Espadas elimina la vicesecretaría general y releva al secretario de Organización del PSOE-A por el jiennense Jacinto Viedma

Daniel Cela

24 de enero de 2024 10:00 h

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Camino del ecuador de la legislatura, el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, quiere dar una sacudida a la estructura original de su ejecutiva -con 60 miembros- que salió del congreso regional hace cuatro años y que ha demostrado ciertos “errores disfuncionales” en la práctica.

El líder socialista propondrá al comité director del viernes -máximo órgano de decisión entre congresos- la salida de Ángeles Férriz y de Noel López como números dos y tres del partido, confirman fuentes próximas al secretario general. Espadas quiere eliminar el cargo de vicesecretaría general, que actualmente ocupa la diputada jiennense, y relevar al granadino para poner en su lugar a un veterano del PSOE de Jaén, Jacinto Viedma, mano derecha del presidente de la Diputación y secretario general de los socialistas jiennenses, Francisco Reyes.

Viedma, ex concejal, ex alcalde, parlamentario desde 2015 y secretario de Organización en Jaén desde 2012 será el nuevo encargado de mejorar la coordinación entre la dirección del partido y del grupo parlamentario, y tensionar los ocho territorios -desde el ámbito municipal al autonómico- con la mirada puesta ya en las elecciones de 2026.

Su elección implica dos cosas: primero, “meter en la cocina de la ejecutiva andaluza al PSOE de Jaén, su maquinaria de movilizar, tensionar y ganar en las urnas durante 40 años”. Y segundo, optar por un perfil de aparato y liderazgo orgánico como lo fue en su día Luis Pizarro para Manuel Chaves o Juan Cornejo para José Antonio Griñán.

Es el cambio de más alto nivel en la cúpula del PSOE andaluz, dentro de una remodelación que su líder viene anunciando desde hace meses. “La vicesecretaría general desaparece para ser sustituida por varias secretarías de menor rango, que tendrán una estructura diferente”, explican desde el partido.

Espadas quiere dedicación “exclusiva” de su equipo orgánico y de su grupo parlamentario. López, que fue designado hombre fuerte de la federación andaluza hace cuatro años, da un paso atrás y se centrará en su labor como diputado y miembro de la Mesa del Parlamento.

El nombramiento de Viedma, adelantado por la Cadena Ser Andalucía, refuerza el peso político del PSOE de Jaén en la ejecutiva andaluza, aunque su ascenso va en detrimento de la salida de Férriz, que seguirá siendo portavoz del grupo en el Parlamento y, además, coordinará el llamado “gobierno en la sombra” que ha diseñado Espadas para fiscalizar mejor al Ejecutivo de Juan Manuel Moreno.

El puesto de vicesecretaría general se creó para reforzar la posición de un PSOE en la oposición, tras 37 años en el Gobierno. Era un cargo más político, del que se desgajaron las tareas organizativas que recaían en el área de López. Pero en la práctica, ninguno de los dos ha funcionado como Espadas esperaba. El líder socialista ha optado por fulminar las “duplicidades” y “diferenciar entre las tareas que son propias del partido y de la función de coordinación entre las direcciones provinciales, y aquellas otras más propositivas que corresponderán al 'gobierno alternativo' que presentará en los próximos días”, explican en el partido.

Noel López, a quien también ha pasado factura el caso del secuestro de la concejal socialista de su pueblo, Maracena, finalmente archivado por el juez, abandona la cúpula del partido y seguirá como diputado y miembro de la Mesa de la Cámara. Tanto el granadino como Férriz permanecerán en la ejecutiva regional, confirman fuentes socialistas.

Hombre de “aparato y oficio”

Jacinto Viedma es natural de Albanchez de Mágina (Jaén), maestro de Primaria y Educación de adultos de profesión. Fue concejal de su pueblo desde 2007 a 2012, cuando es nombrado alcalde. Es parlamentario andaluz desde 2015 y conoce los resortes del partido mejor que su antecesor, advierten fuentes socialistas, que reprochan a López no haber desempeñado las funciones propias de un secretario de Organización como lo hicieron sus predecesores, en tareas que ahora necesita más el partido desde que está en la oposición: coordinación entre la dirección orgánica, el grupo parlamentario y las ocho provincias.

Espadas también ha pedido a la diputada de Huelva María Márquez que salga de la ejecutiva federal del PSOE para ocupar un puesto de más relevancia en la dirección andaluza, que aún no ha concretado. El líder socialista le pide “exclusividad”, aunque Márquez seguirá desempeñando otras funciones dentro del grupo parlamentario.

Las remodelaciones en el partido que ha diseñado Espadas buscan movilizar al partido y mejorar la coordinación de los territorios con la dirección que pilota la oposición al Gobierno de Juan Manuel Moreno en el Parlamento. El líder socialista quiere presentar este jueves lo que él llama “gobierno alternativo o gobierno en la sombra”, una serie de dirigentes -la mayoría portavoces parlamentarios en las comisiones legislativas- que tutelarán las políticas sectoriales de Moreno, estrecharán relaciones con los agentes sociales de sus áreas y propondrán una agenda de gobierno alternativa.

Pero la necesidad de reforzar la dirección orgánica también tiene que ver con las multifunciones que representa el propio Espadas desde que fue designado portavoz del PSOE en el Senado, cámara de especial relevancia en esta legislatura dada la mayoría absoluta del PP. El líder socialista también ha entrado en la ejecutiva federal, por su posición en la Cámara Alta, y debe compaginar su trabajo en Madrid con el peso de la oposición al Gobierno con mayoría absoluta de Moreno.