Mariano Rajoy ha recalado este sábado en Sevilla en su calendario para los que son sus últimos días como presidente en funciones o los primeros de la precampaña, en concreto para clausurar la Convención sobre el Pacto por los Servicios Sociales. Tras pasar por la situación política de bloqueo que vive España, ha hecho de su discurso de clausura de la convención un mitin centrado en las propuestas en materia de servicios sociales del programa con el que el PP concurrió a las elecciones generales del 20 de diciembre -e incluso cinco nuevas- y que entiende que “deben ponerse en marcha en la próxima legislatura” [la presente se constituyó el 13 de enero de 2016].
Entre esas promesas, ha citado un Pacto de Estado por los Servicios Sociales que incluya un proceso de evaluación de la Ley de Dependencia, una Ley Orgánica de Violencia contra la Infancia y evaluar con las comunidades autónomas un modelo de renta mínimas. Y las cinco nuevas son “impulsar el cambio del huso horario” para que sea igual que en Reino Unido y Portugal; “10 días más de permiso de paternidad” para padres con discapacidad o que tengan hijos con este problema, igual que para los casos de progenitores de familias numerosas; establecer “turnos racionales” que permitan la opción de concluir la jornada laboral a las 18.00 horas; crear bancos de horas en empresas, por ejemplo para que los padres puedan ir a reuniones en los colegios; y sellos de calidad para las que establezcan medidas extra de conciliación y que tendrán beneficios fiscales. Para ello se aboga por cambios en la legislación y negociación con las empresas.
“El empleo es el instrumento necesario es imprescindible para financiar las políticas sociales”, ha continuado en un discurso en el que ha vuelto a tirar de datos de su gestión tantas veces oídos cuando el pasado mes de diciembre se enfrentaba a su reelección en las urnas. “Nosotros decimos cómo se va a financiar, a diferencia de otros”, ha argumentado.
Previamente, Mariano Rajoy, que no quiere que su partido cargue con la culpa de repetición de elecciones generales, había reiterado que “continúa vigente” el planteamiento que hizo para liderar un gobierno “de mayoría útil” con el PSOE y C's, formación esta última que incluyó en su propuesta “pese a que no era necesario” por número de votos. Ha insistido en que las coaliciones entre populares y socialistas “se dan hasta el 15 países de Europa”, mientras que en España, en estos poco más de 100 días desde las elecciones generales del 20 de diciembre se han producido cuatro hechos relevantes y uno irrelevante.
“Cuatro hechos relevantes y uno irrelevante”
Los cuatro relevantes son, a su juicio, que el PSOE “se ha negado a hablar con el partido más votado”; ha pactado con C's pero no le ha servido; en estos momentos está intentando hacerlo con Podemos; y “no se oye hablar de los problemas que preocupan a los españoles”, y ha puesto el ejemplo de esta convención con la que el PP sí quiere hacerlo. “Y el quinto hecho, irrelevante, es que nunca hubo tantas ruedas de prensa, fotografías, reuniones, dimes y diretes...”, ha aseverado, mostrando su hastío por “esta comedia de enredos”.
“Con las cosas de comer no se juega y por eso nunca vamos a apoyar un modelo que lleva a la quiebra”, ha proseguido. “Se cambia lo que no funciona. Lo que funciona no se cambia. Pero el programa que han firmado el PSOE y C's tiene un hilo conductor que se entiende muy bien: derogar todas las reformas que hizo el PP para evitar el rescate y garantizar la creación de empleo”. En este sentido, tras insistir en que “las reformas deben continuar”, ha rechazado esta postura de las dos formaciones a las que ofrece un tripartito.
La plana mayor del partido se ha dado cita en este encuentro. Incluidos los vicesecretarios Javier Maroto y Pablo Casado, dentro de esta intención de vender unidad en un momento clave si hay nuevos comicios y tras la brecha que se ha abierto en el partido por los reproches que éstos han hecho a la hora de afrontar la corrupción en Valencia y por el respaldo que ha mostrado Mariano Rajoy a Rita Barberá. Incluso en el perfil del Twitter de Mariano Rajoy se ha colgado una fotografía del trayecto en el AVE Madrid-Sevilla para ilustrar la buena sintonía entre el líder y los exponentes de la juventud del partido que aboga por una regeneración.
En su intervención, el presidente del PP-A, Juan Manuel Moreno, quien también está alineado con esta generación del partido, ha aprovechado para defender su gestión como secretario de Estado de Servicios Sociales, muy criticada por los recortes, pero que él cree que sirvió para cumplir “el mandato” que le hizo Mariano Rajoy en una situación muy complicada: “Nadie se puede quedar en el camino en esta crisis”. Para continuar: “Todo lo que seguía perdido sigue en pie, gracias a los españoles, a las organizaciones sociales y a la política valiente, acertada y comprometida del PP”.
Por su parte, la secretaria general del PP, María Dolores Cospedal, ha criticado que, pasados más de 100 días desde las elecciones generales del 20 de diciembre de 2015, siga “el bloqueo de la situación” lo que “es imputable exclusivamente” al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. “En 24 horas podríamos tener un gobierno sensato, de una gran coalición, en beneficio para España. Presidido por el PP y acompañado por el PSOE y C's”, ha manifestado. Ha sido la encargada de inaugurar la convención donde ha remarcado que Pedro Sánchez “ha perdido y parece que niega la evidencia y está constantemente jugando a puzzles ideológicos que son incapaces de encajar”.