El Colectivo de Trabajadores Africanos (CTA) ha dirigido este viernes una solicitud al Ministerio de Sanidad del Gobierno de España para que garantice el acceso al agua en los asentamientos chabolistas de la provincia de Huelva (en los municipios de Lepe, Lucena del Puerto, Moguer y Palos de la Frontera) para evitar el riesgo de contagio del COVID-19.
En Huelva hay 49 asentamientos chabolistas sin suministro de agua donde habitan miles de trabajadores temporeros, en su mayoría subsaharianos, durante la campaña de recolección de la fresa de Huelva que se encuentra en marcha en estos momentos, recuerda el colectivo en el escrito, que señala que las condiciones de insalubridad de los asentamientos chabolistas es un hecho conocido por todos. Recientemente la visita de Philip Alston, relator especial sobre la extrema pobreza y los derechos humanos de la ONU, puso de manifiesto en sus declaraciones que los trabajadores que habitan los asentamientos “viven como animales” y “sus condiciones compiten con las peores que he visto en cualquier parte del mundo”, remachó. Sin embargo, son escasas o nulas las medidas que se han tomado o se toman por parte de los ayuntamientos de los municipios en los cuales se ubican estos asentamientos, ignorando así las precarias condiciones en las que se encuentran obligadas a vivir las personas asentadas en estos espacios.
En ninguno de estos asentamientos hay acceso directo al agua potable ni a la energía a pesar de que las redes de distribución se encuentren a escasos metros en la mayoría de los casos. Tampoco hay ningún tipo de red de saneamientos, ni recogida de basuras. “Estas condiciones hacen que desde el punto de vista higiénico sanitario, haya grandes riesgos para la salud en condiciones normales. Y en una crisis sanitaria como la actual los riesgos se multiplican”, advierte el colectivo.
Los trabajadores amparan su petición en el Real Decreto 463/2020 de 14 de marzo que decreta el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19 que otorga al Ministerio de Sanidad las competencias para garantizar la prestación de todos los servicios, ordinarios o extraordinarios, en orden a la protección de personas, bienes y lugares.
“La higiene de mínimos no está garantizada en estos asentamientos chabolistas de Huelva al carecer de cualquier tipo de suministro de agua sea estable u ocasional”, señala el escrito, que apunta que las personas que habitan estos asentamientos tienen que desplazarse varios kilómetros para poder acceder al agua para cubrir sus necesidades básicas.
El escrito, entre otras cuestiones, recuerda que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), son necesarios entre 50 y 100 litros de agua por persona y día para garantizar que se cubren las necesidades más básicas y garantizar la salud. Unas cantidades que en el contexto de una pandemia tendría que ser superiores. “Esta carencia en el acceso al agua expone a estas personas a un alto riesgo de contagio en el contexto de la actual pandemia y supone así mismo una situación de potencial creación de un foco infeccioso”, dice el colectivo.