Si fue el PSOE el que padeció el mayor bocado en el electorado tras el nacimiento de Podemos, IU lo sufrió todavía más por bajas en sus propias filas. Por eso todo lo que concierne a Podemos no puede faltar en un debate en el seno de IU como el que este martes ha enfrentado a los dos aspirantes a liderar la formación en Andalucía: el candidato a la reelección, Antonio Maíllo, y el que fuera secretario de Organización hace años, José Luis Pérez Tapias.
¿“Pesimismo” o “realismo mágico”?, ¿“convergencia” o “deconstrucción”?, ¿“melancolía” o “disolución”? Cuando IU tiene el reto de crecer o desaparecer, Antonio Maíllo tiene un modelo y José Luis Pérez Tapias, otro, y los han expuesto en un cara a cara bastante igualado, donde este último ha estado más incisivo, como corresponde a quien lidera a los críticos, y el primero, sin esconder las dificultades del momento, ha optado por una clave más constructiva.
El debate ha girado en torno a cuatro ejes en los que más se reflejan las diferencias entre las dos candidaturas: el balance de estos cuatro años de la coalición de izquierdas; el papel que pretenden tener en Andalucía, tanto a nivel municipal, con el patrimonio de más de 80 alcaldías, como autonómico, con el resultado agridulce del cogobierno con el PSOE; el modelo organizativo que proponen; y sus posicionamientos de cara a la confluencia con otras fuerzas, con Podemos en el punto de mira.
Y es que en los dos modelos de IU que se enfrentarán de cara a la asamblea del 7 y 8 de octubre hay coincidencia en la filosofía, por lo que las diferencias tienen que ver con el análisis, los objetivos, el modelo organizativo y los planteamientos de cara a los comicios. En los dos casos, la concreción ha llegado hasta donde les permite su compromiso de apostar por la reflexión colectiva para la nueva etapa de IU.
El balance de gestión
En lo que se refiere a estos cuatro años con Antonio Maíllo como coordinador regional, José Luis Pérez Tapias no le ha entrado por las cuentas de la organización, porque el coordinador regional ha logrado eliminar la deuda pública y reducir notablemente la privada que heredó, por lo que ha optado por habar de la reducción en la cifra de militantes.
Ha tirado de los datos del balance que ha tenido que hacer el propio Antonio Maíllo, donde se reconocen 2.670 menos que hace cuatro años, a lo que el candidato a la reelección le ha contrapuesto que se ha pasado de 4.000 a 12.000 simpatizantes. En este sentido, ha citado “la situación económica de muchos militantes de IU” como motivo para dejar de pagar las cuotas, y por tanto han perdido esta condición. “Es más complejo que esa simplicidad de decir que se han perdido militantes por razones políticas”, le ha dicho, instándole a que se pregunte por qué, en cambio, se han triplicado los simpatizantes.
La pérdida de poder institucional de IU, que ha pasado de 12 a cinco diputados en el Parlamento de Andalucía, salvando por la mínima el derecho a grupo, ha sido otra de las cuestiones que José Luis Pérez Tapias ha puesto sobre la mesa. Una caída de votos en los sucesivos comicios que ha vinculado con decisiones como la confluencia con Podemos en el caso de las elecciones municipales.
Para Antonio Maíllo, es “reduccionista” limitar a lo institucional el resultado de un proyecto. “Queremos formar parte como IU de un bloque de cambio. Para ello queremos una adecuación de nuestra organización”, ha enfatizado. Igualmente, le ha invitado a “pasar del discurso melancólico a la esperanza” y le ha recordado que llevan “dos años diciendo que el proyecto se diluye”, con lo que cree que “no seduce” a los que se puedan incorporar.
En cambio, José Luis Pérez Tapias le ha insistido: “Cuando percibimos que IU tiene el riesgo de diluirse, estamos constatando una realidad”. En varias ocasiones, pese a reconocer que la oposición que lidera el también diputado Antonio Maíllo se ha mostrado “útil en muchas cosas” en el Parlamento de Andalucía, le ha referido “el servilismo innecesario con Podemos”. De manera que, “coincidiendo” en que ellos también quieren “contribuir a cambiar en Andalucía”, ha considerado que “el problema es cómo”.
Los modelos organizativos
Uno de los momentos clave ha estado cuando José Luis Pérez Tapias le ha preguntado por una frase que forma parte del planteamiento central de la candidatura de su rival: “¿Qué es superar IU?”, a lo que Antonio Maíllo le ha recordado que esta organización es ya un espacio de confluencia y ha decidido, en lugar de separarse, seguir juntos, pero quieren encontrarse con gente que no está bajo este paraguas. “Por eso planteamos un modelo de movimiento político y social”.
Para José Luis Pérez Tapias, eso es “dar un paso atrás” porque “se pretende deconstruir una cosa sin saber qué se quiere construir”. En esta línea, ha expuesto las cuatro condiciones de su candidatura: el mantenimiento de la militancia “con la cuota como vinculación” a la organización, frente a la propuesta de su rival de replantear esto; el principio de “un hombre o una mujer, un voto”, y por ejemplo ha cuestionado el modelo del sorteo para la asamblea que se ha puesto en marcha este año por primera vez; la continuidad “en los órganos de dirección y no sólo de coordinación”, cuando su compañero de filas apuesta por diluir más esto; y el “fortalecimiento de las áreas de movilización”, en lo que parecen coincidir.
Por su parte, Antonio Maíllo le ha recriminado estar “demasiado a la defensiva con respecto a las innovaciones” en el seno de la organización, y de nuevo ha incidido en la necesidad de no cerrarse a cambios en el proyecto sobre una candidatura creada en sintonía con históricos del partido como el excoordinador regional Diego Valderas.
