El nuevo consejero de Sostenibilidad, Ramón Fernández-Pacheco tiene ante sí la tarea de coser la herida abierta entre la Junta de Andalucía y los bomberos forestales de la comunidad, representados por el Plan Infoca de la Agencia de Medio Ambiente y Aguas (Amaya). Después de meses de desencuentros entre ambas partes, estos profesionales mantienen unas reivindicaciones que se basan, sobre todo, en dotar de personal al cuerpo durante todo el año y en que se reconozca su antigüedad como trabajadores. Cuestiones que deben plasmarse en el próximo presupuesto regional, según exigen. Al respecto, la nueva Consejería se abre a analizar estas y otras propuestas, sacando pecho de la inversión realizada hasta ahora por Agricultura.
Hasta ahora, el Infoca pertenecía a la Consejería de Agricultura de Carmen Crespo, lo que ha generado fuertes tensiones entre los bomberos y la Junta de Andalucía. Los primeros se han sentido habitualmente ninguneados por el Ejecutivo regional en la mayoría de sus peticiones, especialmente en las que se refieren a dotar de más trabajadores a los retenes que luchan contra los incendios, pero también a los que han de hacer labores de prevención durante el resto del año. Como el actual convenio colectivo no está en vigor desde 2021 y se está negociando uno nuevo, desde la mesa sectorial, representada mayoritariamente por CGT, entienden que es el momento de abordar todas las problemáticas.
Presente en los presupuestos
Para ello, y tras la última reunión del Comité Intercentros de finales de julio, el sector reclama al nuevo consejero que en los presupuestos para el próximo año se contemplen las partidas que permitan dotar de personal al Infoca durante todo el año y para que puedan cobrar el concepto de antigüedad que está congelado desde hace más de una década. Esas son las dos principales reclamaciones, pero no son las únicas porque los incendios de este verano han sacado a la luz las denuncias de los bomberos y sindicatos que afirman no contar con los materiales humanos ni técnicos óptimos para atender emergencias. Llegan incluso a denunciar la falta de equipos de protección individual (EPIs) y que algunos de los que hay no están adaptados a la normativa vigente por estar viejos y ser peligrosos para la integridad física de los profesionales.
Si bien el Infoca cuenta con 3.500 trabajadores (la agencia Amaya supera los 5.000), no son suficientes ni para conformar los retenes de grandes incendios ni para hacer las labores de prevención que son necesarias en las épocas que no son las de alto riesgo de incendios. Desde que la reforma laboral impide hacer contratos temporales, la Junta de Andalucía ha optado por convertir a los trabajadores de temporada en fijos discontinuos, lo que no soluciona el problema de la falta de efectivos fuera del periodo más peligroso en cuanto a fuegos que se extiende entre junio y octubre. Desde noviembre a mayo, no hay bomberos ni personal suficiente para preparar el campo y los bosques ante posibles catástrofes como las ocurridas en Sierra Bermeja (Málaga) en los dos últimos años.
Movilizados
Por eso, desde el sector se han movilizado en varias ocasiones en los últimos meses con diferentes actos dependiendo del sindicato, con el fin de presionar a la Consejería de Agricultura encargada de velar por el Infoca. Ahora, con el cambio de cartera a Sostenibilidad, se dan un margen para que Ramón Fernández-Pacheco tome en cuenta sus reclamaciones y cierre la brecha que hay entre la Junta de Andalucía y estos profesionales especializados en la lucha contra los incendios forestales. No obstante, avisan de que se movilizarán si los presupuestos autonómicos no incluyen las partidas para fijar personal todo el año ni para pagar la antigüedad de los trabajadores.
Recuerdan que es un compromiso adquirido por el actual gobierno andaluz cuando estaba en la oposición, pero que no se ha llevado a cabo aún. Si bien la Consejería saliente decía estar invirtiendo lo posible para mejorar la situación y se excusaban en que en tres años no podían haber revertido lo que había hecho el PSOE en los mandatos previos, este argumentario no convencía al sector y tampoco lo va a hacer si es el que opta por elegir la Consejería de Sostenibilidad.
Trabajadores “al límite”
No lo van a pasar por alto porque los incendios que se han producido en Andalucía en los últimos tiempos han llevado al límite a los trabajadores, según denuncian ellos mismos. Por retenes incompletos y personal poco formado al integrarse apenas días antes de que se produjesen los fuegos, la situación del Infoca no es idílica. De hecho, el año pasado hubo que lamentar el fallecimiento de uno de estos profesionales que se encontraba contratado por temporada en el devastador fuego de Sierra Bermeja, una práctica con la que quieren acabar los bomberos para apostar por la estabilización. Además, los incendios, sobre todo los de Málaga, han puesto en el centro del problema que Andalucía, debido a la sequía, se expone cada vez más a emergencias de mayor naturaleza y peor pronóstico.
Desde la nueva cartera, fuentes oficiales aseguran que analizarán “todas las propuestas, incluidas, por supuesto, las del Infoca, que se irán desarrollando a lo largo de la nueva legislatura que arrancó hace apenas unas semanas”. No obstante, optan también por señalar lo que ya se ha hecho en materia presupuestaria: “Se ha incrementado el Presupuesto del Plan de Emergencia por Incendios Forestales de Andalucía Plan Infoca en un 4,5% (aumento de 7,7 millones de euros), con subidas en los 3 presupuestos del Plan Infoca (2019, 2020 y 2021) y mantenimiento en el Presupuesto prorrogado del 2022”.
“Se está reforzando el Infoca mediante una Oferta de Empleo Público Ordinaria de 528 plazas, y otra extraordinaria de 710 plazas, para la estabilización del Dispositivo (en total: 1.238 plazas). Se ha llegado al máximo permitido por Ley en las tasas de reposición de personal en el Infoca”, dicen en Sostenibilidad sobre la plantilla. Al tiempo que aseguran que “se ha realizado una modernización de medios materiales sin precedentes”, llegando incluso a dotar de geolocalizadores a los efectivos del Infoca “para garantizar su integridad física” durante los incendios.