idea que no ha estado exenta de polémica porque hay empresarios del sector que han subrayado la incomodidad que puede suponer tener la jarra y los vasos para todo el que llegue porque hay que ocuparse de reponerlos y de su limpieza, lo cual cuesta. Por el contrario, son muchos también los bares y restaurantes que ya ofrecen este servicio, que antaño estaba muy extendido en Andalucía con el clásico búcaro en la barra del que se servía quien entraba.
Desde Aeopas y Emacsa han expuesto que con este proyecto quieren “fomentar el consumo de agua de grifo entre la población local y visitante”, para lo que repartirán botellas y jarras con “un diseño exclusivo entre establecimientos de restauración y hostelería, edificios de la administración con peso representativo reseñable y directamente entre la población”. Puesto que se trata de poner en valor el agua de grifo, “se generará una imagen original y de calidad del envase siguiendo el camino que ya han marcado otros productos embotellados”, como aceites, vinos, bebidas espirituosas... Y, además, el ganador del diseño que se conocerá este lunes recibirá como premio 2.000 euros.