La juventud ha demostrado un día más que quiere encabezar la lucha contra el cambio climático. Ha sido Friday For The Future, el colectivo juvenil fundado por Greta Thumberg, quien declaró este viernes 25 de septiembre la acción global por el clima para “protestar contra la falta de medidas ante la emergencia climática”. Es por esto que en ciudades de todo el mundo ha habido un reclamo mundial por la justicia medioambiental, un grito que también ha llegado a España y a Andalucía, donde se han llevado a cabo diferentes tipos de acciones bajo el lema “Justicia climática para salir de las crisis”. En el territorio andaluz se han podido ver manifestaciones en Granada, Cádiz, Málaga, Almería, Marchena y Sevilla, todas ellas marcadas por un protocolo de prevención y por el grito “¡No hay planeta B!”.
En la capital hispalense, la marcha de este año ha estado marcada por la gran diferencia en el número de asistentes, 170 según fuentes oficiales. Se dispuso un protocolo diseñado para mantener las distancia de metro y medio a través de dos cordeles que nacían en la cabecera y marcaban el ritmo y el distanciamiento de jóvenes, niños y adultos, todos ellos con mascarillas y bajo el control de personal voluntario de diferentes colectivos, como la Asamblea Feminista Unitaria de Sevilla o Greenpeace. Desde Friday For The Future aseguran que “esta situación estaba prevista” y que “hemos instado a los grupos de riesgo y a las personas con síntomas de Covid-19 a que no vinieran y que nos apoyaran a través de las redes sociales para así evitar aglomeraciones”. Aun con estas circunstancias, personas como Verónica, científica alemana que reside en Sevilla desde hace 7 años, no ha querido perderse la oportunidad de asistir con su hijo de 8 años a esta manifestación: “quiero que vea que hay gente luchando por su futuro”.
Al inicio de la manifestación, Marta Bordons, representante de Fridays For The Future en Sevilla, ha afirmado que vienen “a exigir a los gobiernos medidas reales frente a esta crisis climática, ya que no se están cumpliendo (los objetivos) pese a que existe un gran consenso social a nivel local e internacional”. Así esta joven de 23 años ha encabezado toda la manifestación de la capital hispalense. Desde su inicio en Plaza Nueva hasta el final del recorrido, en la Puerta de la Macarena, Marta no ha soltado el megáfono para reclamar la principal demanda de la manifestación de este año: “Justicia climática para salir de la crisis”. Un lema que pretende poner el foco sobre la relación entre la crisis sanitaria y la crisis climática. La portavoz, afirma que “existen claros vínculos” entre ambas y que “para tomar medidas contra la crisis sanitaria, hay que tomarlas contra la crisis climática”. Además, también ha querido destacar que, tanto ellos como los otros colectivos ecologistas, “solo repiten lo que está diciendo el Grupo Intergubernamental de expertos sobre el Cambio Climático”.
“¡No hay planeta B!”
Una de las reivindicaciones principales por las que surge el colectivo Friday For The Future es la de reclamar que se cumpla con el Acuerdo de París y se lleven a cabo las acciones gubernamentales y económicas necesarias para mantener la temperatura del planeta por debajo de 1.5ºC en 2050. En este sentido, el hecho de que el calentamiento global continúe al ritmo actual puede provocar que, según el Panel Intergubernamental de expertos sobre el Cambio Climático, alcancemos esa temperatura entre 2030 y 2052.
Reyes Tirado, manifestante y científica especializada en el estudio del cambio climático, afirma que “la temperatura actual está en torno a 1.1ºC”, y que “aún estamos a tiempo de conseguir el objetivo de París”. Sin embargo, destaca “lo que piden los jóvenes” que es “responsabilidad política”. Reyes ha asistido a la manifestación como voluntaria de Red Sevilla por el Clima para controlar las medidas de seguridad, pero además porque considera que la lucha por el cambio climático es “la cuestión más importante a la que nos enfrentamos actualmente”. Es por esto que quiere mostrar “su apoyo a la juventud”, pues considera que “no son los responsables de esta situación pero sí quienes van a vivir las consecuencias”.
“¡Sin planeta no hay trabajo!”
En las redes sociales, uno de los hashtag más usados a nivel nacional para hacer referencia a esta marcha ha sido #25STrabajoyClima. Con este título, el colectivo ha querido reivindicar uno de los ejes fundamentales de la lucha climática en el panorama español actual. La lucha laboral se introduce en el lema de la movilización “justicia climática para salir de la crisis”, queriendo poner en el punto de mira, según Friday For The Future, que en el proceso de reconstrucción de la crisis provocada por el Covid-19, el trabajo “es un eje fundamental a transformar”. Destacan que “hace falta un modelo laboral nuevo más justo y sostenible que no deje a nadie atrás, desde el sector primario hasta el de los combustibles fósiles, pasando por el sanitario y la educación.”
En este sentido, María Perianes, presidenta de Red Sevilla por el clima y asistente a la manifestación como “apoyo de la juventud”, afirma que el ser humano es “eco dependiente”, lo que hace que “todo lo social sea una cuestión medioambiental”. Así, para explicar la relación entre justicia social y justicia climática, Perianes destaca que “el trabajo es la base de las condiciones de una vida digna y las condiciones laborales van a depender directamente de las medioambientales”.
“¡Menos centros comerciales y más parques naturales!”
Desde todas las voces de la manifestación ha habido un reclamo por un compromiso conjunto para luchar contra la concentración de gases de efecto invernadero y por la estabilidad de la temperatura terrestre. Entre esas voces, tanto las científicas Tirado y Perianes, como las portavoces de los colectivos 2020 Extinción y Friday For The Future coinciden en que la solución pasa por “abandonar los combustibles fósiles, preservar los parques naturales y cambiar las formas de consumo y el estilo de vida de la población actual”. Unas reivindicaciones que ya se mencionan en el Acuerdo de París y que la juventud actual reclama “de manera inmediata”.
Es por esto que jóvenes de todo el mundo se han movilizado tanto de forma presencial como de manera digital, con una fuerte presencia en las redes sociales, donde también se ha podido apreciar una unión internacional por un cambio que “ponga en el centro a las personas, los cuerpos, los territorios y la Tierra”.