El municipio de Genalguacil, en el Valle del Genal, tiene 424 habitantes y un evento artístico singular que ha hecho llorar a su alcalde. Por las catorce ediciones de los Encuentros del Arte han pasado artistas nacionales e internacionales que uno no pensaría encontrar en este pueblo, y que luego dejan en sus calles las obras creadas para la ocasión. A Genalguacil se le conoce como el pueblo museo. Por eso a Miguel Ángel Herrera se le quebró la voz la semana pasada. Dijo, en el Pleno de la Diputación de Málaga, que Genalguacil tendrá difícil sobrevivir si no se celebran los Encuentros del Arte.
Su discurso no ablandó el voto de los diputados del PP, que tumbaron la moción para renovar la subvención al certamen, que se celebra cada dos años desde 1994. Votaron a favor de mantener la subvención PSOE, Málaga Ahora y Málaga para la Gente-IU, y se abstuvo Ciudadanos. El equipo de gobierno en la Diputación, en manos del PP, aduce que existen múltiples faltas e irregularidades administrativas en la justificación de la anterior edición.
El alcalde no niega los desajustes, pero cree que se podrían haber subsanado si hubiese habido “predisposición”. “Es una excusa barata. Una excusa política”, protesta Miguel Ángel Herrera (PSOE), que reta a los críticos: “Si alguien insinúa que hemos hecho algo ilegal, tendrá que decirlo delante de un juez”. Para él, la retirada de la subvención es juego sucio político del PP.
Los Encuentros del Arte han contado desde su primera edición con una ayuda directa de la Diputación de Málaga, que había aumentado la partida hasta los 80.000 euros en las últimas ediciones, cuando el certamen ha dado un notable salto de calidad. Sin embargo, la cantidad correspondiente a la edición de 2016 aún no se ha ingresado por las deficiencias en la justificación, y eso ha motivado también la denegación de la que correspondería a esta edición.
“En todos los expedientes hay que hacer alguna subsanación, pero eso no quiere decir que se les corte el grifo”, argumenta el alcalde. Según su relato, el ayuntamiento rehízo varias veces la memoria a petición de la Diputación, y al final se agotó el plazo sin subsanar las deficiencias.
Herrera asegura que el ente provincial le pidió que eliminara facturas porque eran muchas y muy pequeñas. “Cada artista pide el material que pide: 20 euros de pinceles o 50 en pintura, y lo compra en cinco suministros diferentes. Son gastos que están dentro del proyecto, pero parece que no quieran trabajar”. “También decían que habíamos comprado televisiones con ese dinero. No, se compraron dos monitores para dos obras, una de Isidro López Aparicio y otra de Jesús Madriñán, que habían especificado que era parte de su proyecto”, añade.
Elías Bendodo, presidente del ente provincial, aseguró que apoyará el evento a través del plan de concertación, una aportación de Diputación a los pequeños municipios establecida por ley, y que en el caso de Genalguacil asciende a unos 40.000 euros, lo que no cubre ni de lejos las necesidades del evento, según el alcalde.
El pueblo-museo de una comarca sin gente
El pueblo-museo de una comarca sin genteDurante quince días, que este año van del 1 al 15 de agosto, los artistas conviven con los lugareños y aprovechan para crear sus obras, que luego ceden al municipio. De las más de 150 muchas siguen en sus calles, y otras se exponen en un museo de arte contemporáneo.
Han pasado por este evento unos 180 artistas, entre otros creadores como Eugenio Merino o Juan Francisco Casas. Por eso, el Instituto de Arte Contemporáneo emitió esta semana un comunicado de apoyo: “Es imprescindible reclamar a la Diputación de Málaga que se mantenga el apoyo institucional a esta actividad tan beneficiosa para la creación artística contemporánea y la cultura, no sólo en Andalucía, sino también en todo el territorio nacional”.
El problema de fondo es que los Encuentros del Arte siguen dependiendo en buena medida de una subvención. El alcalde e IU y PSOE en Diputación han reclamado que se incorporen a los presupuestos del ente provincial, como ocurre, por ejemplo, con las actividades de La Térmica. Pero de momento, ni la Junta de Andalucía ni la Diputación de Málaga incluyen en sus presupuestos una partida para este evento, uno de los pocos que da difusión a la comarca, hasta el punto de que en 2014 protagonizó reportajes en The New York Times o CNN.
“¿Por qué tenemos que mendigar?”, cuestiona Herrera. “Es un proyecto sólido, con visibilidad internacional. Hay proyectos con una millonada de presupuesto propio, y a Genalguacil no se le da ni una pequeña limosna”. La incertidumbre ha llevado al ayuntamiento de Genalguacil a apostar por fórmulas alternativas. Ha abierto una cuenta de micromecenazgo en Goteo.org, con la que pretende obtener un mínimo de 30.727 euros, de los que el viernes había logrado 2.450. También ha constituido una Fundación con la que recaudar fondos públicos y privados.
El alcalde ha vinculado la supervivencia de los Encuentros del Arte a la suerte futura de su pueblo. La comarca sufre desde hace décadas un proceso de despoblación severa que se ha acelerado en los últimos años. El Valle del Genal ha perdido el 12% de su población en los últimos 15 años, según los datos del INE. Ocho de los diez municipios menos poblados de la provincia están en esta comarca.
En esta tesitura, los ayuntamientos buscan fórmulas para atraer jóvenes y mantener la actividad. Cartajima ofreció trabajo y un cheque bebé a las familias con niños que se empadronasen en el municipio; al ayuntamiento de Júzcar se le ocurrió pintar las casas de azul para convertirse en pueblo pitufo; el de Genalguacil apostó por los Encuentros del Arte. “Es una fórmula para vivir y fijar a los jóvenes aquí. No podemos permitir que esto desaparezca, porque es el futuro de Genalguacil”, dice el alcalde.