Dos decisiones adoptadas por la Junta de Andalucía esta pasada semana han generado un profundo malestar en los sindicatos. Por un lado, la decisión de recortar la oferta pública de empleo que anunció para docentes en la convocatoria de 2016, que de las 2.200 plazas que dijo la presidenta, Susana Díaz, se ha quedado en 1.810. Por otro, la distribución de la jornada laboral de 37,5 horas del personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS) aprobada en el Consejo de Gobierno del pasado martes “por imposición y sin negociación”, tal y como manifiestan los sindicatos.
Éstos han sido especialmente críticos porque son decisiones que han llegado después de las elecciones generales y quiebran las expectativas de muchos. En especial en el caso de la oferta pública de empleo de la Consejería de Educación. En la última reunión de la Mesa Sectorial de Educación, la Junta de Andalucía confirmó a los sindicatos que la convocatoria finalmente será de 1.987 plazas, que en realidad son 1.810 porque 177 viene de 2015, cuando lo prometido por la presidenta eran 2.200 para el próximo ejercicio. O sea, casi 400 menos de lo comprometido.
El sindicato Ustea ha recordado que la Junta de Andalucía tiene reconocidas 2.327 jubilaciones hasta el 31 de diciembre de 2015, por lo que “a todas luces esta oferta pública de empleo es insuficiente”. En término parecidos se han expresado desde CCOO. Su secretario general de la Federación de Enseñanza, José Blanco, ha criticado que la Junta de Andalucía “no ha dado razones que justifiquen este cambio de postura”, puntualizando que “las plazas sacadas a concurso ni siquiera permitirán cubrir las jubilaciones previstas en el año”. Es más, un estudio del sindicato cifra en 6.182 las vacantes de profesorado cubiertas por interinos este curso. También UGT y CSIF se han sumado a estas críticas.
La diputada del PP Marifrán Carazo lo ha calificado este domingo de “estafa” y ha dicho que su partido “apoyará a los sindicatos en sus reivindicaciones”. Para continuar: “Exigimos explicaciones públicas para una decisión injustificable, la de condenar a la interinidad a nuestros docentes, la de mantener una ratio por encima de la media española y la de incumplir conscientemente y a propósito el acuerdo firmado con los sindicatos en 2007, otro año preelectoral, de incrementar en 15.000 docentes las plantillas, cuando todavía faltan 9.000 para ello”.
El otro asunto de la semana que ha terminado de enfadar a los sindicatos ha sido el de la distribución de la jornada laboral en el SAS tras la imposición de las 37,5 horas por semana por parte del Gobierno de la Nación. “La medida se adopta en ejecución de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (...) en los casos en los que no se llega a acuerdo con las organizaciones sindicales integrantes de la Mesa Sectorial de Sanidad”, recuerdan desde la Junta de Andalucía. Pero los sindicatos sostienen que ni siquiera se les ha planteado el tema.
El sindicato de enfermería, Satse, ha hablado de “cacicada” y ha reprochado que la distribución fijada “ahonda en la discriminación” del personal del SAS con respecto a otros trabajadores públicos. Mientras, UGT ha recordado los avisos que repetidamente ha recibido la Junta de Andalucía de los jueces por una aplicación de las 37,5 horas “que no es legal”. Es más, CCOO ha convocado para el lunes 28 de diciembre CCOO a los trabajadores del SAS para que a las 11.00 horas se concentren durante 20 minutos frente a las puertas de sus centros de trabajo contra el “decretazo”.
La agencia Europa Press ha informado de que las concentraciones seran en Almería, en el Hospital de Torrecárdenas; en Cádiz, en los hospitales Puerta del Mar, Punta de Europa y Jerez de la Frontera; e Granada, en el Virgen de las Nieves; en Jaén, en el Complejo Hospitalario de Jaén; en Málaga, en el Hospital Regional;, en Huelva, en el Juan Ramón Jiménez; y en Sevilla, en el Hospital Macarena.