Qué quieren conseguir en Andalucía
José Luis Pérez Tapias ha comenzado tirando del título del documento con el que se presenta, Una IU fuerte y autónoma para cambiar Andalucía, en contraposición a la propuesta de Antonio Maíllo: La izquierda en movimiento: ganar Andalucía. Para él, hay “una diferencia fundamental entre los dos proyectos” que se lee en los títulos. “El tuyo habla de 'ganar' y el nuestro de 'cambiar' Andalucía”. En su opinión, “no es una diferencia baladí, porque si no ganamos, ¿cuál es el plan B?
Es entonces cuando ha negado el pesimismo que le reprocha Antonio Maíllo, a quien ha replicado que él no piensa que “por verbalizar una idea se convierte en realidad”. Es más, ha dicho que cuando lee los documentos de la organización le parece que está viendo “realismo mágico”. Ha remarcado que él es “el primero que quiere salir a ganar” pero echa en falta en sus rivales un análisis de otros escenarios a los que apuntan las encuestas como que de nuevo no haya ninguna mayoría absoluta en Andalucía tras las elecciones autonómicas. Su plan B es “construir un bloque político para hacer realidad las propuestas y frenar a la derecha”.
En candidato a la reelección ha insistido en la necesidad de impulsar un movimiento político y social, cuestión que según José Luis Pérez Tapias, “sólo interesa a los militantes”, a lo que Antonio Maíllo le ha pedido “más respeto” y le ha recordado que está aprobado a nivel federal, punto de referencia siempre para el que fue el gran valedor de Alberto Garzón. Para aseverar: “Hay que tener confianza en la inteligencia colectiva. Nos toca en este momento histórico que nos cohesionemos”, y en esta “responsabilidad” ha situado su lista, donde ha incluido todas las sensibilidades de la organización.
... Y la confluencia
“En la génesis de IU siempre ha estado la convergencia. No es nada nuevo. Forma parte de nuestra cultura”, ha enfatizado Antonio Maíllo, si bien ha reconocido que quizá en el pasado se “ha teorizado” más sobre ello que “cumplido”. Su idea es una confluencia con un objetivo político: aunar fuerzas para un nuevo modelo. “No estamos para dar certidumbre a que la hegemonía la siga manteniendo el PSOE”, ha defendido. En su idea de confluencia, ha insistido en que “la coincidencia programática es clave, igual que la visibilidad de las partes para que todo el mundo esté cómodo”.
En cualquier caso, ha anunciado que convocará “una gran jornada de reflexión política a finales de año para establecer la confluencia que será con IU como tal y aportando su acumulado patrimonial y político”. Para los que creen que quiere enterrar a IU, ha contestado que no se trata de eso: “Lo hemos dicho 20.000 veces”.
José Luis Pérez Tapias ha coincidido en “la confluencia como ADN de IU” pero no cree que “éste sea el debate, sino lo concreto: cómo, con quién, cuándo y para qué”. Son preguntas que cree que hay que responder. Le ha aclarado que en “la filosofía de la confluencia” están todos “convencidos” pero “el problema es la posición de subordinación con respecto a Podemos”. Y ha aprovechado para recordar que el partido liderado por Teresa Rodríguez ha mantenido en su documento de propuestas para la confluencia que IU debe romper con el PSOE -cogobiernan en unos 80 municipios- si quieren sentarse a negociar para ir juntos a las próximas elecciones municipales.
Ha sido entonces cuando ha echado en cara a Antonio Maíllo haberlos situado en ese escenario porque el punto de partida que ve en su rival es, “como mínimo, confluencia con Podemos”, y cree que esto “hay que debatirlo primero”. Es más, ha subrayado que él ve diferencias con Podemos en lo programático. “Nosotros nos situamos nítidamente en la izquierda y yo no sé a veces dónde situar a Podemos”.
“Yo no me tiro al monte”, ha enfatizado Antonio Maíllo, quien ha reiterado que para esta estrategia parte de propuestas aprobadas. “Queremos conseguir convencer de que nuestras propuestas para Andalucía son las mejores y estoy convencido de que nos van a escuchar el resto de organizaciones”, ha subrayado. Entiende que si complejo es este proceso a nivel autonómico, más lo será en el municipal, pero tiene confianza en que “de cada debate en cada asamblea saldrá la mejor propuesta”. Va a decidir “cada territorio”.
El líder de los críticos, por su parte, ha ironizado con que “a veces la suma no multiplica, sino que divide” y le ha instado a que se comprometa a que si una asamblea quiere presentarse con las siglas de IU, lo podrá hacer. “¿Te comprometes a respetar lo que decida la asamblea de IU Córdoba o se le van a imponer candidaturas del cambio, que es como las llaman, como si nosotros no hubiéramos transformado la realidad cuando hemos gobernado?”, ha ejemplificado.
“Yo no impongo nada en mi organización. Si acaso será la reflexión colectiva la que imponga”, ha respondido Antonio Maíllo. Éste está convencido de que “la reflexión colectiva de cada asamblea sacará la conclusión más sabia”. Y le ha devuelto la pregunta.
El último minuto
Ha empezado José Luis Pérez Tapias quien ha invitado “a cada militante que lea los documentos”, puntualizando que “el oficialista deja muchas ambigüedades y aspectos sin concretar”. En la filosofía están de acuerdo, “no es el debate”, sino “la garantía de una IU fuerte y unida para contribuir a cambiar Andalucía en mejores condiciones y que pueda concluir sin diluirse”.
El actual líder de IU, por su parte, ha llamado a perder el miedo. “Siempre en la historia de la izquierda se han conseguido objetivos a través de la esperanza. El miedo no tiene cabida. [...] Nos hemos dejado la piel en este tiempo”, ha resaltado, y desde “esa confianza” quiere hacer “una IU más grande para ganar Andalucía”.