A Torres Hurtado y al PP se le agotan los plazos para evitar perder la alcaldía de Granada. Tras las primeras declaraciones de intenciones de todas las formaciones en la oposición, este lunes se ha dado el primer paso para que se pueda presentar una moción de censura en la que Paco Cuenca, por pertenecer al segundo partido más votado, el PSOE, sería el nuevo alcalde de Granada.
La reunión entre ambas formaciones, que se ha producido en un céntrico hotel de la ciudad, ha durado escasa hora y media y ha llevado a la práctica el acuerdo que ya se alcanzó a nivel estatal para tratar de lograr la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno cuando C's y PSOE acordaron votar 'sí', de manera conjunta, por el candidato socialista para la presidencia.
Ahora queda por ver qué decidirán Izquierda Unida y Podemos una vez que tanto PSOE como Ciudadanos presenten a las dos formaciones municipales el acuerdo al que han llegado. A falta de que se produzcan dichas reuniones, los partidos ya han avanzado sus intenciones. Aunque desde Izquierda Unida en principio la disposición es total, C's ya ha puesto en tela de juicio a Podemos pidiéndoles “altura de miras” para que no “pidan sillones” dentro del consistorio sino que se sienten a hablar. Ana Terrón, diputada de Podemos por Granada en el Congreso de los Diputados, ya ha respondido que no hablarán de sillones sino del futuro de la ciudad.
En declaraciones a los periodistas tras la reunión, Cuenca ha señalado que el acuerdo alcanzado no incluye “líneas rojas” ni “condicionamientos” y ha indicado que la primera intención de las dos formaciones es “limpiar” el Ayuntamiento, sacarlo de la “corrupción” y lanzar un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía. El socialista ha vuelto a resaltar la situación de “extrema gravedad” en la que ha dejado el PP a Granada y ha reiterado la “responsabilidad” de los grupos en la oposición para situar a la ciudad “por encima de cualquier sigla política”. En ese sentido, ha justificado la presentación de la moción de censura en el objetivo de “devolver la confianza” de los ciudadanos en su Ayuntamiento y en “garantizar su viabilidad”, como “ejes fundamentales”.
Por su parte, el portavoz municipal de Ciudadanos, Luis Salvador, ha reivindicado la urgencia de “rescatar y devolver a Granada a la normalidad”, “erradicando la corrupción” y eso, ha agregado, “no se puede hacer con un alcalde que está en libertad con cargos y una concejal de Urbanismo en la misma situación”. Ha recordado que la decisión de impulsar una moción contra José Torres Hurtado ha sido consensuada con la dirección nacional y regional de su partido y se ha remitido a la rueda de prensa que ha ofrecido horas antes en el Ayuntamiento, donde ha descartado ofrecer su apoyo a un gobierno del PP en el presente mandato.
A partir de ahora, y una vez que los cuatro partidos de la oposición en el Ayuntamiento de Granada (PSOE, C's, IU y Podemos) llegaran a un acuerdo y se firmase, la moción se llevaría a cabo en diez días hábiles. A lo largo de la semana pasada, Ciudadanos retiró (por segunda vez desde diciembre) el apoyo a Torres Hurtado pero hasta este lunes no descartaban la posibilidad de un cambio de cabeza dentro del PP que les permitiera seguir manteniendo la alianza con los populares. Ante la clara negativa de dimisión del alcalde y la falta de presión por parte del PP a nivel regional (no a nivel provincial), Ciudadanos ha optado por echar al alcalde.