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Tercera alcaldesa de Otura del PP en el mismo mandato que llega al cargo ya imputada

El PP pretende recuperar la "decencia" en Otura y apuesta por la "regeneración" tras la condena al alcalde

Miguel Gómez

Granada —

Dolores Plata es ya la tercera alcaldesa del Partido Popular que tiene el municipio de Otura –apenas 7000 habitantes en el área metropolitana de Granada– en el mismo mandato, al que todavía le queda más de un año. Y es, también, la tercera que llega al cargo imputada, tras sus antecesores Ignacio Fernández-Sanz y Pedro Cabanillas, de cuyos sendos equipos de gobierno formó parte. Ambos ex regidores, además, están hoy fuera del PP pero mantienen su actas de concejales en el Ayuntamiento oturense.

Los enredos judiciales en este pequeño municipio granadino dan para tanto que han creado su propio ‘hashtag’, el #OturaShow, con ramificaciones en la guerra interna de la dirección provincial del PP granadino y sin visos de acabar en lo que queda de mandato municipal, todavía algo más de un año hasta mayo de 2015, donde no se sabe, además, si alguno de los ex regidores concurrirá bajo nuevas siglas.

En lo que se refiere a Plata, que ejerció como edil de Obras, Medio Ambiente, Urbanizaciones, Personal y Sanidad entre los gobiernos de ambos regidores, está imputada por una denuncia que interpuso Fernández-Sanz contra Cabanillas cuando el primero ya estaba fuera del gobierno y del PP, en la cual lo acusaba de falsificar un informe para el Consejo Consultivo sobre una finca presuntamente adquirida de forma fraudulenta por el Ayuntamiento.

Precisamente por esa finca, comprada en 2008 cuando Fernández-Sanz era alcalde y Cabanillas concejal de Economía, han sido ambos condenados este mismo enero por el Juzgado de lo Penal número 1 de Granada a ocho años de inhabilitación por prevaricación. Aunque la dirección provincial del PP anunció su renuncia y su suspensión de militancia, Cabanillas intentó aguantar en el cargo, hasta que los seis ediles de su equipo dimitieron en bloque, obligándolo a abandonar el cargo.

Denunciarse y descabezarse unos a otros es una suerte de tradición entre los primeros ediles de Otura, ya que Fernández-Sanz abandonó la alcaldía en octubre de 2012 cuando seis de los entonces ocho concejales del grupo municipal del PP –Cabanillas y Plata entre ellos– lo acusaron ante la Fiscalía de intentar ‘colar’ facturas falsas por valor de 178.000 euros en Plan de Pago a Proveedores de ese año.

Sin mayoría absoluta

Esta sangría ha provocado que el PP acabe por perder la mayoría absoluta que consiguió en mayo de 2011. Entonces dobló la representación del PSOE con 8 concejales contra 4 por uno de IU. De esos 8, sólo 5 acudieron al pleno de este viernes 31, con las ausencias de los dos ex alcaldes –los dos, ahora, concejales no adscritos, dado que Fernández-Sanz abandonó el partido y Cabanillas está suspendido de militancia– y un tercer concejal, Agustín Porras. Este último fue el edil con el que negoció Cabanillas formar gobierno tras ser suspendido de militancia, aunque públicamente se ha declarado como ‘fiel’ al ‘ex popular’ Fernández-Sanz.

La relevancia del municipio en la política granadina se basa en, de nuevo, la de Ignacio Fernández-Sanz, que hasta que se convirtió en candidato municipal, en 2007, había ejercido durante 15 años como gerente del PP de Granada, a las órdenes a nivel orgánico del mismísimo Luis Bárcenas. Además, el ya ex alcalde, hoy en las filas del Partido Populares en Libertad (PPL) –escisión del PP fundada por el ex alcalde de Melilla, Ignacio Velázquez–, es el marido de la todavía parlamentaria andaluza del PP por Granada, Eva Martín.

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