La Junta de Andalucía se está planteando utilizar sistemas de inteligencia artificial para recopilar y analizar comentarios de sus funcionarios en redes sociales o foros de comentarios a noticias. Se trataría de disponer en un archivo del denominado “genoma del funcionario”, en el que consten intereses e ideas expresados en Internet. El propósito declarado de la administración es utilizar este archivo para facilitar el encaje y la promoción del funcionario. “Darle el puesto de trabajo al que él desea acceder”, según expresó Ana María Vielba, Secretaria General para la Administración Pública, en una presentación del Anteproyecto de Ley de Función Pública (actualmente en trámite de información pública) el pasado 30 de marzo. Fuentes del Gobierno consultadas insisten en que no se trataría de un “rastreo”, sino que requeriría autorización expresa del funcionario, sin especificar cómo se prestaría este consentimiento. Oficialmente, la Consejería insiste: es una idea aún muy verde.
En la presentación, que puede ser consultada en Youtube (a partir del minuto 7.10) en el canal del Instituto Andaluz de Administración Pública, Vielba avanza el proyecto, todavía en fase piloto, que se presenta como una mejora para la satisfacción de los servidores públicos. “Queremos saber qué le preocupa al funcionario”, dice: “Esto significa que todo aquello que tenga puesto en sus perfiles públicos puede ser utilizado para poderle dar el puesto de trabajo al que él desea acceder”. La administración utilizaría esa información después de recopilarla mediante el uso de sistemas de inteligencia artificial.
La secretaria general cita la posibilidad de recopilar sistemáticamente comentarios en LinkedIn (una red profesional) o Facebook (de carácter personal). Y añade: “De repente entro en debates continuamente; no sé, en comentarios de un periódico que tienen que ver con artículos de contratación administrativa”. El proyecto contempla recoger y archivar también esos comentarios.
Con esa información, la administración dispondría de lo que llama “genoma del funcionario”, en teoría para usarlo con el fin de perfilar sus intereses y facilitarle el acceso a un puesto donde encaje. “Todo eso a través de la inteligencia artificial lo vamos a tener en el perfil de cada uno de los funcionarios”, añade. “Cuando se presente a una plaza tendremos su currículum, su capacitación, su formación y además lo que le interesa y de verdad sabe hacer”, concluye Vielba, que define el proyecto como “pionero” y “muy innovador”.
El vídeo ha causado revuelo en algunos foros. Gobierno andaluz insiste: se trata de una idea, aún sin plasmar en documento alguno, que tiene como finalidad “retener el talento de los funcionarios y captar nuevo talento”, conociendo mejor su perfil y sus inquietudes: “Gana la administración y ganaría el funcionario”.
“Genoma del funcionario” no aparece reflejado en el Anteproyecto de Ley de Función Pública. La secretaria general parece sugerir que se ha evaluado la legalidad del proyecto, cuando señala: “Por ahí va ir todo lo que nos da la ley como base legal, como lo que estamos haciendo en la Junta de Andalucía”. Fuentes de la Consejería replican que el proyecto es meramente una “idea” aún muy incipiente y que no pueden explicar nada sobre su encaje jurídico.
Los sindicatos se oponen a la idea. Es un “atentado gravísimo”, propio del “Gran Hermano”, denuncia Pablo López del Amo, coordinador del sector de administración autonómica de CCOO Andalucía, que vincula “Genoma del funcionario” con el concepto de “idoneidad”, introducido por el anteproyecto de ley como principio de actuación general en el acceso a la función pública, al mismo nivel que los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad. El sindicato está elaborando sus alegaciones, e interpreta que el concepto de idoneidad introduce un alto grado de subjetividad en la selección.
Para Alfonso Calabuig, del sindicato SAF, “Genoma del funcionario” es “infumable”: “Que tus redes sociales, en las que pones lo que te da la gana, que para eso son tuyas, sean tenidas en cuenta de cara a ofrecer puestos de trabajo en la administración…”. Calabuig recuerda que la administración no puede, sin más, ofrecer un puesto de trabajo en función de los intereses de posibles aspirantes. La ley obliga a realizar una convocatoria pública, con unas bases, y a fijar unos requisitos. Retomando el ejemplo que menciona la secretaria general en el vídeo: “Tienes que ser de un cuerpo y especialidad de contratación, independientemente de que te guste mucho la contratación”.
“Nos sorprende porque es habitual en ciertas empresas privadas, pero incomprensible en la administración, donde se accede por igualdad, mérito y capacidad”, señala Rocío Luna, secretaria de acción sindical de Iniciativa Sindical Andaluza.
Aunque la idea se lanza en la presentación del borrador del anteproyecto de Ley de Función Pública, no aparece en el texto legal, y ni CSIF ni UGT (que han participado en la elaboración del borrador) han sido informados de ella, según aseguran. CSIF califica de “despropósito” el mensaje de la secretaria general, y cree que podría atentar contra los principios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad.
Esperanza Morales, de UGT, cree que podría atentar contra el principio de igualdad y cree que, tal y como está planteado, el proyecto podría atentar contra el derecho a la intimidad de las personas, alterando el acceso igualitario a la función pública. “No nos parece que la intromisión en la vida privada de la gente sea la fórmula adecuada para acceder a un puesto de trabajo en la administración. La administración ya tiene en la Constitución los principios en base a los cuales se puede desempeñar un puesto público”.
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