El Consejo de Gobierno ha autorizado este lunes a la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades a iniciar la tramitación de dos anteproyectos de ley por los que se reconocerían a la Universidad Fernando III el Santo y a la Universidad Tecnológica Atlántico-Mediterráneo (Utamed), ambas de naturaleza privada, en el marco del sistema de enseñanza superior de Andalucía. Estos dos proyectos eran los más avanzados de los siete que tenía la Junta sobre la mesa para darle luz verde.
Se da la circunstancia de que Utamed está promovida por el Grupo Vocento y el Instituto de Formación Profesional Medac, una institución vinculada al consejero de Educación, Javier Imbroda (Cs) hasta poco antes de su llegada a la Junta en enero de 2019. Imbroda ha esgrimido en varias ocasiones que en 2018, “sin saber si sería diputado o consejero”, se desvinculó de Medac, que el pasado mes de agosto fue adquirida por el fondo de inversiones norteamericano Kohlberg Kravis Roberts (KKR) por 200 millones de euros.
La referencia oficial del Consejo de Gobierno apunta que la impulsora del proyecto es Sapere Aude Arco Mediterráneo SL, sin hacer mención alguna a Medac. Poco después de anunciarse que el proyecto tiene autorización, Utamed resaltó en un comunicado que la universidad “está promovida por Grupo Medac, líder en estudios de Formación Profesional en España, en el que actualmente cursan estudios más de 100.000 alumnos”.
Rechazo del Consejo Andaluz de Universidades
Tanto Utamed como la Fernando III el Santo (vinculada a la Fundación San Pablo CEU Andalucía) no pasaron en diciembre el corte del Consejo Andaluz de Universidades (CAU), un órgano compuesto por los rectores de las universidades púbicas y representantes de la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades que debe emitir un informe que es obligatorio pero no vinculante. El rechazo chocó con el dictamen de la Dirección General de Universidades de esta misma consejería, que comunicó que el proyecto cumple con la normativa de aplicación.
La preocupación que expresó el CAU está en la línea de un exceso de oferta universitaria en Andalucía, al considerar que puede haber una pugna para ver quién hace los títulos más asequibles en todos los sentidos, lo que puede conllevar un cierto riesgo de devaluación de la formación. Esto contrasta con la opinión del consejero responsable de Universidades, Rogelio Velasco, quien en más de una ocasión se ha mostrado abierto a la creación de más universidades privadas en Andalucía porque hay “espacio” para su implantación. “No son una amenaza” y es “buena” la competencia, aseguró recientemente en una entrevista.
La autorización del Consejo de Gobierno es un paso más que una universidad privada debe recorrer para su creación: presentación de solicitud a la Junta de Andalucía, informe de la Conferencia General de Política Universitaria (CGPU, dependiente del Ministerio de Universidades), informe de la DEVA de la Agencia Andaluza del Conocimiento (dependiente de la Junta) e informe del CAU. Una vez se recaben todos los informes, incluido el del Consejo Consultivo de Andalucía, y se culmine el resto de los trámites establecidos, ambas normativas volverán a someterse al Consejo de Gobierno para su visto bueno como proyectos de ley, trasladándose posteriormente al Parlamento para su aprobación. Según el Gobierno andaluz, “a lo largo de este proceso se ha velado por que estas iniciativas académicas cumplan con los requisitos que determina la legislación correspondiente”.
La propuesta de Utamed
El proyecto docente y de investigación de Utamed será online pero con sede radicada en Málaga, y se articulará a través de cinco centros: las facultades de Empresa Digital, Tecnología y Derecho y de Humanidades y Ciencias Sociales, una Escuela de Doctorado, un centro de I+D+I y otro de emprendimiento y transferencia.
Asimismo, la enseñanza proyectada por esta institución se compone de 14 titulaciones: seis grados, siete másteres y un título de doctorado. Las disciplinas que se podrán cursar están relacionadas con las nuevas tecnologías, Marketing Digital, Derecho, Educación, Emprendimiento e Innovación, entre otras. Con carácter general, esta oferta académica está dirigida a un alumnado con dificultades para conciliar la vida profesional y la formación universitaria.
En su comunicado, Utamed ha destacado que esta iniciativa “consigue romper con los más de 20 años de retraso de Andalucía para implantar estudios universitarios a distancia respecto a Cataluña y Madrid”. Asimismo, resalta que llega “en un momento clave para la región, donde el desempleo juvenil es de los mayores de Europa”, ante lo que esta universidad aspira a “implantar una formación en línea accesible, asequible y de alta calidad, adaptada a los nuevos mercados y con el objetivo de contribuir a la creación de empleo, la atracción y recuperación de talento y la reducción de la brecha digital”.
La Fernando III, en Bormujos
Por su parte, la Universidad Fernando III impartirá docencia mediante modalidad presencial. Se ubicará en el municipio sevillano de Bormujos y contará con dos centros: la Facultad de Ciencias Empresariales y Jurídicas y la Escuela Politécnica Superior. Su oferta de títulos se compone de ocho grados y cinco másteres en materias relacionadas con la Administración y Dirección de Empresas, Marketing y Gestión Comercial, Relaciones Internacionales, Derecho, Ingeniería de Sistemas de Información, Ingeniería de Sistemas de Telecomunicación, Auditoría de cuentas o Business Analytics y Big Data, entre otros.
Ambas propuestas académicas que aspiran a instalarse en la comunidad vendrán a complementar la oferta formativa universitaria ya existente en el territorio andaluz, que está sustentada en diez instituciones públicas y en una privada, la Universidad Loyola.