- La empresa considera que si el Ministerio le avala para tapar los fosfoyesos no tiene por qué seguir en una Mesa de negociación sobre el tema
Aunque parezca una paradoja, la Mesa de la Participación de los Fosfoyesos de Huelva, creada para gestionar lo mejor posible la retirada de las 1.200 hectáras de residuos químicos que se acumulan en las marismas onubenses, se ha quedado sin la empresa que ha provocado la mayoría de esos vertidos.
Sin anuncio previo, antes de que se convoque una nueva reunión, el director de la compañía en Huelva, Roberto Ibáñez, ha asegurado que “no tiene sentido” que la empresa continúe en el citado foro, por lo que ha pedido al Ayuntamiento que se ahorre la invitación si es que la tiene prevista.
Ibáñez cree que no hay necesidad de su presencia en este foro, que impulsa el propio Ayuntamiento de Huelva. Y más después de que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), tras atender el requerimiento realizado por la Audiencia Nacional (AN), declarase “idóneo” el proyecto presentado por Fertiberia para la clausura de las balsas de fosfoyesos. Es decir, entiende que si ya tiene el visto bueno para enterrar las balsas de fosyoyesos, no tiene por qué dialogar sobre la forma de hacerlo.
Eso sí, asegura que la empresa no descarta colaborar con las administraciones, pero ya ha excusado su ausencia ante el alcalde en el caso de que se convoque una nueva reunión de la mencionada mesa, porque Fertiberia “no pinta nada” en dicha mesa.
“El Ayuntamiento es legítimo”
La empresa pone por delante que el Ayuntamiento de Huelva tiene “toda la legitimidad” para hacer todas las aportaciones que considere, pero vuelve aferrarse a que en esa Mesa están representados órganos como Ministerio de Medio Ambiente, el Instituto Geológico Minero (IGME) y la Empresa para la Gestión de Residuos Industriales (Emgrisa) que han bendecido el proyecto para tapar los fosfoyesos, no retirarlos.
No obstante, subraya que Fertiberia está realizando los trabajos de ingeniería correspondientes al objeto de recoger “las correcciones y mejoras establecidas”. La idea es que a finales de junio se tenga el proyecto completado con todas las modificaciones que ha recomendado el Emgrisa, el IGME y el propio Ministerio.
“Le pedimos que participe”
A pesar de que Fertiberia ha considerado unilateralmente que no tiene que participar en la Mesa, el portavoz del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Huelva, Manuel Gómez, le ha pedido que “colabore y participe en el proyecto que salga de la comisión de expertos” para la restauración más allá del de la compañía.
Gómez apunta que “también le pedimos que siga prestando colaboración para facilitar al comité de expertos y a la Mesa de Participación acceso a los trabajos y a la información”.
Sobre la salida de Fertiberia, ha indicado que “no nos ha sorprendido esta decisión porque tampoco es que mostraran un excesivo interés; ellos estaban en la defensa de su proyecto en el proceso abierto en la Audiencia Nacional”.
Por su parte, el secretario general del PSOE de Huelva y presidente de la Diputación, Ignacio Caraballo, ha dicho que la situación que se vive en relación con los fosfoyesos es “atípica”, pues la empresa cuenta con una sentencia condenatoria, sigue adelante un expediente y se crea una comisión, refiriéndose a la Mesa de Participación, en la que considera que la empresa “tiene que estar y escuchar”.
“Si yo hubiese sido Fertiberia, habría mantenido mi presencia y seguiría avanzando de la mano de todo el mundo” porque se trata, ha añadido, de un proyecto “no sólo de Huelva, sino de la provincia”, sostiene Ignacio Caraballo.
El presidente del Partido Popular de Huelva, Manuel Andrés González, ha señalado que le parece “muy mal” que la empresa haya decidido marcharse de la Mesa, si bien en ella hay otras administraciones que “tienen un papel fundamental” como la Junta de Andalucía, por lo que entiende que su presencia no es indispensable.
Por último, el portavoz del grupo de IU en el Ayuntamiento, Pedro Jiménez, ha indicado que la compañía pone de manifiesto que “antepone únicamente sus intereses al interés general de la ciudad de Huelva”, y asegura que “ha demostrado que le importa muy poco el futuro de esta ciudad y que mientras a escasos 500 metros de la misma ha estado tirando los residuos que generaba para ahorrarse grandes cantidades de dinero y tener así mayores beneficios, ahora se niega a aceptar las soluciones del órgano de participación que permitan recuperar la marisma para las futuras generaciones de onubenses”.