El alcalde de la localidad sevillana de Coria del Río, Modesto González (AxSí), ha advertido de que el nivel de mosquitos en la zona del Bajo Guadalquivir es “similar al punto álgido que se alcanzó en 2020”, según han constatado “a través de la empresa que desarrolla el plan municipal del vigilancia y los informes periódicos de la oficina del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en la Estación Biológica de Doñana”.
El regidor ha destacado en una entrevista a Canal Sur que el mosquito “parece que este año viene cargado de virus del Nilo” y ha alertado de que “cada vez se acerca más al término municipal de Coria del Río”.
Para abordar la situación, esta misma semana se ha celebrado una reunión entre la Junta de Andalucía y los alcaldes de Coria y La Puebla del Río, en la que “se pretendía que hubiera representantes políticos de la Junta para que se pudieran tomar determinaciones en cuanto a la ejecución de un plan de acción que permita, como el año pasado, reducir el número de mosquitos adultos”. Sin embargo, lamenta que “no fue así” y que, por el contrario, desde la Junta “arrojaron la visión técnica sobre el plan que aprobó y con el que los ayuntamientos no estamos de acuerdo”.
Modesto González viene alertando de la “proliferación de mosquitos” transmisores del virus del Nilo occidental después del brote de dicho virus surgido en el verano de 2020, precisando que la presencia de estos mosquitos en el municipio está un 30% por debajo de la registrada el verano pasado, pero en los arrozales ya es “similar”.
Según el alcalde, dicha “proliferación” se desprende de las muestras recogidas por la Estación Biológica de Doñana-CSIC en los arrozales del Bajo Guadalquivir, que habrían detectado en ejemplares de mosquito de la zona “una carga vírica de intensidad equiparable a la del brote del 2020”, aviso que lanza remitiéndose al informe de dicho organismo.
Sobre las medidas adoptadas para luchar contra el mosquito y la transmisión del virus del Nilo, el alcalde ha puesto de relieve que el Ayuntamiento de Coria del Río “lleva trabajando desde el 13 de julio del año pasado, cuando se dio el primer caso en humanos”.
Ha subrayado que el 10 de abril de este año “se presentó el plan municipal de actuación que recoge ”imbornales contra las larvas en las zonas verdes que puedan ayudar a la proliferación de los mosquitos adultos por ser un buen cobijo“ y ”actuaciones más naturalistas como la implantación de caja nido de murciélagos“. Además, ha señalado la puesta en marcha de ”proyectos junto al Puerto o la Universidad con la intención de revestir las marismas de biodiversidad para combatir el mosquito desde la propia naturaleza“.
Respecto a la protección de los vecinos, el alcalde a resaltado que “el Ayuntamiento está haciendo una campaña muy importante de prevención sobre cómo deben actuar”. En este sentido, González ha añadido que deben utilizar repelente, evitar estar en el exterior en la salida y caída del sol, emplear mosquiteras en la medida de lo posible y eliminar cualquier acumulación de agua de las ventanas y balcones, entre otras.
El alcalde ha recalcado que “existe preocupación”, ya que “el año pasado hubo fallecidos, y hay vecinos con secuelas de la enfermedad que no van a poder superar”. No obstante, ha tranquilizado a la población apuntando que “el año pasado el primer caso en humanos se dio el 13 de julio, y este año, a estas alturas, solo hay un caso en un caballo”.
El Ayuntamiento de la Puebla del Río también intensificará más aún sus tratamientos contra los mosquitos en prevención a la propagación del virus del Nilo y se compromete a “actuar en zonas que no son de su competencia municipal” debido a “la inacción de la Junta de Andalucía”.
Por su parte, el subdirector de Protección de Salud de la Junta, Ulises Ameyugo, ha explicado que el plan de control de la Junta “incluye a 91 términos municipales considerados de riesgo por sus características ambientales”, pero ha precisado que cada ayuntamiento “tiene que adaptar este plan a su municipio”, ya que “cada término tiene unas características locales especiales”.
Ha subrayado que este plan “está enfocado al control de la población de mosquitos, porque no se puede erradicar debido a las características medioambientales de Andalucía”.
Ameyugo ha precisado que el virus del Nilo “se mantiene en un ciclo natural entre aves y mosquitos” y cuando “hay pocas aves o se alejan, los mosquitos buscan otros animales de sangre caliente para picar, como pueden ser los caballos --que a veces se utilizan de centinelas--, o en un caso extremo los humanos”. “Estos casos serían un fondo de saco, ya que las personas no pueden transmitir el virus”, ha concluido.
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