Besos frente a discriminación y violencia. Más de 200 personas se han dado cita frente el Ayuntamiento de Castilleja de la Cuesta (Sevilla) para protestar contra las actitudes homófobas. La concentración y 'besada' es la respuesta a la agresión “fascista” que el pasado 28 de octubre sufrió un joven de la localidad.
“No vamos a dejar ninguna agresión sin respuesta”, anuncian las organizaciones convocantes en un intento de frenar “las múltiples agresiones que vienen sufriendo lesbianas, gays, transexuales y bisexuales (LGTB)” y que, según estas fuentes, habrían apreciado un “incremento” en los últimos meses. Por este motivo piden que la sociedad actúe “con las mejores herramientas, la visibilidad y la educación”, y que las fuerzas policiales “actúen hasta el final” en casos como el ocurrido en Castilleja.
En este sentido, el plenario del municipio ha aprobado una moción “de apoyo a la manifestación y de condena a la agresión homófoba”, una iniciativa apoyada “por todos los grupos políticos”, indica el alcalde de Castilleja, Manuel Benítez. Asociaciones LGTB pretenden ampliar este tipo de mociones a otros ayuntamientos para lograr una especie de declaración de 'municipios libres de LGTBfobia'.
Escupitajos y puñetazos por “maricón”
Raúl (nombre ficticio) es vecino de Castilleja, un pueblo del Aljarafe sevillano. Aquel día, martes 28 de octubre a las 14:30 horas, caminaba en dirección a su casa cuando escuchó cómo tres personas llamaban su atención. “Ahí va el maricón del cinco de oro”, decían. Se acercaron más y Raúl preguntó si había algún problema. “Nos reímos de ti, tú te vas y punto, maricón”, fue la respuesta. Luego llegaron los escupitajos, puñetazos… Raúl salió corriendo. Encontró refugio en su propia casa y, con sus padres, acudió a los servicios de urgencias sanitarias y al puesto de la Guardia Civil de Gines a interponer denuncia por los hechos.
Raúl viene sufriendo agresiones desde su infancia. Aunque más en los últimos años, refiere. Ahora está en tratamiento médico por ansiedad. “Queremos las calles libres de homofobia y de fascismo”, resume Alejandro García, de Unidad contra el Fascismo y el Racismo (UCFR). “Hay que hacer ver a esta gente que no nos vamos a quedar quietos, que vamos a reaccionar con movilizaciones y que no vamos a dejar ninguna agresión sin respuesta”, señala el activista.
De ahí la 'besada', “una reivindicación activista en contra de cualquier acto homofóbico y a favor de cualquier persona que se pueda sentir agredida por su condición sexual o étnica”, resume la miembro de la asociación aljarafeña Acción Diversa, Marisa Tejado. La homofobia, y “estas agresiones”, señalan en el comunicado difundido, están “dirigidas, apoyadas, realizadas y auspiciadas por grupos de extrema derecha”.
Para combatir la “intransigencia”, es necesaria la implicación “de todas aquellas personas que defendemos los derechos humanos y la igualdad”. La “lucha del movimiento LGTB, y de la sociedad en general, ha conseguido un alto grado de igualdad legal” que queda lejos aún, entienden, “de la igualdad real”. La concentración en solidaridad con Raúl fue convocada bajo la leyenda Paremos la homofobia. ¡Fuera los fascistas de nuestras calles!