Andalucía avanza desacompasada hacia la nueva normalidad: Málaga y Granada tendrán que esperar para pasar a la fase 2

Las provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Jaén, Huelva y Sevilla entrarán en la fase 2 este próximo lunes 25 de mayo, un nuevo peldaño en el proceso de desescalada que contempla la posibilidad de pasear a cualquier hora del día salvo las reservadas a los mayores, reuniones de hasta 15 personas y el consumo en el interior de los bares y restaurantes, siempre en mesa.

Pese al intento de la Junta de Andalucía por que fueran las ocho provincias las que pasaran juntas al siguiente nivel, Málaga y Granada se han vuelto a quedar fuera del pase de fase y la comunidad autónoma avanzará desacompasada hacia la llamada nueva normalidad. Así lo ha decidido el Ministerio de Sanidad tras un análisis “profundo y riguroso” de los técnicos del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, según ha infomado en rueda de prensa el ministro de Sanidad, Salvador Illa.

La Junta había remitido esta semana al Ministerio toda la documentación para solicitar el pase conjunto de las ocho provincias andaluzas desde el lunes basándose en criterios objetivos y “no políticos”, según incidió en rueda de prensa el vicepresidente andaluz, Juan Marín. “Esperamos y confiamos en que no haya que esperar nuevamente una semana”, pdiió Marín después de que el pase de la fase 0 a la fase I en las provincias de Málaga y Granada se produjera una semana después respecto a las otras seis provincias andaluzas.

Índice de incidencia

Andalucía había argumentado que las ocho provincias cumplían con los criterios exigidos por el Gobierno, con una capacidad asistencial adecuada por si hubiese un rebrote, así como un índice acumulado de incidencia por debajo de 10 en tasa de 100.000 habitantes en los últimos 14 días. A fecha del 20 de mayo, este índice se situaba, según la Consejería de Salud, en 4,26 en la provincia de Granada y en 2,65 en la de Málaga, mientras que el global de Andalucía se situaba en 2,71. Respecto a la capacidad para el seguimiento de casos sospechosos, la Junta tiene previsto que dicha labor se realizará a través de más de 8.100 enfermeras de Atención Primaria del Servicio Andaluz de Salud (SAS) que trabajarán de forma conjunta con los más de 450 profesionales del Servicio de Vigilancia Epidemiológica de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica.

El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, pidió el pasado domingo a Pedro Sánchez corregir el retraso en la desescalada de Granada y Málaga para que pasen a fase 2 con el resto de Andalucía, aspirando a que todas las provincias avanzaran acompasadas en el desconfinamiento. Sanidad ya había advertido que no haría una excepción con Granada y Málaga porque las fases se habían establecido en 15 días, periodo de incubación del virus.

La Junta había solicitado al Gobierno que detallara qué documento existe en el que se explique que una provincia no puede pasar de una fase a otra en una sola semana cuando, según ha advertido este mismo viernes Juan Marín, “ya hay comunidades que sí gozan de ese privilegio”. “No hay ninguna orden ni nada publicado en el Boletín Oficial” que establezca“, argumentó antes de conocer la decisión del Ministerio de este viernes.