El hasta esta semana director de la Bienal de Flamenco de Sevilla, José Luis Ortiz Nuevo, que dimitió el miércoles como director de la Bienal de Flamenco de Sevilla, ha denunciado que “la actitud del Ayuntamiento y del ICAS [Instituto de la Cultura y las Artes] ha sido una herramienta de obstáculos” para la organización de la próxima edición y ha denunciado que el gobierno local trató de “amañar” un concurso público para que trabajaran con él las personas que él había requerido.
“Quiero que Sevilla sepa lo que se va a perder, una programación para la cual ya había embarcado a José Manuel Gamboa, Diego Amador, José Antonio Rodríguez, Dani de Morón... Solo me queda pedirles disculpas y publicar cuanto antes los elementos de ese programa, para que el Ayuntamiento y la opinión pública los conozcan”, ha dicho en una entrevista este domingo en El Correo de Andalucía.
Ortiz Nuevo fue designado el pasado mes de julio en sustitución de Cristóbal Ortega para estar al frente de la XX edición del festival, presentó su dimisión el miércoles. Al día siguiente, el delegado de Cultura, Antonio Muñoz, explicó que las “exigencias” del ya exdirector “vulneraban la legalidad y no ha sido posible el acuerdo. ”Ortiz Nuevo tenía que trabajar con el equipo de tres personas más el apoyo del equipo del Icas, como viene funcionando tradicionalmente“, dijo el delegado.
Ortiz ha dicho este domingo que “las limitaciones burocráticas son las que son” y que “la primera respuesta es que las personas que yo requería, Miguel Ángel Vargas y Francis Mármol, hablen con funcionarios para que se prepare un concurso con sus perfiles profesionales, y amañarlo para que lo ganaran ellos”. “Respondimos evidentemente que no, que eso no podía ser, no se puede dar una imagen de legalidad engañando”, ha lamentado.
“La solución que me dieron era partir mi sueldo por la mitad entre Miguel Ángel y yo (...) He estado dos meses sin ninguna persona de secretaría, no podía ni entrar en internet por un problema con las claves”. Sobre Muñoz ha dicho que “lo más que me dijo es que me acercara por el Ayuntamiento, que intentaría salirse del pleno y hablaría conmigo. Es descorazonador, me parece que le importa tan poco la Bienal y lo que estamos haciendo”.
El exdirector ha denunciado “esa política de propaganda triunfal, un poco cateta y ridícula que hemos visto en los últimos años, de que estaba ya todo vendido no sé cuántos meses antes: eso es mentira, como todo el mundo sabe. (...) Estoy contento porque he salido del infierno, pero para nada me afecta y voy a seguir combatiendo por mis ideas. No me retiro, me voy a quedar en Sevilla este año”.