La Junta de Andalucía ha garantizado explícitamente que los hoteles y demás alojamientos turísticos de la Costa del Sol y el resto de Málaga tendrán las piscinas llenas este verano, mientras ha avanzado la prohibición del llenado y rellenado de las piscinas privadas y de comunidades de propietarios.
La garantía para los hoteles la ha comunicado al término de una reunión mantenida este jueves por la Comisión para la Gestión de la Sequía de las demarcaciones hidrográficas de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas (Málaga) y la de Guadalete-Barbate. La prohibición a los particulares la ha avanzado Sur y la confirman fuentes del Colegio de Administradores de Fincas, tras la conversación que han mantenido con responsables de la administración autonómica. Desde la Junta de Andalucía corroboran que las comunitarias no se exceptuarán de la prohibición general de llenar o rellenar piscinas.
La decisión afecta a Campo de Gibraltar, toda la provincia de Málaga y Levante almeriense, que son las zonas en situación de sequía excepcional, pero tendrá especial relevancia en Málaga, una zona de alta afluencia turística tanto a viviendas vacacionales como a hoteles.
En Málaga existen más de 80.000 piscinas descubiertas, unas 5.000 de ellas de comunidades propietarios. Tal y como informó este medio, el llenado de estas piscinas no estaba totalmente prohibido por la Junta de Andalucía, que, a diferencia de lo que estaba ocurriendo con los bandos municipales, hasta ahora permite que se llenen piscinas nuevas y rehabilitadas previa autorización de la Comisión de Sequía.
La Comisión se remite a futuras reuniones para comprobar el efecto de las lluvias sobre los embalses de las cuencas, que actualmente están por debajo del 20% de su capacidad, y valorar entonces una posible relajación de las medidas de ahorro o la aplicación de nuevas medidas, como traer agua en barcos. Actualmente el consumo está limitado a 160 litros por persona y día.
A la espera de la publicación en BOJA
Los administradores habían pedido claridad a la administración, y esa ha llegado hoy. Oficialmente, la Comisión de Sequía no ha dicho nada sobre piscinas comunitarias o privadas en su comunicado. Sin embargo, fuentes del Colegio de Administradores de Fincas dan por descartada la posibilidad de abrir piscinas comunitarias este verano tras hablar con la Junta de Andalucía, y así están informando ya a los colegiados para que lo transmitan a las comunidades.
“La propuesta (…) para la prohibición del llenado y rellenado de piscinas en comunidades de propietarios permitirá a las mismas, y a los profesionales de la administración de fincas, adoptar estas medidas restrictivas con la seguridad jurídica que se venía reclamando”, dicen en un comunicado, en el que aclaran que están “a la espera de la publicación de estas nuevas modificaciones en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) para poder analizarlas con todo detalle”.
La medida tiene un coste político, sobre todo al priorizar el sector turístico, esencial para la economía malagueña. De ahí que en paralelo, la Comisión de Gestión de Sequía dé total certidumbre a las piscinas de los hoteles: “Se ha acordado por unanimidad permitir el llenado de piscinas públicas municipales, clubes deportivos o sociales, aquellas que se destinan a fines terapéuticos en centros sanitarios y las de alojamientos turísticos que figuren en el registro oficial de la Junta de Andalucía”, se lee en la nota distribuida por la Junta de Andalucía.
Desde la patronal hotelera ya se habían mostrado seguros de que las restricciones no alcanzarían a sus instalaciones. Así lo indicó la semana pasada el vicepresidente de AEHCOS, mayoritaria en la Costa del Sol, en conversación con este periódico: “Pueden estar abiertas y así se van a mantener”. Hoy ha llegado la confirmación por escrito, incluso en términos más amplios que los previstos hasta ahora, puesto que se permite no solo el rellenado, sino también el llenado sin la autorización que hasta ahora tenían que solicitar.
La diferencia planteará situaciones de trato diferenciado en pocos metros: por ejemplo, que mientras la piscina del hotel esté llena, la de la comunidad de propietarios vecina esté vacía. “Entendemos la importancia económica del turismo, pero también hay residenciales con turistas que gastan tanto o más que el del hotel”, advierten desde el colegio.
“Soluciones a sectores productivos”
La decisión se ha tomado en las reuniones telemáticas de la demarcación hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas y de la demarcación hidrográfica del Guadalete-Barbate de este jueves, presididas por el secretario general de Agua de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramiro Angulo. En ambas citas se han analizado las medidas e infraestructuras que prevé el IV Decreto de Sequía.
Según la nota distribuida por la administración andaluza, ambas comisiones de gestión de la sequía han acordado “tener en cuenta también las necesidades de los sectores productivos, industrial y turístico en los sistemas que se encuentran en situación de excepcional sequía”, aportando “soluciones que ofrecen el equilibrio y la eficiencia de los recursos hídricos disponibles”. En este contexto enmarca la administración la garantía ofrecida al sector turístico respecto a las piscinas de hoteles y demás alojamientos, y la prohibición total a las demás.
En la dos se ha acordado que se revisarán las medidas de ahorro para Guadalete-Barbate y Cuencas Mediterráneas, que en las últimas semanas han sumado 45 hm3 y 22 hm3 de agua, respectivamente. No obstante, “hay que esperar un par de semanas antes de poder estudiar en firme esta revisión a fin de que finalicen las escorrentías en dichas zonas”, ha dicho Angulo.
Dentro de 15 días, las comisiones de sequía se reunirán de nuevo para evaluar la situación hidrológica considerando las aportaciones que siguen llegando a los embalses, “así como por las posibles precipitaciones que se espera que tengan lugar durante esta próxima quincena”. Será entonces cuando se considere si se reducen las medidas de ahorro en vigor tanto en la cuenca del Guadalete-Barbate como en las Cuencas Mediterráneas.
Desde hace dos meses el consumo diario de agua corriente está fijado en 160 litros por persona y día en ambas cuencas. Cada municipio o entidad de agua establece las medidas de ahorro para llegar a esa cantidad.