El impuesto de bienes inmuebles (IBI) de naturaleza urbana se ha incrementado en la comunidad autónoma una media del 118% en una década, entre los años 2000 y 2011, que son los últimos datos que ha actualizado el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) una vez cerrados los periodos de recaudación. Esto significa que el tributo ha crecido más de doble, salvo en una veintena de municipios donde ha bajado o se ha mantenido igual. Este incremento se ha concentrado en buena parte en los años de la crisis, es decir, a partir de 2007, periodo en el que se ha registrado un incremento medio de casi el 40%.
De este modo, pese a que el precio de la vivienda ha bajado con la crisis, el IBI ha crecido, lo que está relacionado con el interés de las administraciones locales por incrementar sus ingresos para sanear sus cuentas. Una estrategia favorecida por el Gobierno de la Nación a través de sucesivos catastrazos. Desde el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas subrayan que se hace un esfuerzo por adaptar los valores catastrales al precio de mercado, pero lo cierto es que el ritmo es lento y muchos ciudadanos no lo han notado todavía.
De hecho, la fórmula más habitual para ello es hacerlo con las llamadas ponencias de valores, pero en muchos casos no se revisan desde los 90 o incluso desde los 80. Se pueden consultar en la Dirección General del Catastro. La otra vía, es la aplicación de un coeficiente de actualización, que cada ejercicio toca a un paquete de municipios que previamente lo hayan pedido (para este año son 245 en Andalucía). Eso sí, siempre queda el margen de que cada consistorio aplique subidas extra o conceda bonificaciones a partir de estos mínimos.
La subida se ha notado sobre todo en Almería
De acuerdo con los datos recabados por el IECA, la subida se ha dejado notar especialmente en la provincia de Almería. De hecho, de los 14 municipios en los que el IBI se ha disparado por encima del 500%, 10 son de Almería: Vélez-Blanco, Lúcar, Arboleas, Albánchez, Cóbdar, Cantoria, Gérgal, Oria, Castro de Filabres y, sobre todo, Bédar, que con una media de la cuota cifrada en 23,55 euros en 2000, pasó a 344,96 en una década, es decir, creció por encima del 1.300%, la mayor subida porcentual de Andalucía.
En todo caso, no son estos ciudadanos los que pagan el IBI más caro. El récord en Andalucía lo ostenta Huévar del Aljarafe (Sevilla), con una media de 777,73 euros, lo que desde el gobierno local atribuyen al incremento del valor catastral que ha supuesto el desembarco en la población del centro logístico de Mercadona, que a la postre ha reactivado su economía.
Tras Huévar del Aljarafe, las cuotas más elevadas se concentran en la Costa del Sol, con un IBI por encima de 500 euros de media en Benalmádena, Alhaurín de la Torre, Torremolinos, Marbella, Mijas, Estepona, Vélez-Málaga, Istán y Benahavís. En ese mismo margen se sitúan sólo otros dos municipios fuera de Málaga o Sevilla: San Roque (Cádiz) y Palos de la Frontera (Huelva). Por capitales de provincia, la cuota media más alta la tiene Málaga (381,11 euros), seguida de Sevilla (378,48) y Almería (362,31).
Lo que vendrá en 2014
Para este año, como se ha mencionado, está previsto que 245 municipios apliquen coeficientes de actualización de los valores catastrales de acuerdo con la Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE), lo cual no quiere decir que en todos los casos vaya a subir la cuota . El listado de estos municipios se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y son de las provincias de Almería (26), Cádiz (24), Córdoba (27), Granada (59), Huelva (24), Jaén (30), Málaga (29) y Sevilla (34).
En este sentido, desde la Dirección General del Catastro exponen que son municipios que han puesto de manifiesto “diferencias sustanciales entre los valores de mercado y los que sirvieron de base para la determinación de los valores catastrales vigentes”. Sólo se exigen que la última ponencia de valores -el parámetro a través del cual se establece el IBI- no haya variado en los últimos cinco años. De este modo, en los municipios cuya ponencia de valores ha entrado en vigor en los años 2004 y 2005 “no existen diferencias sustanciales entre el precio de mercado y el que sirvió de base para la determinación de los valores catastrales vigentes”. Diferencia que sí se aprecia en aquellos cuyas ponencias de valores datan entre los años 2006 y 2008 y, por otra parte, en 2003 o antes.
Desde Rafael Berdaguer Abogados, expertos en la materia, exponen que “no puede iniciarse una ponencia de valores hasta que hayan transcurrido por lo menos cinco años desde que entraran en vigor los valores catastrales de una anterior”, y normalmente se hace a partir de los 10 años. “Entendemos que esto significa que se quiere conseguir que con carácter general las ponencias se hagan cada 10 años, aunque textualmente la ley dice 'a partir' por lo que no hay un plazo obligatorio”, subraya Rafael Berdaguer, que lidera este bufete de abogados de Marbella (Málaga). También aclara que no se prevé “ningún tipo de sanción por incumplimiento”. Pone el caso de Marbella, donde hasta el año pasado no se revisó el valor catastral después de 23 años, lo que originó un “claro desfase” con el precio de mercado. De todas maneras, dado lo complejo que resulta la lectura de un recibo del IBI, recomienda que se revise, con asesoramiento de profesionales para comprobar si la valoración que hace un consistorio está correctamente realizada.
Reclamar da resultados. De hecho, el Ayuntamiento de Almería ha devuelto recientemente el exceso de IBI cobrado en 2009 y que fue reclamado el pasado año. No era una cuestión menor, dado que se cobró de más a unas 60.000 familias, según los cálculos del PSOE.