Un voto de más o un apunte de menos… y todo cambia. El 24M dejó en Carmona (Sevilla) un más que presumible vuelco en el Ayuntamiento. Las urnas dejaban la Alcaldía en manos de PSOE, IU y Participa, de un acuerdo a tres para arrebatar un nuevo mandato al PP. Pero la Junta Electoral de Zona (JEZ) ha anulado –el 28 de mayo– una mesa electoral en la que hubo 182 votos emitidos y 181 votantes. Una decisión que trastoca el contador de concejales, otorga mayoría absoluta a los populares y ha sido recurrida ante la Junta Electoral Central (JEC).
La pérdida de estas decenas de sufragios tiene una repercusión inmediata y decisiva. Deja al partido auspiciado por Podemos con menos del 5% de los votos necesario para entrar en el reparto de ediles. El único asiento alcanzado por Participa queda traspasado entonces al PP, vencedor al cabo en las urnas con diez concejales. Mientras, PSOE e IU empataron a cinco.
En el escrito de recurso elevado a la JEC por la puesta “a cero” de una de las 37 mesas constituidas en Carmona, Participa pide la anulación del acuerdo impugnado y que se validen los resultados. O, en último término, que se repita el proceso de votación en la mesa cuestionada. Porque no es lo mismo más votos que votantes que más votos que electores, señalan fuentes del caso.
Interpretación “errónea” de la ley
Participa ya había reclamado ante la propia JEZ, pero la desestimación motiva el paso ante el órgano central. La formación sostiene que la “interpretación excesivamente rigurosa que se hace del artículo 105 de la Ley Orgánica de Régimen Electoral General” es “errónea”. Una “correcta interpretación literal de este precepto”, añaden, desprende que el efecto “lesivo” de los votos emitidos está previsto por el legislador para casos en que el número de votos exceda al de electores inscritos en la mesa.
“No de los que de entre ellos ejercieron efectivamente su derecho de sufragio”, expone el recurso. El “único argumento” en el que la JEZ articula el fallo es una sentencia de 2003 del Tribunal Superior de Justicia de Valencia que indica la anulación “de oficio de cualquier mesa en la que aparezcan más votos que el número de personas que hayan ejercido derecho al voto”. Pero no es la interpretación “única posible ni la más compasiva con la mayor eficacia de los derechos fundamentales”, apuntan desde Participa.
En concreto, y según las listas del censo, la mesa anulada suma un total de 522 electores convocados. De ahí, los votos emitidos el 24M son 182 y los votantes registrados, uno menos. Para el partido afín a Podemos, la JEZ incurre en una “perversión de las normas legales” y acaba por resolver el asunto de la forma “más lesiva posible”, lesionando los derechos de sufragio de las personas inscritas “y de este partido político”.
El recurso argumenta que la Junta Electoral debería haber resuelto “tomando en consideración el principio más favorable a la conservación de los votos válidos”. El acta anulada “fue firmada” el 24M “por los miembros de la mesa y representantes de partidos, sin que ninguno haya formulado objeción alguna”, concluyen. Fuentes del caso hablan de “cacicada” que entrega el poder de Carmona “al PP”.
El alcalde saliente y candidato popular, Juan Ávila, incluso había manifestado tras la noche electoral que esperaba ver en el resto de fuerzas políticas “el respeto a la lista más votada”. El recuento de votos, en todo caso, ponía en serio peligro la posibilidad de reeditar mandato. Tras el nuevo escenario que zanja hasta el momento la decisión de la JEZ, Ávila celebra que al fin tiene “mayoría absoluta”.