El Gobierno andaluz deja sin extraescolares a más de 72.000 alumnos andaluces por “falta de planificación”

Como cada año desde hace 21, con el inicio de octubre estaba previsto que arrancaran también las actividades extraescolares en los colegios de Andalucía, a las que están matriculados más de 72.000 alumnos en 1.667 centros de toda Andalucía, según la Asociación Andaluza de Empresas Educativas, Culturales y de Ocio (AAEECO). La Consejería de Desarrollo Educativo eleva la cifra a 90.800 estudiantes que se acogerán a este servicio a lo largo del curso, según consta en la nota de prensa de inicio de curso escolar difundida el 8 de septiembre.

Sin embargo, no ha sido así. Las familias no podrán contar con este servicio de conciliación laboral hasta, al menos, final de octubre. El departamento que dirige la consejera Patricia del Pozo admite que existe un problema para formalizar los contratos con las empresas que realizan estas actividades en los colegios andaluces. Los centros fueron advertidos por la Administración educativa esta misma semana y dieron aviso a las asociaciones de padres y madres de sus alumnos para que tuvieran en cuenta la situación.

“La falta de planificación” que recrimina AAEECO a la Junta de Andalucía ha provocado que a día de hoy “no se puede garantizar” un servicio que fue concebido en pro de la conciliación familiar, como recuerda la gerente de la citada asociación, Beatriz Talaverón, en conversación con este periódico. La Consejería de Educación ha respondido asegurando que pondrá “todos los recursos disponibles” para reactivar las actividades extraescolares “a lo largo del mes de octubre”, aunque no ha sido capaz de dar un fecha definitiva a los colegios, trabajadores y familias afectadas.

Tal y como explica Talaverón, el problema radica en un retraso por parte de la Junta en la adjudicación y formalización de los 2.000 contratos que se necesitan para comenzar con las extraescolares el próximo lunes 2, fecha de inicio por ser el primer día lectivo del mes de octubre como viene siendo habitual. Dado que “las familias no entienden de contratos sino de horarios”, el resultado a efectos prácticos es que se vulnera su derecho a la conciliación, según asevera esta organización, apelando al Decreto de apoyo a las familias andaluzas aprobado por la Junta en abril de 2002, en el que se recoge este servicio complementario como un pilar para poder conciliar vida laboral y familiar fuera del horario lectivo.

Pero más allá de “la mala gestión” que reprocha AAEECO por no haber llegado a tiempo, Beatriz Talaverón critica “la falta de información y de empatía” para con los centros educativos y las familias, que son, insisten, las grandes afectadas. De hecho, no fue hasta la noche de este jueves 28 de septiembre — a tan solo unos días de la fecha de inicio prevista – cuando la Consejería competente notificó a la comunidad educativa un breve escrito en el que manifestaba estar trabajando para que las actividades extraescolares estén “en funcionamiento a lo largo del mes de octubre”.

“Caos” en la conciliación laboral y familiar

“El mes tiene 31 días”, apostilla a ese respecto la representante de las 104 entidades homologadas para prestar este servicio en Andalucía, con la intención de remarcar “el caos” que genera esta situación en el seno familiar “porque tienen que organizar su día a día sin tener garantías de cuándo van a empezar las extraescolares”.

A ojos de la confederación andaluza de asociaciones de madres y padres del alumnado por la educación pública (CODAPA), la paralización de este servicio era algo que “se veía venir”, a tenor del “caótico inicio de curso” que está atravesando la comunidad educativa andaluza. “Se está tomando por costumbre que las cosas lleguen tarde”, comentan en ese sentido fuentes de CODAPA preocupadas por que todo ello derive en un “deterioro de la calidad de la educación pública”.

Junto al beneficio de la conciliación, la confederación de madres y padres pone en valor que las extraescolares fomenten el desarrollo educativo y socioemocional del alumnado, a través de actividades deportivas, artísticas, de apoyo de lectura o de iniciación a la robótica que utilizan herramientas de educación distintas a las regladas, como explica Talaverón.

Impacto económico

Además del inconveniente que entraña para madres y padres, desde AAEECO señalan también el “daño y perjuicio” económico que acarrea esta demora en la contratación para el propio el sector. Se refieren al riesgo de que mientras empiezan y no las actividades en el centro, las familias se organicen en paralelo buscando otras alternativas que desplacen durante el resto del curso a las extraescolares. De ahí que adviertan que están en el aire los 7.000 puestos de trabajo que se generan en torno a este servicio.

Una de estas empresas, OSZAGALES, ya ha comunicado al centro en el que iba a impartir estas actividades que el servicio se ha visto interrumpido, “debido al retraso por parte de la Junta de Andalucía en la adjudicación y firma de los contratos”. En un escrito remitido a principios de semana, expresaban que “hemos intentado esperar hasta el último momento, pero debido a la poca información que estamos obteniendo sobre ello, vemos como mejor opción informaros de que no empezarán en esa fecha”. Si bien, afirmaban, tanto la empresa como el centro educativo lo tienen “todo preparado”, a la espera de que el Gobierno andaluz dé luz verde para ponerse en marcha.

Seguir el procedimiento

De su lado, fuentes de Desarrollo Educativo consultadas por este periódico apuntan que la Consejería, a través de la Agencia Pública de Educación (APAE) que gestiona las extraescolares, espera culminar la firma del Acuerdo Marco con todas las empresas “en los próximos días” y comenzar así la formalización de los contratos “con todas las garantías y plazos estipulados en el procedimiento”.

Un procedimiento cuestionado por AAEECO, en tanto que no da respuesta a las necesidades de las familias. Por su parte, proponen que se realicen “contratos puente” en aras de acelerar el proceso y poder comenzar con las actividades mientras que se ultima el acuerdo. Solución que dicen ya se ha llevado a cabo en ocasiones anteriores, pero que la administración actual rechaza por considerarlo “completo” y optar por seguir el proceso administrativo correspondiente. “¿Qué es mas complejo? ¿Poner en marcha esa instrumentalización que esta permitida por ley o intentar organizar la vida de esas familias?”, se pregunta ahora la gerente de AAEECO consciente de que “ya llegamos tarde” para miles de familias y alumnos.