Las mayores expectativas del sector de las energías renovables en Andalucía pasan en estos momentos por la confianza en que el Gobierno de España modifique la Planificación de la Red de Transporte del Sistema Eléctrico 2015-2020 y saque del olvido la parte oriental de Andalucía, donde proyectos que suman más de 1.000 megavatios se topan con la falta de capacidad de evacuación para los mismos.
Como le ocurre en otras infraestructuras, como el transporte, este territorio es una mancha blanca en el mapa de redes del país, lo que se contradice con sus condiciones excelentes para eólica y solar. Existe un compromiso verbal del ministro de Energía, Álvaro Nadal, con el consejero de Empleo, Empresa y Comercio, Javier Carnero, de reconsiderar dicha planificación e incluir el eje Caparacena-Baza-La Ribina, que estuvo previsto en su día pero se eliminó por pura decisión política.
El sector aprieta: debe ser este año o peligran más de 1.000 millones de euros de inversión y los 15.000 puestos de trabajo asociados de medio centenar de proyectos entre Almería, Granada y Jaén. El secretario general del Clúster Andaluz de Energías Renovables y Eficiencia Energética (Claner), que agrupa a un 90% del sector en la comunidad autónoma, confía en que sea incluido en alguna de las próximas reuniones del Consejo de Ministros. “Hay proyectos, sobre todo de eólica y fotovoltaica que se tramitaron confiando en que esta infraestructura estaría hecha, por lo que es determinante considerarla”, explica Carlos Rojo.
Es, en definitiva, un nuevo tapón para la energía renovable en Andalucía, que ya se llevó el duro golpe que ha supuesto la regresiva legislación del Gobierno del PP en la materia. En este caso, cabe recordar que esta planificación recoge las infraestructuras de transporte eléctrico de tensión mayor o igual a 220 kilovoltios (KV), que se construirán en los próximos años para garantizar el suministro y permitir la construcción y conexión de plantas de energía renovable. Prevé una inversión de 336 millones de euros en Andalucía en el periodo, pero como insisten desde la Junta de Andalucía y desde el sector “es claramente insuficiente”, especialmente hasta que se confirme esa autopista eléctrica de 400 KV.
Más en una comunidad autónoma que, aprovechado sus buenas condiciones para las energías renovables, pretende que en tres años supongan el 25% del consumo -en estos momento se sitúa en un 19,5%- según se recoge en la Estrategia Energética de Andalucía 2020.
El propio Ministerio de Energía reconoce en la citada planificación “los desequilibrios” y la necesidad de identificar como áreas “preferentes” Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana (provincias de Alicante y Valencia), Cataluña (Gerona y Barcelona), Andalucía (Granada, Almería y Málaga) y Cantabria“.
Miguel González, delegado de REE en Andalucía, se comprometió el pasado mes de marzo, en un encuentro con la prensa, a impulsar, en el marco de la revisión cada dos años de esta planificación, valorar que se pudiera incluir esta infraestructura. Sin embargo, como recuerda Carlos Rojo, la normativa cambió y ya no hay que esperar a la revisión cada dos años, sino que se puede acometer en cualquier momento “y en este caso urge”. Por eso demanda a la Junta de Andalucía que extreme sus esfuerzos ante el Ministerio de Energía.
Y es que se trata de otro ejemplo de cómo el desarrollo de las energías renovables y dónde depende en última instancia del gobierno de turno. De hecho, Andalucía dispone del mayor potencial solar de España; destacando también en el eólico, sobre todo, en la mitad sur y oriental; y en biomasa, por la gran cantidad de residuos agrícolas que se generan. Sin embargo, todavía está lejos de ostentar el liderazgo, salvo en la termosolar.
En este sentido, según el primer informe publicado por REE con el título Las energías renovables en el sistema eléctrico español, por comunidades autónomas, la mayor parte de la potencia instalada se encuentra en Castilla y León, Galicia, Andalucía y Castilla la Mancha. En conjunto, concentran el 62% del total nacional. Pero destaca Castilla y León, con el 22% del total. Es la autonomía con más potencia eólica (casi el 25%) e hidráulica (cerca del 26%) instalada. Castilla la Mancha, por su parte, es la región con más solar fotovoltaica (casi el 20%), y Andalucía lidera la termosolar (con más del 43%). En concreto, habla de 6.051 MW de potencia instalada en Andalucía, sólo superada por Galicia y, sobre todo, Castilla y León.
Por su parte, el director general de Endesa para Andalucía y Extremadura, Francisco Arteaga, apunta: “Ese potencial que nos caracteriza, por tener el mayor de número de horas solares de Europa, necesita estar respaldado por una red de transporte de energía más amplia que pueda responder a la demanda. La falta de infraestructuras donde verter la producción está frenando el desarrollo de energías renovables en Andalucía, por lo que habría que ampliar la red en muchas zonas donde todavía se encuentra infradimensionada. Todo esto permitiría que Andalucía deje de estar a la cola de España en lo que a energías renovables se refiere, y pase a estar a la cabeza”.
En la misma línea, incide en que la apuesta de Endesa por el desarrollo de las energías renovables “es firme, no sólo porque estamos caminando hacia una transición energética, sino también porque quiere seguir siendo líder dentro del sector en lo que a descarbonización del sistema energético se refiere”. De todas maneras matiza: “Todo esto hay que hacerlo con los pies en la tierra, es decir, garantizando siempre el suministro de forma eficiente. Para ello, las energías renovables juegan un papel primordial. Desde Endesa consideramos esencial que se incorporen de forma natural en el mix energético, y de este modo lograr el objetivo de tener un sistema de producción 100% renovable en 2050. Y para esto Andalucía tiene un rol fundamental, debido a su climatología”.