El Consejo de Gobierno ha acordado este martes iniciar los trámites del anteproyecto de Ley del Emprendimiento, que será “uno de los pilares del nuevo modelo de producción que se quiere impulsar desde la Junta de Andalucía”, junto con el recientemente ratificado Paidi (Plan Andaluz de Investigación, Desarrollo e Innovación), en palabras del consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano. En realidad se trata de “convertir en derecho” servicios que en su mayoría ya se prestan desde la Junta de Andalucía, y por eso se quiere hacer por ley, sin que haya medidas concretas que se puedan vender como novedosas.
El consejero ha querido en todo caso destacar la importancia de este paso, y ha calculado que el desarrollo de la ley supondrá la puesta en marcha de más de 60.000 negocios en los próximos cuatro años y generará en torno a 72.000 puestos de trabajo dado que se trata básicamente de microempresas. “El emprendimiento no es una gatera (...), sino una opción que contribuye a generar empleo y riqueza”, ha enfatizado. ¿Se harían los mismos cálculos sin que se impulsara esta ley? ¿Cómo se va a intentar corregir la elevada mortalidad que todavía se da en las pymes en la comunidad autónoma? ¿Se incidirá en el principal problema que éstas dicen tener para poder acceder a los créditos? Son preguntas que han quedado un poco en el aire porque el consejero ha preferido incidir en que “Andalucía será la primera comunidad autónoma como un sistema público de emprendimiento para facilitar a estas personas el camino para crear, consolidar y crecer en ideas empresariales”.
Se coordinará mediante los más de 200 CADE (centro de apoyo al desarrollo empresarial) que hay en el territorio y su puesta en marcha supondrá una inversión de 160 millones de euros para esos cuatro años, más las cantidades que salgan de otras consejerías, como por ejemplo de programas que impulse la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural. Entre las medidas de la ley, ha referido que se fomentará más el emprendimiento en la escuela, “redoblando los esfuerzos” con acciones formativas en los diferentes niveles desde primaria y se elaborará de un estatuto del emprendedor rural, que entre otras cosas visualice el papel de la mujer y los jóvenes en este terreno. De hecho, ha situado en las propuestas para el emprendimiento rural las medidas que serán nuevas. “La clave está en la sistematización de los servicios y que las actuaciones que rodean el emprendimiento estén relacionadas con un plan general”, ha insistido para explicar por qué es importante una ley que todavía tiene por delante una larga tramitación. O sea, se ponen “en juego los recursos del pasado de manera ordenada y sistematizada”.
Por su parte, el portavoz del Gobierno de Andalucía, Miguel Ángel Vázquez, ha incidido en que en los nueve meses desde que Susana Díaz tomó posesión como presidenta se han aprobado ya 11 iniciativas legislativas, a la que se une ésta. “Esto desmonta a los que hablan de parálisis del Gobierno de Andalucía”, ha subrayado para hacer frente a las críticas sobre la supuesta distracción de la presidenta con sus intenciones de convertirse en nueva secretaria general del PSOE. Es más, ha comentado que éste es el inicio de legislatura “más activo desde que comenzó la autonomía”.