“El problema es el virus y tenemos que luchar todos contra el virus. Los restaurantes y los bares no van a ser siempre el problema de la pandemia”. El presidente de la Federación Provincial de Empresas de Hostelería y Turismo, Gregorio García, no ha querido a entrar a valorar directamente las consideraciones de la rectora de la Universidad de Granada tras la decisión de la Junta de Andalucía de impedir las clases presenciales en los próximos 15 días para frenar los contagios por Covid-19. “Es triste que se valoren más los bares que la formación”, dijo este martes Pilar Aranda. “Quizás fue fruto de los nervios”, ha dicho a este periódico García, que ha recibido de buen grado que el Gobierno andaluz diera “confianza” al sector “puesto que nosotros podemos ser parte de la solución, no del problema”.
Aranda y García han coincidido “sin rencores” este miércoles en la Junta Local de Seguridad celebrada en Granada al día siguiente de la decisión de la Junta, criticada por PSOE y Adelante Andalucía, y en cierto modo por Vox. Mientras la Universidad de Granada ha defendido su inversión de 2,2 millones de euros para frenar la Covid-19 antes del cierre presencial de la Junta, los hosteleros granadinos observan que con más medidas restrictivas respecto a bares o restaurantes “iríamos todos a la ruina y abocaría al cierre de muchos establecimientos”. “El sector no aguantaría un cierre más”, apunta García. “Nosotros estamos contribuyendo a la normativa que se va dando en cada momento en nuestros establecimientos e intentando que la personas que acudan a ellos mantengan la distancia de seguridad, lleven la mascarilla, se cumpla el aforo, etc. Creo que el problema no es nuestro. Lo cierto es que estamos colaborando con las autoridades en todo lo necesario. El que no cumpla, que lo sancionen”, ha zanjado.
“No voy a entrar a valorar lo que hacen los técnicos”
Preguntado si la decisión de la Junta de Andalucía podía haber estado acompañada de otro tipo de medidas más allá del cierre de las aulas, García estima que “para nosotros ha estado bien”. “Hay que poner los cauces legales y las pautas que nos marquen y ayudar a ello. Si la Junta ha adoptado esas medidas será porque lo han visto conveniente. No voy a entrar a valorar lo que hacen los técnicos y menos en una pandemia como esta. Tenemos que acatar lo que nos digan”, señala.
El consejero andaluz de la Presidencia, Administración Pública e Interior, Elías Bendodo, ha defendido que la prioridad de la Junta es frenar los contagios en las residencias de estudiantes y colegios mayores de Granada para “evitar que el virus llegue a la universidad y ahí sea imparable”, argumentando el adelanto de su hora de cierre a las diez de la noche. La Junta ha registrado 150 contagios en siete residencias universitarias. Paralelamente, la Delegación General de Estudiantes de la Universidad de Granada y las organizaciones Frente de Estudiantes y Estudiantes en Movimiento han convocado una manifestación para el próximo viernes en contra de la suspensión. “No era necesario echar el cierre de la universidad”. “Me parece mal lo que se ha hecho y cómo”, ha dicho la rectora esta misma mañana.
Tras la Junta Local de Seguridad, informa Europa Press, el delegado del Gobierno andaluz en Granada, Pablo García, ha insistido en que Granada está “en un pico de contagios muy importante y había que frenarlo”, pero matizando que “la Universidad de Granada no se cierra” sino que se ha “pedido que se pase a virtual”, mientras que los colegios mayores deben cerrar a las diez de la noche con el objetivo de limitar la movilidad de los estudiantes. García ha recordado que en los últimos días se han detectado 150 contagios en siete residencias universitarias y afirma que la franja poblacional de entre 18 y 35 años supone ya el 80 por ciento de los nuevos contagios, por lo que ha hecho un llamamiento a los jóvenes para que tomen las medidas de prevención estipuladas por las autoridades sanitarias, como el uso de mascarillas y el distanciamiento social. Tras las imágenes del pasado fin de semana, con decenas de botellones desbordando la ciudad de madrugada, las autoridades locales han enviado ahora un mensaje de tranquilidad al tener “focalizado gran parte de lo que es el problema”, según ha dicho el alcalde, Luis Salvador.
Por su parte, fuentes del PSOE municipal han dicho a este medio que la medida de la Junta es “una salvajada” y lamentan que “se ha señalado a la Universidad cuando no ha habido contagios en ella”, denunciando “falta de previsión” en general a la hora de abordar la situación de este puente festivo y el hecho de que los centros de salud estén cerrados por las tardes ante la situación sanitaria, con colas a las puertas de los centros sanitarios según ha comprobado este periódico y también lamenta el responsable de sanidad de CCOO en Granada, Félix Alonso.
El representante sindical ha denunciado la “falta de recursos humanos” en los centros sanitarios y la “precariedad” de los contratos laborales para el personal médico y enfermero. “Y ahora que llega la Covid decimos que la primera barrera es la atención primaria”, lamenta, indicando que en los centros de salud “la gente está saliendo a las cinco de la tarde” y apostando por desarrollar “dos circuitos diferenciados” de atención, uno por coronavirus y otro para el resto de patologías. “Si están los bares abiertos por la tarde, tengamos también abiertos los centros de salud”, ha considerado.